Santiago presenta la mayor evasión de Latinoamérica, y un débil sistema de multas para controlarla

transantiagoPor: Manuel Valencia.

Análisis de Alto Evasión respecto al transporte público: En comparación con sistemas de Bogotá, Buenos Aires, Sao Paulo y Lima, Transantiago llega a triplicar en número de usuarios que no pagan sus pasajes.

La evasión del Transantiago se consolida como un mal hábito de los capitalinos. A casi una década de la puesta en marcha del sistema de transporte, el número de pasajeros que no pagan sus viajes se acerca cada vez más a un tercio del total de usuarios. Durante 2015, el fraude alcanzó un promedio anual de 26,9%, el más alto en la historia del Transantiago.

Un estudio de la empresa Alto Evasión, que asesora en el control de pasajes impagos al operador Alsacia-Express, determinó que Santiago tiene la evasión más alta de la región.

Juan Cristóbal Palacios, gerente de Alto Evasión, explica que los sistemas Transmilenio (Bogotá) y Metropolitano (Lima), y los buses de Sao Paulo y Buenos Aires, tienen, según sus distintas metodologías, unos promedios de evasión que oscilan entre un 10% y un 18%, más de 10 puntos porcentuales por debajo del Transantiago.

“La evasión es un problema intrínseco de los sistemas de transporte en el mundo, pero en Santiago tenemos los niveles más altos y por lejos de Latinoamérica. Lima tiene cerca de un 10%, Buenos Aires un 12%, Bogotá no pasa del 15%. No hay ningún otro que registre nuestros niveles. Tenemos también uno de los más altos del mundo. Esto pasa porque no tenemos una estructura que establezca una obligación del pago de una multa”, afirma Palacios, al tiempo que agrega que “si vamos a generar una mayor fiscalización, antes tenemos que revisar sistemas de cómo se pagan (las multas) y cómo se asocian a una penalidad”.

En su opinión, también se debe aumentar la infraestructura de pago: “No hay más de 25 zonas pagas en Santiago y debiésemos tener 400. Hay que establecer un subsidio para grupos vulnerables, que simplemente no pagan porque no les alcanza. Ellos son el 17% del total de los evasores”.

Según Raimundo Cruzat, ex coordinador de Transantiago y especialista en transportes, la clave es la instantaneidad del pago. “No sorprende pensar que Santiago lidera en evasión, porque es cosa de subirse a un bus y ver que nadie paga. La situación está desbandada. Como solución, aumentar las multas no funciona, porque para la gente da lo mismo si son $50 o $50 mil, si sabe que puede no pagarlo. También hay que trabajar en una mejor tarjeta bip, que cargar sea más fácil, por internet, y tener más validadores en buses y zonas pagas bien hechas”.

Otras experiencias

El análisis de Alto Evasión también observó cómo se comportan los pasajes impagos en distintos países. En Singapur, por ejemplo, la evasión creció 30%, lo que obligó a las autoridades a casi triplicar la multa (a $24.728 chilenos).

Por el contrario, en Australia lograron reducirla: hoy el 95% de los usuarios paga su pasaje gracias a un aumento de fiscalizadores, lo que mejoró en 13% la posibilidad de que un evasor sea sorprendido. La baja también es atribuida a una campaña de educación.

En la región, según el análisis, Colombia tiene un registro para las familias vulnerables que permite entregarles una tarifa preferencial a través de una tarjeta intransferible.

En Chile, el año pasado el Gobierno envió un proyecto de ley al Congreso que busca mejorar los sistemas de fiscalización. “El objetivo es contar con herramientas más eficaces para controlar el correcto pago de los pasajes del transporte público en todo el país, tipificando los delitos por fraude con tarjetas bip; dotando de mayores facultades a fiscalizadores, endureciendo las sanciones existentes y facilitando su aplicación”, dice Guillermo Muñoz, director de transporte público metropolitano.

Muñoz añade que el plan busca aumentar en 40% los puntos de carga entre este y el próximo año. “Junto con los operadores, estamos trabajando coordinadamente con el fin de sumar esfuerzos sobre aquellos ejes y sectores con más alta evasión. Ejemplo de ello son las zonas pagas móviles y las intervenciones realizadas en los ejes Grecia y Alameda”, afirma.