Andrés Ocampo: “Es fundamental la voluntad del gobierno para llegar a acuerdo”

ollampoPor: Oriana Fernández.

En la peor crisis financiera de su historia se encuentra Subus, empresa clave para el Transantiago, debido a una deuda con la banca de US$ 180 millones. El gerente general de la firma, Andrés Ocampo, advierte que los recursos que les entregue el Estado, tras la revisión de contratos de operación realizada por el Ministerio de Transportes, será crucial para saldar las deudas y evitar una liquidación de la compañía.

¿El gobierno les ha dado luces de que resolverá la revisión de contratos que Subus ha pedido para llegar a un equilibrio en sus finanzas?

Es un proceso abierto y en discusión, porque es el mecanismo que poseen los contratos para restablecer los desequilibrios económicos que se presentan en la ejecución del mismo. Nosotros solicitamos esta revisión en septiembre de 2014, pues encontrábamos en esa fecha que la situación de caja de la compañía se volvió compleja y se había comenzado a manejar todo con créditos que los accionistas le daban a la compañía, que es casi como dar capital. La revisión partió recién el 1 octubre de 2015, momento en que solicitamos que hubiera observadores externos (la consultora Deloitte contratada por el gobierno) para sustentar todo lo que habíamos dicho de nuestra situación. Con esos equipos compartimos muchísima información y los reportes finales no los han entregado. Se terminó esa labor en diciembre pasado y al día de hoy los informes finales no los conocemos.

¿La revisión de los contratos es determinante para llegar a un acuerdo con los acreedores en el 17° Juzgado Civil?

Nos parece que es vital cerrar la revisión excepcional para llegar a un acuerdo. Tenemos abiertos dos procesos: el de reorganización y la revisión de contratos con el Directorio del Transporte Público Metropolitano (institución que está a cargo del Transantiago). Para los acreedores es fundamental la voluntad del gobierno de llegar a acuerdo en la revisión de contratos y las señales que entregue para poder cerrar la reorganización.

Usted dice que han estado nueve meses esperando una resolución de su caso. ¿Se sienten postergados respecto a las otras empresas que han registrado el mismo proceso?

Hemos pedido lo que está en los contratos y en el pasado se utilizó y llegó a término con otras empresas, lo que permitió que éstas cumplieran con sus necesidades financieras y operacionales. En otras compañías, desde que comenzó el mismo proceso y hasta su firma, hubo tres meses. Para remarcarlo, desde la solicitud de revisión y hasta ahora, llevamos 21 meses. Hasta el momento, ha habido un trato desigual.

¿Esperan que los montos que se determinen tras la negociación, se entreguen con efecto retroactivo?

Son los mecanismos que se establecen para todos. Cuando se llegue al monto con el que se debe equilibrar el contrato, eso tiene un efecto retroactivo al inicio de la apertura del proceso que es el 1 de octubre de 2015, lo que siempre ha sucedido con otras compañías (..). Entre los factores que pedimos evaluar están, por ejemplo, que el 85% de las cabeceras (puntos de partida de un recorrido) están por fuera de los terminales y emplazadas en la vía pública. Eso hace complejo operar.

La autoridad ha sostenido que los problemas financieros se presentaron por la mala gestión de los privados, mientras que las empresas responsabilizan al Estado de su situación…

Creemos que decir que el desequilibrio de Subus se da por los descuentos y la operación, no es correcto. Si los descuentos fueran ‘cero’ por tener una operación perfecta, la compañía seguiría en desequilibrio de todos modos. Hemos planteado también que no es un problema de privados solamente, porque hay una revisión del contrato que realiza el gobierno. Los acreedores requieren de la voluntad del gobierno para cerrar también su proceso.

Transportes aclaró que ustedes han rechazado la propuesta económica efectuada por la cartera

Estamos discutiendo desde que se abrió el caso. Ellos han hecho propuestas, pero hemos dicho que por ahí no va el tema porque no habla en los mismos términos de lo que Deloitte observó. Precisamente, por eso se hizo una auditoría.

¿Qué piensa de la postura del gobierno hoy, luego revelada la crisis de su empresa?

Hay dos procesos y esperamos que se llegue a buen término. Estamos seguros de que será así.