Atacameños rechazan la construcción de nuevo museo arqueológico de San Pedro

Por Mario Alejandro Rojas, El Mercurio.

Recurso de protección en Corte de Apelaciones:

Comunidad acusa ilegalidad en el permiso ambiental y que no fueron consultados para desarrollar el proyecto.

La comunidad indígena atacameña de San Francisco de Chiuchiu presentó un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Antofagasta para que esa instancia judicial declare ilegal el permiso ambiental entregado para construir el nuevo museo arqueológico de San Pedro de Atacama.

La acción judicial acusa “arbitrariedad” en la resolución exenta 237 de la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Antofagasta, que el viernes 30 de agosto aprobó, “sin consultarles previamente”, la declaración de impacto ambiental para la “Reposición Museo Arqueológico”.

Esto, a su juicio, contraviene el Convenio N° 169 de la OIT (Organización Internacional del Trabajo), ratificado hace cinco años por Chile, que estipula que los grupos indígenas deben ser consultados ante medidas legislativas o administrativas que afecten el patrimonio cultural y el desarrollo en los territorios donde se ubican.

“Se contempla la remodelación completa del museo y el traslado provisorio de las piezas que son patrimonio del pueblo atacameño”, comentó Osvaldo Galleguillos, presidente de la comunidad de Chiuchiu, ubicada 138 km al noroeste de San Pedro.

La iniciativa demandará una inversión de $9.600 millones, ya aprobados por el Consejo Regional, y considera la habilitación de 3.385 m {+2} que albergarán más de 323 mil piezas.

El complejo, que duplicará la infraestructura del actual museo, mantendrá su emplazamiento actual junto a la plaza del turístico poblado. La misma donde fue construido en la década de 1960 por el sacerdote Gustavo Le Paige. La muestra, que pertenece a la U. Católica del Norte, recibe unas 30 mil visitas al año.

La Municipalidad de San Pedro, que participa en el proyecto, informó que aunque tengan la autorización ambiental, no se ejecutará sin consultar antes a las comunidades locales y que los trabajos partirían en 2014.