Pacific Hydro: “Hoy nos estamos tomando más tiempo en los proyectos”

Por Antonio Astudillo M., La Tercera.

Gerente de desarrollo explica que esto es necesario dada la coyuntura que enfrenta el sector.

Proyectos hidroeléctricos por 500 megawatts, en distintas etapas de desarrollo, se encuentra estudiando la australiana Pacific Hydro, propiedad del IFM Australian Infrastructure Fund.

Según el gerente de desarrollo de la firma, Alfredo Zañartu, la eléctrica estima realizar inversiones del orden de US$ 1.500 millones en desarrollar centrales de pasada en la cuenca del Cachapoal. Entre ellas, las centrales Tres Ríos y Cortaderal (30 MW y 80 MW), ambas en estudio de factibilidad, mientras que la central Las Leñas (180 MW) se encuentra en proceso de diseño conceptual. A esta se agrega la central Coya II, que tendrá una capacidad instalada de 110 MW. En evaluación ambiental se encuentra el proyecto Nido de Aguila (172 MW). En este sentido, indica, las mayores exigencias ambientales y de las comunidades han llevado a la firma a realizar estudios más profundos para el desarrollo futuro de las centrales.

“Tenemos proyectos, como Coya II, donde estamos trabajando en la línea de base ambiental para presentar un EIA en los próximos años, y estamos levantando información para los siguientes, que son Las Leñas, Cortaderal y Tres Ríos. Hoy estamos tomándonos más tiempo en los proyectos, especialmente por la coyuntura que se ha dado. Queremos presentar estudios lo más completos y detallados posible, para que la evaluación sea más simple y sin ninguna apertura a cualquier discusión”, dice.

En octubre, Pacific Hydro obtuvo la certificación de la central Chacayes (111 MW) para la emisión de bonos de carbono (CER, en inglés), lo que le permitirá convertirse en una de las mayores del país en esta condición, abatiendo 357 mil toneladas de CO2 al año. “El proceso de Chacayes se inició en 2010. Se hizo una revisión por parte de la ONU y de organismos independientes reconocidos por ella”. Con esto, señala el ejecutivo, la firma -junto al joint venture Tinguiririca Energía, propietario de las centrales La Higuera y La Confluencia- logra certificar reducción de emisiones por 1,25 millones de toneladas de CO2, la mayor para una empresa eléctrica.