Empresas exhiben modernos dispositivos antidelitos en feria de seguridad ciudadana

El evento, que termina hoy, reúne a expertos en el combate de la delincuencia y a compañías de protección privada nacionales y extranjeras.

(El Mercurio – 29/09/11)
Por María José Soler A.

Tinta invisible que desenmascara a ladrones de casas, dispositivos capaces de recuperar información borrada desde celulares y computadores y mapas virtuales que localizan los movimientos de los delincuentes son algunas de las innovaciones tecnológicas que las empresas de seguridad ofrecen a particulares, policías e instituciones en una nueva versión de la Feria Internacional de Seguridad Ciudadana y Empresarial (Fiseg).

La versión 2011 de la muestra reúne en CasaPiedra, comuna de Vitacura, a 40 empresas del rubro que exhiben sus productos y servicios junto a diez instituciones públicas, como Carabineros, Policía de Investigaciones, Gendarmería y la Subsecretaría de Prevención del Delito.

Promocionada por sus organizadores como la única feria de seguridad pública en Latinoamérica, en su tercera versión busca reunir a los distintos grupos de interés relacionados con la protección y la prevención de delitos y hallar puntos en común. “Antes de esta instancia, la industria privada de la seguridad no tenía ninguna relación con el sector público, siendo que mueve más dinero que éste en un año”, explica León Guzmán, presidente de la comisión organizadora de Fiseg.

La feria es una oportunidad de negocios entre privados y entre éstos y el sector público, que busca las últimas innovaciones disponibles en el mercado.

Un ejemplo es un dispositivo, importado desde Israel, para extraer información eliminada desde los celulares, que el OS-9 de Carabineros y el Lacrim de la PDI utilizan en sus peritajes. Otro son las cámaras de seguridad de gran alcance y nitidez que una compañía sueca está proveyendo a universidades chilenas (ver galería).

En la feria -termina hoy- también de desarrollan seminarios y paneles de discusión de temas como los desafíos en la prevención del delito, en los que ayer expusieron expertos como Javiera Blanco, directora de la Fundación Paz Ciudadana, y el ex fiscal Vinko Fodich, jefe de Control y Gestión Territorial de la Subsecretaría de Prevención del Delito.

Los empresarios

Algunos de los empresarios que participan en la industria de la seguridad son conocidos profesionales que se desempeñaron en cargos del mismo rubro en el sector público.

El empresario Jorge Nazer, por ejemplo, fue jefe de la División de Seguridad Pública del Ministerio del Interior (actual Subsecretaría de Prevención del Delito) durante siete meses en el gobierno de Sebastián Piñera, donde se encargó de la prevención y combate del delito. Antes, Nazer había fundado la empresa de seguridad ALTO, diseñada para combatir el robo hormiga en el retail. Luego de renunciar al gobierno, regresó a ALTO para desempeñarse como CEO, cargo en el que hoy trabaja generando mapas de georreferenciación de delitos para sus clientes del retail. Sus expectativas apuntan a expandir sus servicios hacia el sector público.

Otro ejemplo es el abogado especialista en delitos corporativos Andrés Baytelman, ex fiscal jefe de la unidad de focos delictivos de la Fiscalía Centro Norte y ex director ejecutivo de la Fundación Paz Ciudadana. Hoy dirige la empresa Fraud, Forensics & Compliance, especializada en tecnología para evitar fraudes corporativos.

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US$ 1.500

millones es el monto que cada año mueve la industria de la seguridad privada en Chile.

US$ 1.000

millones es el presupuesto fiscal asignado a la seguridad pública en el país.

63 m²

es la superficie que compró el Ministerio del Interior en la muestra Fiseg 2011, para instalar módulos de instituciones relacionadas con el ámbito de la seguridad pública.