Alcaldes y vecinos del lago Rapel inician ofensiva para frenar criadero de cerdos

Por Mª Angélica Venegas, El Mercurio.

Preparan acciones legales tras su aprobación ambiental:

Temen que eventual contaminación de aguas, malos olores y proliferación de moscas perjudiquen el desarrollo del turismo.

Representantes de la Corporación de Desarrollo y Protección del Lago Rapel (Codepra), junto a los alcaldes de las comunas de Las Cabras, Litueche y La Estrella, anunciaron para esta semana la presentación de un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Rancagua para intentar revertir la construcción de un nuevo plantel de cerdos en la zona, que criará unos 93 mil animales al año.

El proyecto pertenece a la empresa MaxAgro y ya fue aprobado a fines de enero por el Comité de Evaluación Ambiental de O’Higgins. Considera una inversión de US$ 18 millones y la construcción -6 km al noreste de La Estrella- de 105 pabellones de crianza animal.

La decisión de aprobar la planta causó desazón en el sector turístico del lago Rapel, que teme un impacto negativo en el promisorio desarrollo de la cuenca declarada recién en diciembre pasado como Zona de Interés Turístico (ZOIT), por eventuales malos olores, contaminación de aguas y proliferación de moscas que, dicen, podría causar el futuro criadero.

La Codepra – que reúne a 20 mil residentes y propietarios de casas de verano en el entorno del lago Rapel- fue una activa promotora de la declaratoria, y uno de los principales efectos que se buscaba con ello era frenar la instalación de agroindustrias que podrían ser contaminantes.

Una posición que comparten los alcaldes de las tres comunas que bordean el lago, y que aportaron sus equipos jurídicos para buscar una estrategia judicial conjunta para frenar el proyecto. La comuna de La Estrella, reclama su alcalde, Gastón Fernández (UDI), ya debe soportar los olores provenientes de otra planta de cerdos.

Aunque el plantel de cerdos se ubicará a 3 km del poblado de Pulín (200 habitantes) y a 7 km del embalse, y fuera del límite de la ZOIT, el presidente de la Codepra, Óscar Anwandter, afirma que la aprobación del proyecto es “una derrota para la Zona de Interés Turístico (…) Estamos todos frustrados: los alcaldes, la comunidad y nosotros”.

“Creemos que aquí hubo una instrucción no técnica ni profesional -agrega Anwandter- pues servicios que en su momento hicieron observaciones terminaron aprobando, y los problemas de agua y suelo no han cambiado desde el inicio de la tramitación del proyecto”.

Esto, reclaman los opositores al proyecto, porque en mayo de 2013 Sernatur se pronunció disconforme con una de las aclaraciones presentadas por la firma respecto del impacto de las emanaciones sobre el normal desarrollo turístico del lago Rapel.

Pero el 13 de enero pasado, ante una nueva aclaración de la firma, el servicio se pronunció conforme condicionado a que en la etapa de operación la empresa monitoree periódicamente la emanación de malos olores.

Uno de los puntos cuestionados es la instalación de una cortina vegetal con bosque de eucaliptos que MaxAgro ofreció instalar como dispersor de malos olores. Codepra afirma que el riego de los bosques se realizará con los residuos líquidos del proceso productivo, que tendrían cerca de un 40% de orinas y fecas de los animales. Como el terreno no tiene capacidad de absorción, afirman, esas aguas escurrirían a algunos de los esteros que llegan al lago.

Ante los cuestionamientos, el gerente general de MaxAgro, Cristián Kühlenthal, afirma que “para MaxAgro nació, con la aprobación de la resolución de calificación ambiental, un nuevo desafío, que es poder trabajar de la mano con cada uno de nuestros vecinos para que este proyecto se transforme en una oportunidad para ellos (…) Solo les pedimos que nos den la oportunidad de escucharnos”.

PROYECTO

El plantel de cerdos considera una inversión de US$ 18 millones.

”La aprobación es una derrota para la Zona de Interés Turístico. Estamos todos frustrados: los alcaldes, la comunidad y nosotros”.

ÓSCAR ANWANDTER

PRESIDENTE DE CODEPRA

”Les pedimos que nos den la oportunidad de escucharnos (…), que cada uno pueda evaluar la realidad de este proyecto y los beneficios que tendrá para ellos”.

CRISTIÁN KÜHLENTHAL

GERENTE GENERAL DE MAXAGRO