Más de US$ 30 millones costará el futuro parque urbano y olímpico de Arica

Nuevo parque urbano AricaPor Mario Rojas Martínez.

Tendrá barrera para minimizar daños por maremoto:

El complejo contará con piscinas, velódromo, canchas de tiro con arco, áreas verdes, luminarias, senderos y servicios.

Hace medio siglo, cuando en Arica funcionaba la Junta de Adelanto y se iniciaba la construcción de algunas de las obras más importantes de la ciudad, que perduran hasta hoy -complejos residenciales, el terminal portuario y el estadio Carlos Dittborn, que fue una de las sedes del Mundial de Fútbol de 1962 en Chile-, se gestó un proyecto para habilitar una piscina similar a la utilizada en los Juegos Olímpicos.

Así, la “ciudad de la eterna primavera”, con su clima privilegiado todo el año, logró tener destacados nadadores y practicantes de polo acuático, y a la vez recibía a otros deportistas que viajaban desde el sur del país. Pero el complejo, inaugurado el 20 de marzo de 1972, con el paso de las décadas acusó cada vez más su deterioro y falta de mantención.

Para rescatarlo de su abandono, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y el municipio activaron un proyecto, por más de US$ 30 millones, que busca recuperar el recinto ubicado en la zona de la playa Chinchorro y sumarle otras piscinas para saltos ornamentales y para entrenamiento. “Se construirá en una superficie de 4,5 hectáreas, incorporando sitios abandonados alrededor de la actual piscina”, indicaron en el MOP, agregando que se habilitarán butacas para el público, “con un aforo máximo de 2.300 personas”.

Todas las piscinas serán techadas, para evitar los nocivos efectos de la radiación solar en el norte. Además, habrá infraestructura para otros deportes, como un velódromo y una cancha para la práctica del tiro con arco.

Este último, deporte de moda en las últimas semanas en el extremo norte luego de la destacada participación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro del ariqueño Ricardo Soto (16), estudiante de tercero medio.

También se sumarán obras de mejoramiento urbano, como una barrera verde, compuesta por árboles, en un tramo adyacente de la costanera para proteger a los usuarios del complejo ante un posible maremoto, además de pavimentación, luminarias, estacionamientos, señaléticas y senderos peatonales que conectarán con la cercana playa Chinchorro y con el Parque Centenario. Este último, principal pulmón verde dentro de la ciudad, de 10 hectáreas.

Las vías de financiamiento del futuro complejo serán tres: recursos sectoriales (provenientes de ese ministerio), Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) y Municipalidad de Arica.