Nueva York: innovadora propuesta sobre excesos de calle

Una exhibición de alto impacto en Nueva York hizo recapacitar a los ciudadanos sobre el exceso espacial de calle en ciertos tramos viales de la ciudad al simular el potencial espacio público que podría sostener. Lejos de tratarse de una muestra pasiva, busca convertirse en una campaña de reforma del modelo de transporte, reinventando las posibilidades de las calles y principales ejes viales de Nueva York. La reformulación de los perfiles urbanos sigue una tendencia generalizada de ciudades con innovadoras estrategias de posicionamiento, que buscan aumentar la calidad de vida en el espacio público.

A continuación, una serie de referentes, simulaciones espaciales y transformaciones generales del espacio público.

Se trata de una campaña lanzada el 2005 por Project for Public Spaces [PPS] y Transportation Alternatives [TA], conocida como el Renacimiento de Calles de Nueva York [The New York City Streets Renaissance]. La iniciativa ha catalizado la transformación de la política de transporte al cuestionar las concesiones espaciales preexistentes dentro del perfil urbano. Las franjas destinadas al uso del automóvil suelen colonizar el espacio, reduciendo la posibilidad de activar el espacio público asociado a estas vialidades. Para demostrarlo, la exhibición muestra escenarios prospectivos sugiriendo una transformación que genera concesiones al peatón y el ciclista, incorporando un modelo de desarrollo de ciudad lenta. La herramienta de simulación es el fotomontaje, que recrea distintos escenarios deseables dentro de la ciudad, denotando los costos de la situación actual y los beneficios de la propuesta.

Junto con evocar imágenes deseables, la exposición montada en el MAS [Municipal Art Society], señaló referentes que abordan la misma problemática, diferenciando los mitos e impactos de las calles donde predomina el tráfico vial.

HONG KONG

El caso de Hong Kong llamó la atención dados los esfuerzos por alcanzar altos niveles de posicionamiento como capital asiática, potenciando la calidad de vida en el paisaje urbano. Dada su condición de ciudad céntrica y consiguiente escenario de altos flujos, su plusvalía en relación a los principales espacios públicos se había visto evidentemente amenazada por el aumento en la densidad vial. A partir de este diagnóstico surge la iniciativa de revertir las dificultades que se presentaban para tanto turistas como residentes al transitar en zonas de gran atractivo dentro de la ciudad. Se diseñan políticas en relación directa al perfil urbano, como el cierre permanente y temporal de ciertas calles y la eliminación efectiva de una serie de estacionamientos. El sector intervenido ha hilvanado una serie de calles, generando una unidad barrial de tipo comercial y consolidando en su interior nuevos flujos pedestres y espacios de permanencia.

Referente:

Verdes: vias pedestres permanentes. Azul:

vias pedestres por horario. Amarillas: tráfico reducido.

INDIANAPOLIS

El rediseño de las calles de Indianápolis pretende regenerar un conjunto de vialidades de la zona céntrica de la ciudad atrayendo mayores visitas y extendiendo sus periodo de permanencia. Una cooperación federal y privada plantea el Cultural Trail como una franja de concesión para el peatón y el ciclista que interrelaciona hitos como espacios cívicos y culturales. Se hace énfasis en el diseño de las intersecciones intentando reducir las distancias de cruce del peatón y el ciclista extendiendo las curvas en espacios pedestres más integrados.

Referente:

PPS se hizo presente en el estudio de probabilidades de revertir el paisaje urbano en Times Square, que se presentaba como un espacio indeseable para permanecer tiempos prolongados. La idea de sostener un interés en el sector más allá del mero impacto visual que puede llegar a generar por su intensidad de flujos, llevó a PPS a analizar un despiece dentro del perfil urbano. Tras un mapeo de las actividades, movimientos, seguimientos y encuestas en general, se propone simplemente mejorar la experiencia local, diversificando sus atractivos y multiplicando las posibilidades de espacios de permanencia de usos flexibles. En febrero de este año, el alcalde Bloomberg dio aviso de que los mejoramientos generales y peatonalización de considerables superficies del sector, que ya se han mediatizado en gran medida, serán permanentes y transformarán definitivamente la imagen local de Nueva York.

Otros de los impactos registran que el año 2008, la ciudad de Nueva York transfirió 49 acres de espacio de tráfico automovilístico y estacionamientos a áreas pedestres como plazas. El estudio presentado inspiró a una serie de autoridades hasta ser incluido en el marco del Programa de Plazas Públicas, lineamiento dentro del plan estratégico de desarrollo urbano PlaNYC, discutido anteriormente en Plataforma Urbana. El Departamento de Transporte de Nueva York ha reconocido la iniciativa y las posibilidades de extenderlo a los 59 distritos comunales de la ciudad, promoviendo un desarrollo equitativo dentro del territorio urbano. La reconfiguración fina y localizada de calles y el consiguiente reajuste jerárquico de roles en su interior (ciclista, peatón y automovilista), se consolida como una tendencia que promete considerables transformaciones en la ciudad, trascendiendo los límites de la infraestructura vial.