Primeras compensaciones a locatarios por inundación se pagarían este sábado

locatariosPor: Marjory Miranda.

A cuatro días de que el río Mapocho desbordara su cauce y se extendiera hacia las comunas de Las Condes, Providencia y Santiago, los vecinos, locatarios y dueños de edificios ubicados en la zona del desastre intentan volver a la normalidad, limpiando, sacando barro y haciendo cálculos de las pérdidas.

Así lo hicieron los locatarios de Los Dos Caracoles de Providencia, que representados por Cristian Moran, se reunieron ayer con gerentes y asesores de la Costanera Norte, la concesionaria a cargo de construir el Plan Santiago Centro Oriente, y cuyas obras, en el lecho del río, han sido sindicadas por la autoridad como responsables del desborde.

Según Moran la cita fue pedida por los comerciantes y la idea era buscar compensaciones. “Estoy sorprendido de la buena disposición que hay con Costanera Norte, quedamos de evaluar los daños estructurales como las bombas de agua, ascensores, y los pisos, para que de aquí al jueves tener una estimación de los costos. Van a venir peritos nuestros que realizarán ese cálculo para luego definir cuánto porcentaje podría pagar la empresa”, aseguró Cristián Moran, al salir de la reunión.

El representante añadió que “de aquí al viernes va a estar definida la cantidad que nos van a dar, pero el cheque lo queremos de aquí al sábado. O está la plata ahora, o no sirve, porque la gente ha estado todo estos días sin trabajar. Ellos mostraron buena voluntad de que así será”. En este centro comercial hay ocho locales, 14 bodegas y dos restoranes, que fueron afectados.

La empresa también se contactó con la administración del Portal Lyon, según comentó Juan Gómez, locatario que lleva más de 30 años en este lugar con su puesto de fotografía. Según señaló “yo calculé por lo menos un millón en pérdidas, con material que se mojó”. También hubo contacto con locatarios del Drugstore, donde incluso, ayer en la mañana, fue posible ver a una cuadrilla con casacas de la Costanera Norte, que estaban sanitizando las escaleras del centro comercial.

Otra persona que aseguró fue ubicada por la concesionaria es Rossana Soto, conserje del edificio de General Holley 186, cuyo departamento, donde vivía junto a su marido y tres hijos, se anegó por completo, ya que estaba en el subterráneo. “Me llamaron en la mañana (ayer) para ofrecerme giftcards de Cencosud de $ 100 mil por cada uno de los integrantes de la familia, para poder comprar ropa, porque lo perdimos todo. Igual me parece bueno, porque por lo menos dan la cara”.

Visión diferente tienen los administradores de los edificios ubicados en Andrés Bello, tales como las torres Lyon I y Lyon II, cuyo subterráneo sigue con agua, o Geocostanera e Infinity Tower, y Costanera Puente Suecia cuyos administradores aseguraron que no han sido contactados.

El lunes pasado la empresa Sacyr, contratista de Costanera Norte, explicó que hay seguros comprometidos que cubren daños tanto en las obras como en propiedad civil.

Catastro y demandas

En la Municipalidad de Providencia realizan un catastro para determinar los gastos que generó la emergencia y que, según la alcaldesa Josefina Errázuriz, debieran ser cancelados por la empresa. “No estaban presupuestados y no son responsabilidad nuestra. Ellos (empresa) tomaron contacto directo con algunos vecinos y locatarios, e hicieron lo mismo con nosotros. Los procesos judiciales son largos por lo que a lo mejor es mejor ponernos de acuerdo”. La alcaldesa aseguró que cada vecino tiene libertad para determinar el camino a seguir y que le seguirán dando asistencia legal.

En caso de demanda, Gonzalo Cordero, socio de Morales & Besa, explicó que ésta puede presentarse tanto contra el MOP (que representa al Estado), como contra la concesionaria y la constructora a cargo de las obras. En el primer caso se “basarían principalmente en una eventual falta de supervisión de las obras, ya que en última instancia la obra le pertenece al Estado que tan sólo la ha concesionado. Dicha falta de supervisión podría caer dentro de lo que se denomina como “falta de servicio”, que es el régimen en el cual responde el Estado por los daños que pueda provocar”, señaló Cordero.