Arica y Los Ríos analizan las dificultades que enfrentan a nueve años de su creación

Arica Los RiosPor Óscar Riquelme y Mario Rojas.

Ambas regiones se constituyeron en octubre de 2007:

Pese a contar con más presupuesto, aún tienen trabas, como depender de la inversión pública y “cordones umbilicales” que impiden una total independencia.

Los Ríos y Arica y Parinacota son hoy las regiones más jóvenes del país. Con nueve años de existencia, ambas buscan el desarrollo económico para el cual fueron creadas, pero trabas burocráticas y la ausencia de una mayor inversión privada han dificultado ese objetivo.

Creadas el 2 y el 8 de octubre de 2007, respectivamente, ambas zonas del país vieron en su conformación una manera de descentralizar el sistema público y apalancar inversión.

En el caso de Arica, pese a avances como un Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), que pasó de $2.312 millones a $30 mil millones, en los sectores público y privado se critica la existencia de “cordones umbilicales” que la siguen atando a Tarapacá.

Para el consejero regional Raúl Castro, parte de esa dependencia con Iquique pasa porque ahí se mantienen algunos de los archivos judiciales de Arica, que manejan registros de títulos de dominio de propiedades “y eso dificulta trámites de compraventa necesarios para impulsar proyectos”. Sergio Giaconi, gerente general de la Corporación de Desarrollo Productivo de Arica, añade que la Zona Franca de Iquique sigue administrando las franquicias que se extienden en la ciudad, y los trámites para sumarse tardan un año y medio; lo que desalienta las inversiones.

Freno a la inversión

En Los Ríos, el sector privado alega que las reformas “sin terminar” han pausado inversiones, mientras la economía local depende excesivamente del aparato fiscal, que financia obras públicas que generan empleo de corta duración.

“Una región no puede pretender que siempre se afirme con la inversión pública”, sostiene Pablo Hoffmann, presidente (s) de la Corporación para el Desarrollo de la Región de Los Ríos (Codeproval), quien añade que si bien no pueden desconocer avances en materia presupuestaria, echan de menos políticas públicas concretas para atraer inversión privada a la zona. “A nivel nacional, hay mucho freno de inversión privada por el entorno internacional. Pero acá hay reformas que no se han terminado, lo que provoca que los inversionistas estén expectantes de un rayado de cancha más definitivo”, comenta.

Marcelo Guzmán, presidente en Valdivia de la Cámara Chilena de la Construcción, explica que “esta región es una de las pocas donde la inversión pública es mayor que la privada, y, si a eso sumamos la mala conectividad de Valdivia, nos da como resultado que los empresarios elijan otras regiones”.

El intendente Egon Montecinos defiende el aumento de presupuesto regional, que en nueve años creció de $7 mil millones a $51 mil millones, y precisa que “hoy el 95% de nuestra economía la está parando la microempresa”. Respecto de la necesidad de una mayor inversión privada, comenta que “estamos apoyando para que los proyectos no vean demoras y se concreten”.

Objetivo
Ambas regiones vieron en su creación una forma de descentralizar el territorio para generar desarrollo.

$5.201 millones fue el presupuesto de Valdivia en 2007. En 2008 creció a $15.794 millones.

13 veces creció el presupuesto regional en Arica y Parinacota en los últimos nueve años.