Un banco, el nuevo desafío de La Legua

Por Sergio Rodríguez, La Tercera.

Dentro de pocos días, una sucursal ServiEstado iniciará su marcha blanca con muros protegidos por planchas de acero, pilares antialunizajes y, sobre todo, pregonando confianza en una población expectante.

La gente pasa y mira con curiosidad hacia la esquina de Alcalde Pedro Alarcón con Los Copihues, ubicada justo al medio de la población La Legua, comuna de San Joaquín. Y no porque aquella construcción que se acaba de terminar, de un piso y cerca de 300 metros cuadrados, luzca un blanco impecable. Tampoco por los barrotes gruesos de sus ventanas o sus focos con sensores de movimiento. Lo que tiene a todo el mundo intrigado es lo que allí funcionará: un banco, el primero y único en varios kilómetros a la redonda.

Se trata de una sucursal ServiEstado, de BancoEstado, que dentro de pocos días iniciaría su marcha blanca, con dos cajas y dos mesones de atención para microempresarios, un cajero automático y capacidad operativa para gestionar más de 40 tipos de transacciones.

“Será una gran ayuda, porque aquí no hay dónde pagar las cuentas. Para hacer trámites hay que ir al paradero 5 de Vicuña Mackenna, a casi 15 cuadras de aquí, al barrio Franklin o a la Gran Avenida”, cuenta Susana Corral, quien desde hace cinco años trabaja limpiando la Plaza Salvador Allende, frente al nuevo banco, en el sector conocido como La Legua Vieja.

Entre los vecinos, las opiniones son disímiles. “No todos son choros o narcos, aquí está lleno de gente trabajadora que lo va a cuidar”, asegura la comerciante Rosalía Venegas (39), a propósito de la fama de esta población fundada en los años 30, donde las rencillas entre bandas rivales y los cortejos fúnebres que disparan al aire conviven con una férrea solidaridad comunitaria. El bodeguero Juan José Oyarzo, en cambio, vive al lado del banco y es más reticente. “No me da miedo, pero me tinca que igual lo van a asaltar, es muy tentador. Ojalá que haya hartos carabineros dando vueltas”, lanza.

En BancoEstado informan que esta iniciativa se inserta dentro de su plan de expansión para 2013, que proyecta incorporar 32 nuevas sucursales en todo Chile.

“La oficina en La Legua responde a nuestro interés de profundizar la bancarización, porque constituye un importante instrumento de integración económica y social. Allí trabajarán seis personas, tres de las cuales son y viven en la población, lo que para nosotros reviste una tremenda importancia, porque impacta positivamente en su calidad de vida”, detalla Segismundo Schulin-Zeuthen, presidente de la institución financiera.

Una de esas tres personas es el contador René Aliaga (40), residente de La Legua Emergencia desde los cinco años y quien ahora se desempeñará como cajero del banco. “Estamos confiados en que la gente nos respetará. Aquí hay viejitos que tienen que caminar kilómetros para buscar su jubilación, o a lo más tomar un colectivo, porque no tienen para taxi. Ahora no tendrán que salir de su barrio”, dice.

En cuanto a posibles asaltos, es claro: “No me da miedo, pero igual nos enseñaron a enfrentar crisis, como en cualquier oficina”.

El banco, de todos modos, no se confía sólo en la nobleza de la comunidad. Pese a que habrá sólo un vigilante, el que estará armado con un revólver 38 especial -el cual tiene 20 años de experiencia y declinó hacer comentarios-, el inmueble cuenta con avanzados sistemas de vigilancia.

Arturo Ramírez, inspector técnico de la firma Intexa Ingeniería y evaluador de la obra final, destaca que hay más de 10 cámaras de seguridad, alarmas de temperatura y sensores de movimiento, y detalles como cortinas metálicas eléctricas para proteger los vidrios exteriores, con el objeto de que nadie deba salir a poner un candado.

“Todo el perímetro de la construcción es una caja blindada, con láminas de acero que van por dentro de muros y techos, pilares metálicos antialunizajes enterrados varios metros y conectados a la estructura general y zonas reforzadas”, destaca.

Para el subsecretario de Prevención del Delito, Cristóbal Lira, la inauguración será “una muestra concreta de las mejoras logradas en materia de seguridad, y se enmarca en el trabajo que tiene por objetivo prevenir la delincuencia, integrar a la comunidad y acercar los servicios a la ciudadanía”.

La construcción de la sucursal se inserta dentro de la denominada “Iniciativa La Legua”, que es un proyecto global de mejoramiento sociocultural y urbanístico del sector, impulsado por el gobierno, en el cual desde 2011 trabajan cinco ministerios, liderados por Interior, y que acaba de inaugurar su obra emblemática: la remodelación de Av. Jorge Canning, que justamente nace en la esquina del banco y atraviesa toda la población.

Javiera Benítez, coordinadora de la iniciativa, afirma que “el desafío es integrar este sector a muchos servicios públicos, que por mitos o prejuicios aquí no llegan”.

La idea de instalar un banco en esta población surgió en 2011, cuando el actual ministro de Defensa, Rodrigo Hinzpeter, ejercía en Interior. La inspiración fue una experiencia similar implementada en Brasil.

“Yo conocí y visité varios programas de intervención en barrios críticos, entre ellos, uno del gobierno de Río de Janeiro para las favelas del Complejo Alemao. Allí, la instalación de un banco fue una inyección para la gente y ellos respondieron cuidándolo. A principios de 2012 nos contactamos con BancoEstado y les propusimos hacer lo mismo en La Legua, porque estamos seguros de que ayudará a su gente y será el principio de nuevas aperturas”, dice. Ya está casi todo listo, el cajero incluso está en línea y entregando saldos y cartolas. Sólo falta cargarlo de dinero. Mauricio Astudillo (47), presidente de las organizaciones sociales de La Legua, reconoce que hay expectación.

“El barrio necesita más servicios y creemos que todo va a salir muy bien. No pensamos en robos ni en nada malo, eso no es tema para nosotros, nos merecemos esta oportunidad”, asegura.