Independencia: llegada de edificios amenaza a barrio patrimonial

La ausencia de un plan regulador permitiría la edificación de al menos tres torres de veinte pisos junto a conjunto habitacional diseñado por el prestigioso arquitecto Luciano Kulczewski.

Por Sebastián Sottorff. El Mercurio

A pocas cuadras del ajetreo de la avenida Independencia y a cinco minutos del caos que caracteriza el centro de Santiago, un oasis residencial aún se mantiene en pie. Se trata de la villa Los Castaños, un conjunto de casas diseñadas por el arquitecto chileno Luciano Kulczewski, autor de obras emblemáticas capitalinas, como el acceso al funicular del cerro San Cristóbal, la sede del Consejo de Monumentos Nacionales y el edificio del Colegio de Arquitectos.

Este barrio fue concebido para albergar a la clase media de la década del treinta y aún mantiene las características de una villa típicamente residencial, con valiosos inmuebles que hoy están reconocidos por la Ley de Monumentos. De hecho, sus vecinos lograron que la villa fuera declarada como una Zona Típica en 1996, y más tarde como zona protegida, mediante un decreto municipal, en el año 2008.

Sin embargo, por su ubicación y creciente plusvalía, este sector se ha vuelto cada vez más interesante para las inmobiliarias, ya que la construcción de una estación de Metro en la plaza Chacabuco mejorará sustancialmente su conectividad. “En toda la comuna se pueden levantar edificios, pero las inmobiliarias quieren construir justo al medio de un barrio patrimonial. ¿Cómo vamos a permitir que destruyan estos lugares?”, afirma Carola Rivero, dirigente del movimiento ciudadano Mejor Independencia.

Si bien para algunos vecinos la llegada de los edificios es un buen signo de progreso para la comuna, para otros, la edificación de condominios es la amenaza que podría destruir el valor patrimonial de este tradicional sector de la capital.

Interés inmobiliario

En el año 2007, justo un año antes de que los vecinos lograran que el municipio declarara a la población Los Castaños como una zona protegida, un grupo de inmobiliarias solicitó al Departamento de Obras los permisos respectivos para construir al menos tres edificios de veinte pisos en la calle Inglaterra, que colinda con la mayoría de los inmuebles protegidos. Y como la solicitud ingresó al municipio un año antes de que los residentes lograran el reconocimiento patrimonial de sus casas, no había impedimentos legales para permitir su construcción.

Sin embargo, y para resguardar el carácter patrimonial del barrio, el municipio revocó los permisos, pero luego de esa resolución las inmobiliarias presentaron un reclamo de ilegalidad contra el alcalde de Independencia, aludiendo a que el edil no tenía las facultades para anular estas autorizaciones.

Finalmente, hace un par de meses -y tras una votación de los concejales-, el municipio se desistió de la causa y fue así como algunos permisos retomaron su vigencia y las inmobiliarias quedaron habilitadas para construir.

“Acá prima el negocio inmobiliario y nosotros sospechamos que esta decisión no se tomó por el bien de la comunidad”, sostiene Carola Rivero.

Sin embargo, desde el municipio aclaran que la medida se tomó porque la Corte de Apelaciones de Santiago permitió la construcción de los edificios. “Por decisión del concejo y del alcalde tuvimos que reconocer que los permisos son válidos. Sólo nos queda llegar a un acuerdo para que las empresas constructoras hagan un proyecto más amable con la villa”, afirma Gary Venegas, jefe de gabinete de la Municipalidad de Independencia. “En teoría, la empresa podría construir estos edificios cuando quisiera, porque el municipio no tiene ninguna facultad para detener la edificación”, agrega el representante comunal.

Por ahora, los vecinos están analizando otras instancias legales, como un recurso de protección, para seguir protegiendo a la villa Los Castaños. “Tenemos una vida de barrio que no queremos perder. Por eso vamos a recurrir a todo lo que esté a nuestro alcance para evitar la construcción de estos edificios”, afirma Roberto San Martín, vecino de la tradicional población.

DOBLE PROTECCIÓN

La villa Los Castaños fue declarada Zona Típica en 1996, y como zona protegida, mediante un decreto municipal, en 2008 Ausencia de plano regulador beneficia a las empresas

La comuna de Independencia se creó a principios de los noventa y une sectores que antes pertenecían a Santiago, Conchalí y Renca. En materia urbanística, esta comuna carece de un plano regulador y, actualmente, se rige por el Plano Regulador Metropolitano. Esta situación permite que las inmobiliarias soliciten permisos de edificación en cualquier zona de Independencia, ya que hay pocas restricciones para construir. Sin embargo, el municipio está trabajando en la elaboración de una normativa que debería estar lista durante el primer semestre de este año.

“Es absolutamente falso que el municipio no quiera proteger a las zonas patrimoniales”, afirma Gary Venegas, jefe de gabinete de la municipalidad. El representante edilicio explica que se está trabajando en un plan regulador que justamente apunta a la protección de las áreas patrimoniales de la comuna. “El plano que queremos impulsar es tremendamente restrictivo y cuidadoso con estos barrios tradicionales y en especial con la población Los Castaños”, explica.