Gobierno lanzará nueva política rural que focalizará planes sectoriales en un tercio de la población nacional

Por Manuel Valencia, El Mercurio. (22/04/14)

Plan derivaría en un cambio del calendario escolar en el campo:

Iniciativa se elaboró a partir de un informe de la OCDE que detectó que los chilenos que viven fuera de la vida urbana son un 29%, el doble de lo estimado actualmente.

Marzo en la ciudad es sinónimo de vuelta de vacaciones, un complejo retorno al trabajo y la rutina y, para los estudiantes, de comienzo de clases. Pero en el Chile rural se vive otra clase de marzo: en localidades como Cardonal, en la VII Región, la población local se aboca a la cosecha de frutas y hortalizas. Por lo mismo, las madres temporeras inician una temporada de fuerte carga laboral y los niños se ven obligados a retrasar el ingreso a clases hasta abril. En marzo los buses provistos por la municipalidad de Curanipe van vacíos.

“En estos casos, hemos detectado que se requiere implementar un calendario escolar distinto para las zonas rurales, porque marzo es el peak de la cosecha y no tiene sentido que los padres dejen el packing. Y no solo eso, también la malla. ¿No es más necesario para un estudiante de una zona rural obtener conocimientos agrícolas? Por supuesto, que sí. Y esa diferencia tiene que ser recogida en la política pública”, afirma el ministro de Agricultura, Luis Mayol.

Ese contraste entre ciudad y campo es el que busca armonizar una nueva Política de Desarrollo Rural que será lanzada en los próximos días, mediante un instructivo, por el Presidente Sebastián Piñera.

El documento, que fue elaborado en los últimos dos años por representantes de los ministerios de Agricultura, Vivienda, Obras Públicas, Transportes, Economía, Desarrollo Social, Secretaría General de la Presidencia, Medio Ambiente y Bienes Nacionales, busca equilibrar los servicios y la calidad de vida que el Estado presta en ciudad, con lo que se ofrece para la zona rural.

“La política busca recortar las brechas de servicios como el agua y la luz, la educación y la salud. Hay que cambiar la mirada para que el mundo rural realmente pueda cubrir sus carencias”, agrega.

La política rural se fijó como plazo para concretar los cambios a 2024, con un mecanismo de revisión cada cuatro años. En ese horizonte, se comprometió a diversos actores del mundo rural para que el plan tenga continuidad entre gobiernos, con el objetivo de que se presenten los proyectos de ley para recortar las brechas con la ciudad.

Para diseñar la política, el Gobierno encargó a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) la elaboración de un informe que diagnosticara el grado y estado de la ruralidad del país. El documento reveló que Chile es menos urbano de lo que se cree: si las estadísticas actuales del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) establecen hasta un 13,1% de ruralidad (por habitantes de localidades de hasta dos mil personas), las de la OCDE estiman que 29% de la población chilena no es urbana.

Para ello, la entidad utiliza otra metodología: define como rural las zonas con una densidad poblacional inferior a 150 habitantes por km2 y con una población máxima de 50 mil personas.

“Esta población se caracteriza por vivir relacionada con actividades económicas como la agricultura, ganadería, minería, en términos generales con actividad económica primaria. Adicionalmente muchos de ellos tienen problemas de conectividad y deficiente entrega de servicios públicos y la calidad de los mismos dista bastante de la que se puede obtener en los centros urbanos más desarrollados lo que incentiva la migración de la población joven en busca de otras oportunidades”, explica el subsecretario de Desarrollo Regional, Miguel Flores.

”La política busca recortar las brechas de servicios como el agua y la luz, la educación y la salud. Hay que cambiar la mirada para que el mundo rural pueda cubrir sus carencias”.

LUIS MAYOL

MINISTRO DE AGRICULTURA