Restauran campanas jesuitas antes de su presentación en Plaza de la Constitución

Recién arribadas a Santiago, artistas fundidores están a cargo de su reparación.

(La Tercera – 23/09/2010)

Llegaron el 8 de septiembre a Valparaíso, después de cruzar el Océano Atlántico a bordo del buque de guerra británico HMS Portland. Las tres de la seis campanas que alguna vez pertenecieron a la iglesia de San Miguel de la Compañía de Jesús, destruida en un incendio en 1863, permanecieron en la Central de Abastecimiento de la Armada hasta hace dos días, cuando fueron trasladadas a Santiago. Una vez en la capital, siguieron directamente rumbo a los talleres de la Fundición El Progreso, en Quinta Normal. Ahí, el restaurador de obras artísticas, Francisco Rojas, se encargará de reinstalar los badajos (péndulos que hacen sonar la campana), piezas que se habían perdido. Las campanas pesan entre 200 y 400 kilos.

Una vez terminadas esas labores, serán llevadas hasta la Plaza de la Constitución, donde permanecerán hasta ser presentadas oficialmente el martes 29 de septiembre en la que será la última actividad del mes del Bicentenario.

Sólo el 8 de diciembre llegarán al destino final, a los jardines del ex Congreso Nacional, donde estaba ubicada la iglesia jesuita. Ahí se construirá un monumento que estará listo en 2013, para el aniversario 150 del desastre.

Hace un año, la Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería (Dirac), comenzó las gestiones para traer de vuelta estas piezas a Chile. Y el terremoto del 27 de febrero pasado apresuró el proceso. “Esto se logró gracias a la generosidad de la Iglesia de Gales. A pesar de tener las campanas por casi 150 años, decidió que lo correcto era donarlas a su lugar de origen. Se requirió de una gran logística, que se concretó con el esfuerzo de la Real Armada británica y la Armada de Chile”, cuenta el embajador del Reino Unido, Jon Benjamin.

El canciller Alfredo Moreno apreció la labor. “El regalo que nos está haciendo Reino Unido resulta de gran valor. Trae de vuelta una parte de nuestra historia. Agradecemos a la comunidad de Oystermouth la generosidad mostrada en este gesto tan significativo para Chile”.

Las otras campanas

Originalmente eran seis campanas: tres que partieron a Gales, dos que permanecieron en Chile y una que fue fundida. Según Antonio Márquez, historiador de la Universidad Central, a partir de esta última, se forjaron dos piezas que hoy se encuentran en la iglesia de San Ignacio. “Otra, fue ubicada por el entonces intendente de Santiago, Benjamín Vicuña Mackenna, en el primer museo histórico de la ciudad ubicado en el cerro Santa Lucía. Ahora está en la cripta de Vicuña Mackenna, en el mismo cerro. La otra campana se encuentra en la hacienda El Huique, del Ejército de Chile. Ellos hicieron una copia de la campana y la regalaron al Cuerpo de Bomberos, que la instaló en su cuartel general, en calle Santo Domingo”, cuenta.