El impacto del transporte público en los espacios públicos exitosos

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Uno de los logros de los espacios públicos bien diseñados es que la gente los quiera visitar y pasar un tiempo en ellos. Para que esto ocurra, hay varios factores involucrados, como la influencia que ejercen la arquitectura, los edificios históricos y los monumentos, las actividades que hay en el lugar y las facilidades para recorrerlo, entre otros.

En relación a este último punto, no sólo los desplazamientos son importantes, sino que también los accesos a través de las conexiones que ofrece el transporte público. Así se obtiene que un buen equilibrio entre diseño urbano y un transporte planificado influyen en el carácter e impacto social que ejerce un espacio público.

Conoce tres espacios públicos que cumplen con esto.

1. Plaza Ban Jelačić, Zagreb.

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La principal plaza de la capital croata está ubicada en el centro histórico de la ciudad. Las calles peatonales de los alrededores han hecho que toda la gente confluya en la plaza, la que tiene una arquitectura que mantiene el pasado de este lugar construido en el siglo XVII junto a otros edificios más modernos, haciendo que se encuentren distintas etapas históricas en el núcleo de la ciudad. Además, hay tranvías que llegan a este lugar y que conectan con pasan por los barrios históricos de Gradec y Kaptol.

2. Plaza Hidalgo, Ciudad de México.

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Desde vendedores ambulantes hasta conciertos es lo que se puede ver en esta plaza del barrio histórico de Coyoacán en donde está la Casa Municipal. El rol que cumple el transporte en este lugar lo convierte en un punto de encuentro, ya que es posible llegar a pie, en bicicleta, buses públicos y en auto. Además, por las diversas actividades que concentra y por estar cerca de la Universidad Nacional Autónoma de México y de dos de las principales calles comerciales de la ciudad, es visitada por gente de todas las edades.

3. High Line, Nueva York.

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Sin lugar a dudas, uno de los ejemplos más representativos de reutilización de estructuras para convertirlas en espacio público es el High Line. En este caso, las líneas elevadas de los trenes de carga estuvieron a punto de ser demolidas cuando los camiones empezaron a ser el medio principal para esto a partir de los años ’70. Sin embargo, la campaña que inició la organización Amigos del High Line permitió recuperar esta infraestructura y construir un parque público en su superficie. Así, en 2009 se inauguró la primera etapa, en 2011, la segunda, que completó 1,6 kilómetros de extensión, y ya se está trabajando en una tercera fase. Como en este caso la infraestructura disponible atraviesa gran parte de la ciudad, el acceso a ésta es posible a pie o mediante conexiones con otros medios de transporte públicos.