Casona de Londres 38 sufre derrumbe y corre riesgo de nuevos desplomes

El piso de una habitación de la planta superior colapsó y hoy ese lugar se encuentra clausurado.

por La Tercera

La casona de Londres 38 es uno de los lugares emblemáticos del barrio París-Londres. Mensualmente la visitan cerca de 3.000 personas. La mayoría son jóvenes interesados en conocer las instalaciones y la historia de este inmueble que, entre 1973 y 1974, fue utilizado por la Dirección de Inteligencia Nacional (Dina) como centro de detención. Ahí estuvieron retenidas más de 2.000 personas; de ellas, 96 fueron ejecutadas.

Es también el único de estos recintos que permanece en pie, ya que los centros de detención de Villa Grimaldi y José Domingo Cañas fueron demolidos. De hecho, la corporación que administra este lugar ha intentado conservarlo tal cual estaba en la época de la Dina. Pero esto no ha sido sencillo.

La casona tiene graves problemas estructurales y hace dos meses sufrió un derrumbe en uno de los baños del segundo piso, que fue usado por la Dina como sala de interrogatorios. Se produjo a fines de enero, cuando se realizaban trabajos en el lugar. “Un maestro que retiraba uno de los inodoros se apoyó en un borde y una parte del piso se desplomó. Fue la primera señal de alerta”, cuenta la directora ejecutiva de la corporación Londres 38, María José Pérez.

Como el inmueble es Monumento Histórico desde 2005, los funcionarios dieron aviso de esta situación al Consejo de Monumentos Nacionales (CMN). Este organismo recomendó retirar el piso para quitar peso, lo que se hizo hace dos semanas. Desde entonces, ese lugar está cerrado.

El Centro Nacional de Restauración y Conservación de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam) hizo un análisis de este recinto y concluyó que las vigas tienen problemas de humedad y están afectadas por plagas de insectos.

La estructura que está debajo de este lugar, una cúpula ubicada justo sobre la entrada a la casona, es de yeso falso y también presenta problemas. “Temimos que también se viniera abajo, lo que era un riesgo para las personas, y por eso la reforzamos de manera provisoria”, explica Pérez.

Otro lugar de la casona que corre riesgo de derrumbe es un segundo baño de la planta superior, que ahora está clausurado. La escalera que llevaba a la que fue sala de interrogatorios y tortura está desestabilizada y ya no se utiliza. Además, varias de las paredes del inmueble tienen grietas y forados.

Espacio de memoria

La casona de Londres 38 fue construida en 1924 por el arquitecto Ricardo Larraín Bravo, el mismo que diseñó la basílica de Los Sacramentinos. Tiene un estilo clásico, dos pisos, 500 m2 y diversas habitaciones que la convierten en una especie de laberinto.

Fue una residencia familiar hasta 1970, cuando la compró el Partido Socialista para instalar su sede comunal. La Dina la ocupó entre 1973 y 1974 y luego fue entregada al Instituto O´Higginiano. Tras diversas gestiones de organizaciones de familiares de detenidos, la casa fue recuperada para convertirse en un espacio de memoria. Hoy, está administrada por el Ministerio de Bienes Nacionales y ahí funciona la corporación Londres 38.

Pese a los múltiples usos que ha tenido, el inmueble nunca ha sido restaurado. El año pasado, los arquitectos Miguel Lawner (quien diseño el edificio de la Unctad y asesoró la construcción del GAM) y Marco Antonio Vidal elaboraron un proyecto de recuperación arquitectónica de la casona. Contempla su reforzamiento estructural y también la habilitación de un espacio de la memoria.

Lawner precisa que no se trata de un museo: “No habrá muestras, sino que la idea es que el lugar se mantenga desnudo y tal como estaba cuando fue ocupado por la Dina. La casa misma es el centro de interés”.

Ejecutar este proyecto tiene un costo de $450 millones, los que aún no se consiguen. Estaban contemplados en el presupuesto estatal de 2010, pero fueron suspendidos debido a las urgencias del terremoto. Bienes Nacionales solicitó nuevamente los recursos el año pasado, pero fueron rechazados. “No sabemos por qué”, asegura Pérez. “Ahora este problema agrava la recuperación. La casa tiene un daño estructural que pone en riesgo la seguridad de las personas que la visitan”, agrega.

La prueba de fuego será el próximo 29 de mayo, cuando se celebre el Día del Patrimonio. La casa se sumó a este circuito en 2008 y en la jornada de 2011 llegaron más de 1.300 personas.

Hoy, en este lugar se realizan diariamente dos recorridos guiados, pero también se puede conocer fuera de esos horarios. Pese a los problemas estructurales, estas visitas no se han suspendido. Sí se han tomado algunas precauciones, como evitar que en la planta superior haya más de 50 personas.

Para enfrentar la emergencia, la corporación solicitó recursos del fondo de emergencias del Consejo de Monumentos.