Providencia: cómo afrontarán la nueva medida los locales nocturnos

Por Maximiliano Vega M., El Mercurio.

Entra en vigencia a partir del próximo mes

Municipalidad indicó que cinco sectores, que concentran el 80% de la venta de alcohol de la comuna, deberán acortar horario de funcionamiento.

“Vamos a hacer ruido en los departamentos y va a ser peor”, se lamenta Eduardo Cáceres mientras toma un vaso de cerveza en un bar del barrio Bellavista.

Locales del sector de Bellavista, y al igual que otras cuatro zonas de la comuna de Providencia (Tobalaba, Manuel Montt, Providencia y Nueva Providencia), a partir de octubre deberán dejar de vender alcohol y cerrar puertas a las 2:00 de la mañana, medida dada a conocer este mes.

Los dueños de los pubs, bares, botillerías y locales en los que se vende alcohol ya han presentado quejas contra la normativa, mientras evalúan medidas para no verse afectados, entre ellas reducir el personal, o cerrar los lugares si las ventas bajan drásticamente.

Para Diego Villarroel, encargado del pub restaurante Pacto, situado en calle Manuel Montt desde hace siete años, dice que “los que estamos catalogados como restobar somos los más perjudicados, nosotros tenemos una carta gastronómica aparte de los tragos. Acá vienen familias a comer”. A la 1:00 de la mañana del martes, efectivamente una familia con dos menores cenaba en el lugar. Los garzones de locales que se verán afectados cuentan que la iniciativa de la municipalidad puede tener una buena intención, pero que les gustaría que se tomara en cuenta que gran parte de los meseros son estudiantes que trabajan en las noches.

Víctor Pérez es diseñador y tiene una empresa llamada Igma. Además trabaja como garzón para costear materiales. “Los garzones sabemos que tenemos un sueldo base, pero gran parte de lo que ganamos es por propina”, dice.

Garzones de Manuel Montt, Tobalaba y Bellavista, afirman que muchos de ellos se dedican a estudiar hasta cerca de la medianoche para poder luego ir a trabajar. Con menos horas de trabajo, dicen, obtendrán menores remuneraciones.

Pero no solo a locatarios y meseros afecta esta medida, también a las botillerías, que deberán cerrar a las 23:00 horas a partir del próximo mes.

Alfonso Toledo trabaja desde hace 19 años en una botillería en Tobalaba. Afirma que ya se ha contemplado que habrá despidos el próximo mes. “Mucha gente, como nosotros, que no somos jóvenes, tendremos que buscar pega en otra parte”, dice.

Desde hace 12 años, Daniel Mogollones, quien destaca que es abstemio, tiene dos botillerías en Bellavista: una en Providencia y otra en Recoleta. “Los que vendemos en botillerías luchamos contra los supermercados (…) nuestra clientela se concentra en la noche y la madrugada, nadie compra en las tardes”, apunta.

Para muchos vecinos, en su mayoría jóvenes trabajadores o universitarios, como Victoria Pessa, estudiante de agronomía y vecina del sector, “el problema es que nos van a quitar el derecho a decidir”.

CIERRE

A las 23:00 horas deberán bajar sus cortinas las botillerías según la nueva normativa.