Nueva ley de aportes obligará a municipios a elaborar planes de inversión en espacios públicos y vialidad

ley de aportesPor: Manuel Valencia.

Proyecto entró en recta final de aprobación en la Cámara:
A través de esta figura se busca que los fondos que generen las mitigaciones viales financien una cartera de obras ya acordada dentro de las comunas y en otras de carácter metropolitano.

El proyecto de ley de aportes al espacio público entró en su recta final de discusión en el Congreso esta semana, tras haber sido aprobado por unanimidad en la comisión de Vivienda y Urbanismo del Senado.

Con este hito, se ve más cercana la aprobación de una iniciativa que desde su inicio ha sido controvertida, tanto por las implicancias que podría traer para el gremio constructor como por convertirse en una fuente de financiamiento para comprar buses del Transantiago, lo que finalmente fue descartado.

Este proyecto busca reemplazar al actual sistema de Eistu (Estudio de Impacto al Sistema de Transporte Urbano). Es decir, las mitigaciones viales que deben realizar los proyectos inmobiliarios con más de 150 estacionamientos, en el caso de los edificios comerciales, y de 250 o más en los residenciales.

Así, solo el 5% de los proyectos mitigan hoy su impacto, puesto que el 95% restante construye menos estacionamientos, lo que los exime de financiar obras que mitiguen su impacto tanto en la vialidad circundante como en el espacio público.

Con la ley de aportes, todos los proyectos mitigarán con relación a su tamaño, con aportes al entorno inmediato. Por ejemplo, con vialidades que resuelvan la congestión que generarán en un sector determinado.

También deberán contribuir con recursos (el 40% del total) a un plan de obras de la urbe, con proyectos metropolitanos que involucrarán a diversas comunas. Por ejemplo, un edificio podría financiar el tramo de un gran corredor de buses o una autopista que atraviese varias zonas de una ciudad.

“La primera línea del proyecto dice relación con que todas las obras inmobiliarias públicas y privadas mitiguen el impacto en el área en que se insertan en un sistema transparente y objetivo que va a reemplazar a los Eistu. Esas mitigaciones se materializan a través de obras que el proyecto deberá ejecutar previo a ser construido y son resueltas por las autoridades competentes”, afirma la ministra de Vivienda y Urbanismo, Paulina Saball.

Para posibilitar esta inversión, el proyecto de ley establece que las comunas tendrán un plazo de 18 meses para elaborar planes comunales de inversiones. Asimismo, en las zonas metropolitanas, donde hay más de dos comunas (como el Gran Santiago y las conurbaciones de Valparaíso y Concepción) deberá elaborarse un plan intercomunal.

Así, una vez que estos planes estén aprobados, la ley irá entrando gradualmente en vigor.

Desde la Cámara Chilena de la Construcción, el gerente de vivienda y urbanismo, Pablo Álvarez, dice que para evaluar los alcances del proyecto se debe esperar su reglamento. “Ahí se definirán bien los porcentajes que deben pagar y cómo se aseguran los principios de universalidad, proporcionalidad, predictibilidad, que se buscó imprimir al proyecto. La calidad de los impuestos se va a jugar en esos reglamentos. Al tratarse de un decreto tan importante debiese existir una consulta pública en torno a ellos. Queremos ser invitados a una mesa de trabajo y mostrar datos que la industria maneja”, señala.

A juicio de Slaven Razmilic, máster en desarrollo urbano del MIT y especialista en urbanismo del CEP, no es razonable un 70% de los aportes en movilidad. “Los aspectos marginales en movilidad que tenga un proyecto no son los mismos en todo Chile. No es razonable fijar un umbral tal alto para un tipo específico de inversión y que este umbral, a su vez, sea el mismo en todo el país. Las prioridades de inversión en mitigación deben ser fijadas de acuerdo a necesidades e impactos específicos”, cuestiona.

70%
de los recursos deben ser invertidos en obras de vialidad. El resto, en espacio público.

44%
del avalúo fiscal de un proyecto es el techo máximo del aporte que deberán entregar en dinero los proyectos en densificación.

5%
de los proyectos hoy paga por su impacto vial, porque tienen más de 150 o 250 estacionamientos.

“Los aportes van a ser solo invertidos en un plan comunal de inversiones en movilidad y espacio público que todas las comunas deberán tener”.
PAULINA SABALL
MINISTRA DE VIVIENDA Y URBANISMO

“Los aportes están más relacionados a los impactos generados por el proyecto y se emplearán preferentemente en la comuna de emplazamiento”.
SLAVEN RAZMILIC
ESPECIALISTA CEP Y MÁSTER EN URBANISMO MIT

“Hay un doble cobro porque elaborar el informe de mitigación vial va a generar un costo adicional a las empresas, además del aporte en sí”.
PABLO ÁLVAREZ
GERENTE DE VIVIENDA Y URBANISMO DE LA CÁMARA CHILENA DE LA CONSTRUCCIÓN
Iniciativa contempla “premios” con beneficios constructivosEl proyecto de ley busca fomentar los proyectos que contribuyen a la ciudad con la generación de espacio público o mecanismos de financiamiento para mantener áreas verdes.

Un ejemplo de ello es lo que ocurre con los desarrollos de Nueva Las Condes, en Santiago, que generan áreas verdes comunitarias y accesibles en las plantas bajas. A este tipo de desarrollos se les premiará con beneficios constructivos, como mayor altura o densidad.

“El proyecto considera la posibilidad de introducir instrumentos urbanísticos asociados con el desarrollo y mantención de espacios públicos. Si un proyecto aporta a un parque urbano, ganará en densificación. Esto será establecido en los planes reguladores”, explica la ministra Paulina Saball.

Pablo Álvarez, de la Cámara de la Construcción, afirma que el sistema fortalece la generación de espacio público, lo que en su opinión traerá beneficios en las ciudades. “Además, esto podría ser usado para proyectos que soterran usos no deseados, lo que beneficia al entorno. Esto también debiese especificarse en el reglamento”.