Viña del Mar licitará en 2011 la operación de tres playas para promover turismo

Municipio replicará el modelo usado en otros tres balnearios y hay un séptimo en proceso.

por Gabriela Sandoval
(La Tercera – 18/10/2010)

El panorama se repetía año tras año. Las playas de Viña del Mar repletas cada verano con toallas, quitasoles y miles de visitantes que disputaban los escasos centímetros disponibles, pero una vez terminada la temporada, casi abandonadas, desprovistas de servicios, seguridad y mantención.

Ahora, a cinco años desde que el municipio obtuviera de la Armada la concesión marítima de ocho balnearios de su costa central y le entregara a privados la operación de los primeros tres, la situación ha cambiado: las playas Caleta Abarca, Acapulco, Los Marineros han sido recuperadas, tienen vigilancia permanente y han anexado a sus atractivos naturales y servicios complementarios que mantienen un flujo permanente de turistas.

“Lo que hicimos fue idear un modelo de gestión de playas que permite a los privados interesarse en invertir en estos sitios y mejorar todo lo necesario en materia de seguridad para los visitantes. Para que esto sea rentable, a ellos se les ha permitido instalar en sitios aledaños a las playas licitadas servicios como restaurantes, gelaterías, cafeterías y discotecas”, dice el director de la Secretaría Comunal de Planificación (Secpla), Osvaldo Urrutia.

Uno de los casos más emblemáticos es el de Caleta Abarca, una playa que tras su época de bonanza, entre los 70 y los 80, decayó notoriamente, incluso en materia de infraestructura: los muros perimetrales se encontraban con severos daños, el acceso presentaba deficiencias de seguridad y los servicios para los veraneantes eran prestados principalmente por comerciantes ambulantes. Actualmente, se encuentra totalmente acondicionada, cuenta con paseos y jardines, cafetería y restaurantes, iluminación y personal de seguridad.

En estos tres balnearios, la inversión de los privados bordea los US$ 3 millones y aún restan etapas de mejoramiento: este verano, por ejemplo, la playa Acapulco debutará con un sistema de televigilancia que permitirá evitar y contener hechos delictuales.

Otra de las ventajas que destaca Urrutia es que la fórmula inhibe la instalación de equipamiento como juegos inflables, promociones o teams, que restan espacio a los visitantes: “La arena es un recurso escaso y lo estamos cuidando, por eso se prohíbe en estos lugares la instalación de artefactos, como ocurre, por ejemplo, en Reñaca”.

Tras el éxito, el municipio busca ahora ampliar el sistema hacia las playas El Sol, Sanatorio Marítimo y Los Cañones, aledañas al Parque Costero, sitio que vive una verdadera explosión turística cada fin de semana y que entrará ahora en su penúltima fase de recuperación, con la construcción de nuevas ciclovías, paseos, áreas de trote, gimnasios al aire libre y miradores. Además, están en pleno proceso de licitación la playa Los Marineros Sur.

Mientras se elaboran las bases de licitación de los balnearios, el municipio resolvió entregar permisos temporales a privados, para garantizar que mantengan un buen estándar de seguridad y aseo en esta temporada.”La idea es dar continuidad a nuestro programa de modernización del borde costero”, dice la alcaldesa Virginia Reginato.