Incendio destruye semillas de arbusto extinto en I. de Pascua
Fuego se produjo en el Jardín Botánico de Viña del Mar: Una falla eléctrica originó el siniestro que consumió el vivero más antiguo de la Ciudad Jardín y quemó 13 simientes de toromiros.
La pérdida de 13 semillas de toromiro ( Sophora toromiro ) que estaban siendo germinadas para producir nuevos ejemplares de la emblemática especie ya extinta de la Isla de Pascua fue parte del saldo de un incendio que la mañana del martes destruyó el vivero más antiguo del Jardín Botánico de Viña del Mar.
El profesional de esa casi centenaria institución Patricio Novoa explicó que ello equivale a la producción de semillas de toda la temporada de las cerca de 60 plantas cultivadas allí, que son descendientes directos de uno de los últimos ejemplares de esa especie en Rapa Nui. Fue el botánico chileno Efraín Volosky quien, en 1953, rescató semillas de ejemplares del volcán Ranu Kau y que dieron origen a ese linaje viñamarino.
“Ello deja un hiato o vacío en la producción de toromiros en esta temporada”, explicó Novoa, quien señaló que eran de larga data los problemas eléctricos que aparentemente dieron origen al incendio que arrasó con el vivero.
El fuego destruyó, además, semillas de otros árboles nativos en precario estado de conservación, como el pitao o canelillo ( Pitavia punctata ), especie declarada Monumento Natural, además de destruir archivos con información sobre el crecimiento de las plantas. Pero es el contratiempo con la emblemática planta pascuense el que despierta más preocupación.
El arbusto -que era materia prima favorita de los antiguos rapanuí para tallar sus emblemas de poder y representar el espíritu de los antepasados- desapareció de la isla en la década de 1960. La voracidad de las 80 mil ovejas que introdujo en el siglo XX la ganadera Williamsom Balfour arrasó con la vegetación nativa de la isla. El aventurero y explorador Thor Heyerdahl logró rescatar semillas del último árbol del cráter del Ranu Kau antes de que muriera. Este las llevó a Gotemburgo, Suecia, donde existe un segundo linaje sobreviviente de la planta.
Los esfuerzos por reintroducir la planta a partir de los linajes viñamarino y sueco han sido hasta ahora infructuosos. En 2012, expertos de Forestal Mininco lograron clonar de ambos grupos de descendientes mil plantas para formar un nuevo vivero en la Reserva Nacional Lago Peñuelas, a cargo de la Conaf. El director regional de esta institución en la V Región, Héctor Correa, explicó ayer que la sequía y heladas han hecho que hoy sobrevivan 175 ejemplares, de los que se han colectado 495 semillas. Hace dos meses se envió a Isla de Pascua la mitad de ellas, con la esperanza de que puedan readaptarse a las agrestes condiciones de la isla. Ello es difícil, debido a la poca variabilidad genética de los descendientes de los últimos ejemplares.
El secretario técnico del Jardín Botánico de Viña del Mar, Jorge Stambuck, señaló que esa institución aún dispone de semillas colectadas de los ejemplares cultivados allí, por lo que los daños ocasionados por el incendio se pueden recuperar. Admitió sí que la falta de financiamiento impidió renovar a tiempo el sistema eléctrico del vivero. Pero dijo que ajustes presupuestarios permitirán enfrentar las nuevas inversiones que requiere la institución.
Botánico
El chileno Efraín Volosky, en 1953, rescató semillas de ejemplares del volcán Ranu Kau.