Plan de rescate de ascensores porteños inicia su ejecución

Restauracion ascensor Espiritu Santoa ValparaisoPor Mauricio Silva.

A partir de octubre:

Obras por $1.300 millones restaurarán funicular Espíritu Santo, primero de los 9 comprados por el Estado en ser intervenido.

Su estación superior no solo cobijará en forma transparente la sala de máquinas, de modo que su funcionamiento como un patrimonio industrial “vivo” pueda ser visto por los usuarios. Además, será oficina para orientar a turistas y taller de recuperación del vecino Museo a Cielo Abierto en el cerro Bellavista.

El Espíritu Santo (1911) es uno de los nueve ascensores tradicionales de Valparaíso que el Gobierno adquirió en 2012 para salvarlos de la ruina y el primero de ellos en ser objeto de una intervención de envergadura. Son $1.300 millones del MOP destinados a reparar y renovar piezas en mal estado del plano de rodadura, reemplazar los carros y restaurar las estaciones inferior y superior, con cambios para el acceso de discapacitados.

Contraloría aprobó la adjudicación de las obras a una empresa local especializada en ingeniería y los trabajos partirán en octubre, confirmó ayer la directora nacional de Arquitectura, Claudia Silva.

El ministro de Obras Públicas, por su parte, recordó que el diseño y la licitación de los trabajos duraron dos años. “Con el inicio de las obras en el Espíritu Santo estamos comenzando a materializar el sueño de dar nueva vida a los ascensores porteños. Se trata de un proyecto que relevará el carácter de Valparaíso como patrimonio de la humanidad, junto con aportar a la conectividad y movilidad de sus habitantes y turistas”, expresó Alberto Undurraga.

El arquitecto Cristóbal Tirado, cuya oficina se encargó de los diseños, destacó que estos buscan resaltar el valor de la estación inferior como espacio intersticial que ofrece el estrecho pasaje de calle Aldunate, tras la plaza de La Victoria, que lleva hasta el acceso.

La estación superior, de mayor envergadura, busca ejercer un rol de “rótula” o articulación urbana, conectándose con el sistema de escaleras que dan forma al Museo de Cielo Abierto, murales que fueron pintados por renombrados artistas.

El “Espíritu Santo”, construido a inicios del siglo XX por el ingeniero Federico Page, sigue así el camino de otros cinco ascensores patrimoniales de propiedad del municipio de Valparaíso que ya fueron restaurados: Barón (1905), San Agustín (1913), Reina Victoria (1902), Polanco (1915) y El Peral (1901), este último en fase final de ejecución.

Otros ocho funiculares que hace cuatro años fueron adquiridos por el Estado a compañías privadas para salvarlos de su declinación se encuentran en diversas etapas de diseño. El Concepción (1883) y el Cordillera (1886) son los que están en fases más avanzadas y la apertura de las ofertas para su ejecución será el 22 de septiembre y el 7 de octubre próximos. El resto de los ascensores son el Florida (1906), Mariposas (1904), Larraín (1909), Artillería (1894), Monjas (1912) y Villaseca (1907).

INVERSIÓN
$15 mil millones es lo que se requiere para restaurar los 9 ascensores comprados por el Estado