Inicia su operación la central Angostura, la mayor hidroeléctrica en diez años

Por Fabián Álvarez, El Mercurio.

Obra de 316 MW de potencia se ubica en la precordillera del Biobío:

Sumará cerca de 1.500 GWh de energía base al Sistema Interconectado Central y aportará cerca del 3% del consumo de esta línea, que abastece al 90% del país.

Una década tuvo que pasar para que un proyecto hidroeléctrico sobre los 300 MW de potencia instalada iniciara sus operaciones.

Fue en septiembre de 2004 cuando la central Ralco -de propiedad de Endesa y con 690 MW de capacidad- puso en marcha sus turbinas. Y ahora se sumó Angostura, que el miércoles entró en régimen comercial. La central, de Colbún y con 316 MW, se ubica 50 km aguas abajo de Ralco, ambas en la Región del Biobío.

A cuatro años de iniciar su construcción, esta generadora -que costó US$ 671 millones- no solo es la primera que se pone en actividad en la última década, sino que la única que lo hará en el próximo quinquenio, luego del freno al proyecto HidroAysén.

Su entrada al Sistema Interconectado Central (SIC) se preveía para diciembre pasado, pero estuvo desde inicios de este año en fase de prueba, para lograr un nivel de generación estable, alcanzando los 116 GWh al 31 de marzo de 2014.

De esta forma, sumará cerca de 1.500 GWh de energía base al SIC y aportará cerca del 3% del consumo de este sistema, que abastece al 90% del país, entre Taltal y Chiloé. Por sí sola, Angostura puede iluminar a una comuna completa como Ñuñoa.

La construcción de esta central implicó embalsar 100 millones de m {+3} de agua en 641 hectáreas, en la confluencia de los ríos Biobío y Huequecura, lo que formó un lago con potencial turístico. Por eso, la compañía lo fomentó con la construcción de senderos, un mirador, tres campings y dos playas públicas, entre otros atractivos.

Además, se podrá recorrer la presa de 60 m de alto y 160 m de largo, y la caverna de máquinas, que con 33 m de ancho, 145 m de largo y 55 m de alto es la más grande de los proyectos hidroeléctricos del país y donde se alojan las tres turbinas.

La construcción de la central no presentó mayor oposición, a diferencia de Ralco. Acá, 46 familias (129 personas) fueron reasentadas tras lograr acuerdos económicos.

Solo en la fase final, cuando ya se llevaba un 50% de embalse, vecinos reclamaron incumplimiento de los permisos ambientales y lograron que la Corte de Apelaciones de Concepción acogiera una orden de no innovar, lo que frenó por unos días el llenado del lago. Finalmente, la Corte Suprema falló a favor de la empresa.

Con la entrada en operación de esta central, en la que se ocuparon 783 mil m {+3} de hormigón, Colbún completa un plan de inversiones por US$ 2.000 millones, que significó agregar 900 MW al SIC.

316 MW de potencia suman las tres turbinas: dos de 135 MW y otra de 46 MW.

40 km tiene la línea de transmisión hacia la subestación donde se inyecta energía al SIC.

46 familias fueron relocalizadas, las que obtuvieron el equivalente a 2,5 veces de lo que poseían.