“La energía nuclear ha muerto por un incurable ataque de fuerzas de mercado”

Amory Lovins, especialista en energía alternativa:

A juicio del experto, las energías renovables están siendo cada vez más competitivas y ahorran costos.

Pamela Gutiérrez (El Mercurio)

El último apagón producido en gran parte del país, debido a la falla de una subestación en Linares, reveló una vez más la debilidad energética de Chile.

La discusión aún no concluida sobre HidroAysén, la polémica aprobación de la explotación del yacimiento de carbón de isla Riesco y el descarte del gobierno chileno de la utilización de energía nuclear tras el desastre de Fukushima están en la mira de especialistas internacionales. Es el caso de Amory Lovins, presidente del consejo de administración del Instituto Rocky Mountain, un think tank que promueve el uso eficiente de energías y que ha asesorado a 50 países en 40 años.

Lovins participará en la Expo Eficiencia Energética, organizada por la Agencia Chilena de Eficiencia Energética, que estará entre el 1 y el 3 de diciembre en la Estación Mapocho.

Lovins sostiene que la utilización de fuentes de energía alternativa es un tema económico, sobre todo en un país de libre mercado como Chile.

“La mitad de la nueva electricidad generada en el mundo entre el 2008 y el 2010 provenía de energías renovables. Sólo en 2010 las energías renovables, fuera de las grandes represas hidroeléctricas, obtuvieron US$ 151 mil millones de inversión privada y añadieron 60 mil millones de watts, excediendo la capacidad nuclear instalada”, dice.

Sostiene que ello es posible, ya que las tecnologías eólica y solar “a menudo ofrecen menores costos y riesgos, a diferencia de represas gigantescas y lejanas. Por eso que la energía eólica ganó en Brasil las licitaciones de energía, derrotando al gas”.

En el caso chileno, Lovins sentencia que “es rico en energías renovables y tiene costos de electricidad relativamente altos”, por lo cual propone una alianza entre consumidores y proveedores para producir ganancias con el ahorro de energía, y no por la venta de más electricidad.

Energía nuclear

Respecto de la polémica sobre la construcción de plantas nucleares para la generación de energía, para Lovins es inviable: “La energía nuclear ha muerto por un incurable ataque de fuerzas de mercado, debido a que los costos y riesgos financieros son demasiado altos para los inversionistas”.

Explica que en Estados Unidos, 34 nuevas plantas han gozado de seis años de subsidios estatales que equivalían o excedían su costo de construcción, y, sin embargo, no han sido capaces de atraer capitales privados.