“La situación de los campamentos debería ser una prioridad del Estado”

benito baranda america solidariaPor Gabriel Pardo, El Mercurio.

Benito Baranda, presidente Ejecutivo de América Solidaria:

Dice que es preocupante el aumento de 24 mil a 34 mil familias en asentamientos en los últimos 4 años y que las personas, pese a trabajar, no logran salir de la pobreza.

Benito Baranda ha recorrido distintos campamentos a lo largo del país. También ha visitado el asentamiento Manuel Bustos. El presidente ejecutivo de América Solidaria -y miembro del directorio de la Fundación Superación de la Pobreza- afirma que es preocupante el aumento de 24 mil a 34 mil familias en campamentos en los últimos cuatro años, según reveló un estudio de la ONG Techo.

-¿Cómo se podría solucionar el problema de campamentos como Manuel Bustos, donde se declaró desierta la licitación?

-Seguramente lo que se está proponiendo en el caso de Manuel Bustos es una licitación que tiene un costo distinto a lo que las empresas están dispuestas a involucrar. No se van a arriesgar a algo que puede implicar pérdidas. Pero cuando ocurre eso, el Estado debería tener alguna modalidad de administración directa con alguna empresa y no solo que quede en manos de la licitación, que es del mercado, porque los perjudicados son los pobladores.

-Un reciente estudio de Techo reveló que en los últimos cuatro años las familias en campamentos han aumentado de 27 mil a 34 mil. ¿A qué lo atribuye?

-Son varias razones las que están en juego ahí y a lo mejor quedan algunas afuera. Si uno analiza, desde el primer gobierno de la Presidenta Bachelet y durante el gobierno del Presidente Piñera la cantidad de subsidios concentrados en los más pobres fue muy baja. Eso se tradujo en que se construyeron muy pocas poblaciones para personas en extrema pobreza.

-En segundo lugar, para personas que están en la línea de la pobreza y tienen bajos ingresos les cuesta mucho acceder a una vivienda bien localizada para poder mantener los vínculos laborales, educacionales y de salud. Entonces, cuando les proponen salir de estos lugares o acceder a un subsidio que les permita comprar una vivienda, queda fuera del territorio geográfico donde han establecido redes. O los costos de traslado son gigantescos. Como lo que ocurre en Bajos de Mena, en Puente Alto, o en Alerces, en Puerto Montt.

-Lo tercero es que ha habido elementos complejos en la construcción de viviendas para los más pobres, como los territorios, donde han tenido mucha presión por el suelo.

-¿El aumento en la cantidad de familias es esperable o hay que poner atención al fenómeno?

-Es una mala cifra. Porque ha habido buen pasar económico durante estos años así que la cifra debería haber ido tendiendo a la baja y no subir. Si viene un periodo de mucha dificultad económica en los próximos años, lo más probable es que siga subiendo. Pero ahora no hay mucha causa que lo justifique. Los factores que he comentado pueden explicar lo que sucedió, pero nunca a justificarlo. Porque la situación de los campamentos debería ser una prioridad del Estado.

-Otro tema que arrojó el estudio de Techo es que más de la mitad de los hogares en los campamentos perciben menos del sueldo mínimo…

-El tema de los ingresos es un problema grave para Chile en familias de clase media baja y de sectores populares. El umbral de la extrema pobreza para una familia de cuatro personas es de 240 mil pesos. Eso quiere decir que si ganas el salario mínimo y lo llevas a tu casa, donde vives con otras tres personas, estás en extrema pobreza. Es grave para el país lo que sucede porque las personas trabajan jornada completa, informal o formalmente, y lo que entregan a su casa no les permite salir de la pobreza y muchos inclusive se quedan en la extrema pobreza, trabajando jornada completa.

“Ha habido buen pasar económico durante estos años, así que la cifra (de campamentos) debería haber ido tendiendo a la baja y no subir”.
BENITO BARANDA