Minvu estudia bono de $ 630.000 para venta de viviendas sociales

El beneficio premiará a quienes vendan una propiedad y compren otra de hasta 2.000 UF.

por Manuel Valencia, La Tercera

La idea es premiar a aquellas familias que alguna vez fueron vulnerables y que, con esfuerzo, trabajo y tiempo, se transformaron en emergentes y de clase media.

Se trata del bono de movilidad social, un aporte de 30 UF (630.000 pesos), que se estudia pagar a las personas que vendan una vivienda social de su propiedad y que busquen comprar otra -por lo general, de mayor valor-que les permita mejorar su calidad de vida.

Según explica el jefe de la División de Política Habitacional (DPH) del Minvu, Guillermo Rolando, se estudia aplicar el nuevo bono de movilidad social para quienes vendan viviendas sociales de hasta 650 UF ($ 13.650.000) de las políticas habitacionales anteriores y para quienes compren, con ese aporte, propiedades de hasta 2.000 unidades de fomento ($ 42.000.000).

“Es razonable que el Ministerio de Vivienda y el Estado puedan ayudar a las familias que hacen un esfuerzo. Si se vende la vivienda a alguien con subsidio y si se demuestra que con esos recursos esa persona quiere obtener una vivienda de hasta 2.000 UF, se aplicará el beneficio”, detalla Rolando.

Este bono no implica entregar un nuevo subsidio de vivienda a quien desee cambiarse de casa, puesto que por ley, el Estado puede entregar este beneficio una sola vez por postulante.

“El propósito es que el beneficiario sume al avalúo comercial de su vivienda este bono y con eso pueda acceder a una mejor opción de casa en el mercado. Así también, las familias vulnerables pueden acceder a una vivienda de buena calidad y ubicación”, agrega el directivo del Minvu.

Nuevo subsidio

La iniciativa está contenida en el nuevo subsidio Fondo Solidario de Elección de Vivienda (FSEV) que, tal como adelantó La Tercera, será el instrumento con el que operará la política habitacional para segmentos vulnerables a partir de este año.

El nuevo subsidio actualmente está en la Contraloría y, según fuentes del Ministerio de Vivienda (Minvu), tendría su primer llamado en marzo próximo.

En estos días, además, se estudian los detalles del beneficio, la cantidad de recursos y subsidios asignados en la Dirección de Presupuestos (Dipres).

Una vez que opere, al igual que el actual subsidio Fondo Solidario de Vivienda (FSV), el beneficio tendrá una modalidad denominada Adquisición de Vivienda Construida (AVC), que entregará hasta 800 UF ($ 16.800.000), para las familias vulnerables que decidan utilizar el subsidio en la compra de una vivienda usada.

Tal como sucede hoy, las familias deberán aportar un ahorro mínimo de 10 UF ($ 210.000). Pero en esta modalidad incluirá incentivos económicos, que se traducirán en un mayor monto del subsidio, para los grupos que logren ahorrar más. Lo mismo sucederá con aquellos que tengan más antigüedad de postulación.

Asimismo, como sucede con el beneficio actual, se bonificará a las familias que tengan un integrante discapacitado o adulto mayor.

39.000 subsidios para clase media en 2012

El Ministerio de Vivienda informó que para este año se dispondrán 39.000 subsidios del programa DS-01 (entre 650 a 2.000 UF) para los grupos emergentes y medios.

Esa cantidad implica un aumento de seis mil subsidios respecto del año pasado, cuando se dispusieron 33.000 beneficios, en dos llamados (uno de 20.000 y otro de 13.000 beneficios).

Con ello, se busca entregar 100.000 subsidios para clase media durante el actual gobierno.

Según el Minvu, el primer llamado del subsidio DS-01 de este año se realizará en marzo próximo. Un segundo y tercer llamado se realizarían entre agosto y noviembre.

En tanto, de acuerdo con el balance del beneficio en 2011, realizado por el Minvu, de las 33.000 familias, 17.555 fueron grupos de clases emergentes y 15.445, de grupos medios.

En ambos llamados postularon más de 70.000 familias para los 33.000 cupos disponibles. De ellos, el 85% corresponde a familias con más de un integrante y el 15%, a personas solteras o sin hijos.

“El apoyo a las sacrificadas familias de clase media será una política permanente del gobierno. Queremos darles el empujón necesario para que con su esfuerzo cumplan el sueño de la casa propia” , señaló el ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez.