Fracasa llamado a concesión para tren de alta velocidad entre Río y Sao Paulo

Ninguna empresa presentó una propuesta, lo que obligó al gobierno a cambiar el modelo de licitación. El tren difícilmente estará listo antes de los JJ.OO. de 2016.

(El Mercurio – 13/07/11)

La subasta para la construcción de un tren de alta velocidad en Brasil, que unirá las ciudades de Sao Paulo y Río de Janeiro, fracasó ayer al no presentar propuestas ninguna empresa interesada en el proyecto, lo que obligó al gobierno a cambiar el modelo de licitación, informaron fuentes oficiales.

Las empresas o consorcios interesados en el primer tren de alta velocidad de América Latina, cuyo costo ha sido calculado en 33.100 millones de reales (unos 20.950 millones de dólares), debían entregar sus propuestas ayer en la bolsa de Sao Paulo, pero ninguna entregó la documentación requerida, informó la Agencia Nacional de Transportes Terrestres (ANTT).

Ante la falta de propuestas, el gobierno se vio obligado ahora a cambiar el modelo de licitación, que se hará en dos etapas en fechas no definidas. Según el director general de la ANTT, Bernardo Figueiredo, en una primera fase se escogerá mediante licitación el modelo de tecnología para la operación y mantenimiento del sistema de alta velocidad, y en una segunda se elegirá al grupo encargado de ejecutar las obras de infraestructura.

El gobierno espera que la primera licitación se ponga en marcha este mismo año y que la segunda etapa se haga en 2012, según la ANTT, con lo cual las obras comenzarían en 2013. Con estas demoras disminuyen las posibilidades de que el tren de alta velocidad entre las dos mayores ciudades del país esté concluido antes de los JJ.OO. que Río de Janeiro organizará en 2016, como espera el gobierno.

Hasta ahora, empresas de Corea del Sur, Francia, España, Japón y Alemania han mostrado interés en la obra del tren de alta velocidad que, según el proyecto del gobierno, tendrá una extensión de 510 kilómetros y comunicará estaciones ubicadas en los aeropuertos internacionales de Río de Janeiro y Sao Paulo. Un ramal unirá a Sao Paulo con la ciudad de Campinas, a 97 kilómetros de distancia.

33

millonesde personas transportaría el ferrocarril en su primer año de operación, según las expectativas.