25 comunas concentran un tercio de los recursos destinados a recolectores de basura

Por Nadia Cabello, El Mercurio.

Municipios se debaten entre esperar resolución de Subdere o firmar acuerdos entre concejos y empresas de aseo:

Alcaldes reconocen que podrían gastar ese dinero en cualquier ítem, pues les llegó como “fondos de libre disposición”.

En enero pasado se depositó en las cuentas de todos los municipios del país un dinero extra a su presupuesto. Eran los recursos comprometidos por la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere) al finalizar el paro de recolectores de basura -el 29 y 30 de julio de 2013- y cuyo destino era aumentar los sueldos de esos trabajadores.

Pero ese objetivo no quedó plasmado explícitamente en el traspaso y, por el contrario, los recursos fueron ingresados a los presupuestos municipales como fondos de libre disposición.

En total son $15.691 millones que se distribuyeron entre los 345 municipios del país y el territorio antártico, dinero que hoy, “en teoría, un alcalde lo podría gastar en cualquier cosa. Eso es un riesgo”, reconoce el edil de Maipú y presidente de la Asociación Chilena de Municipalidades (AChM), Christian Vittori.

El monto que cada territorio recibió se determinó de acuerdo con la cantidad de predios exentos de derechos de aseo, es decir, mientras más vecinos que no pagan ese tributo viven en la comuna, más dinero se les entrega. Es así como 25 municipios concentran un tercio de esos recursos frescos, unos $5.900 millones.

La lista la lideran Puente Alto y Maipú, las dos comunas más pobladas del país, con $704 millones y $337 millones, respectivamente. Las sigue San Bernardo, con $332 millones.

Pese a tener ya abonados esos recursos y ante la amenaza de un nuevo paro de los recolectores de basura desde fines de este mes -el primero que enfrentaría la nueva administración de Michelle Bachelet-, los alcaldes agrupados en la AChM aseguran que no pueden traspasar esos dineros a las empresas de aseo sin que sea declarado un acto ilegal.

“Estamos hablando de modificar contratos con empresas privadas, algo que no se puede hacer así como así. Si lo hacemos, Contraloría nos cae encima inmediatamente”, asegura Vittori. Por eso esperarán hasta que la Subdere plantee su solución, que será presentada el próximo lunes a los jefes comunales.

En la Asociación de Municipalidades de Chile, la organización paralela que crearon los alcaldes de la Alianza, tienen una opinión distinta. Su presidente y edil de Lo Barnechea, Felipe Guevara, asegura que “los municipios hacen eso todos los días con las empresas de electricidad y comunicaciones. La única precaución que hay que tener es contar con el acuerdo del concejo y todo totalmente documentado”.

Pero mientras no haya una instrucción de la Subdere, los municipios se debaten entre seguir esperando, acercándose con ello al plazo límite para el paro, o seguir la línea de Lo Barnechea. Esto último es lo que ya decidieron hacer en Puente Alto, Estación Central y Colina.

“Es que si no sabían qué hacer con la plata, porque dicen que no la pueden repartir, yo no sé para qué la recibieron. Hay que imaginar los dividendos que dan esos dineros en un depósito a plazo. ¿Los trabajadores recibirán esa ganancia?”, pregunta Guevara.

MENOR APORTE

Trece comunas recibieron menos de un millón de pesos, entre ellas, Isla de Pascua y Torres del Paine.