El catastro multifinalitario: Una herramienta para generar políticas públicas

El catastro multifinalitario © Guillermo Tella

Como parte de los resultados generados, el Plan Estratégico “Balcarce 2020”* (Argentina) se desarrollaron acciones de mejora de las condiciones de vida de sus habitantes mediante una serie de instrumentos de planificación y de gestión territorial destinados a establecer políticas que impulsen el desarrollo económico sustentable a un municipio de 42 mil habitantes situado al sur de la provincia de Buenos Aires.

Este plan apunta a proporcionar un diagnóstico de los principales problemas urbano-territoriales que enfrenta hoy la región, incluyendo la cantidad y la calidad de los servicios básicos y de infraestructura, la revisión de los criterios de uso y ocupación del suelo que rige en el municipio y las propuestas de modificación normativa que requiera. Asimismo, formula objetivos, componentes, actividades y metas de corto y mediano plazo, y una serie de perfiles de proyectos a desarrollar posteriormente a nivel de prefactibilidad.

Si bien los mecanismos participativos han sido pensados para diferentes niveles gubernamentales, el nivel local ofrece mayores posibilidades para su desarrollo, puesto que es el nivel de gobierno que debe asumir la gestión de muchas de las funciones del Estado por razones de eficacia social, rentabilidad económica y legitimidad democrática.

Es también en el municipio donde estos mecanismos tienen mayor posibilidad de concreción exitosa ya que la distancia entre gobernantes y gobernados es menor, facilitando las relaciones cara a cara entre funcionarios y ciudadanos. Para promover y concretar la participación, desde el municipio se ha recurrido a un vasto repertorio de instrumentos y de mecanismos participativos que amplían la capacidad de los ciudadanos de influir en el proceso decisorio público.

El diseño de un nuevo sistema de catastro

A partir de los lineamientos generales desarrollados en el Plan Estratégico, la identificación y selección de los proyectos prioritarios formó parte de un proceso de construcción colectiva larga y compleja, de la que participaron los diferentes actores sociales de la comunidad local.

El gobierno electrónico es la aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación (TICs) al funcionamiento del sector público. Las TICs plantean una transformación en la modalidad de trabajo y convocan a una integración multidisciplinaria. Para lograrlo es necesario un cambio en la visión conceptual.

Los catastros tradicionales, cuyo objetivo era netamente fiscalista, están transformándose hacia un concepto de bases de datos territoriales, disponibles para todos y para múltiples aplicaciones. En el marco del Plan, se genera un proceso de transformación que pretende convertir al catastro en una herramienta de múltiples propósitos.

El catastro tradicional comprende al Catastro Fiscal, al Jurídico y al Geométrico. El catastro de múltiples aplicaciones agrega a los datos tradicionales los datos ambientales, sociales y económicos, desvinculándolos de conceptos fiscalistas para llevarlos hacia un concepto de base de datos relacionales.

En el Catastro Multifinalitario, los datos georreferenciados dan una visión de la situación socioeconómica que sumada a las condiciones ambientales resultan ser una herramienta para el diagnóstico y para aplicación de políticas públicas. Implica la generación de un instrumento que se construye a partir del trabajo coordinado entre las áreas y sectores involucrados en la organización y control territorial.

Para su puesta en marcha, se diseñó un Sistema de Información Geográfica (SIG) consistente en el desarrollo de una tecnología que administra datos espaciales e integra y articula las diferentes bases municipales. Se trata de un proceso de recolección de datos, procesamiento informático y producción cartográfica seriada para su actualización permanente.

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© Guillermo Tella

El sistema de información geográfica

En el marco del plan se desarrollaron distintas etapas dentro de trabajo. Se procedió inicialmente a la georreferenciación de la cartografía de base y de la cartografía temática del municipio. Luego se dictó un curso de formación y capacitación de recursos humanos, destinado a introducir al personal municipal en el uso de los sistemas de información geográfica (SIG).

Esta capacitación buscó introducir al manejo de datos espaciales de un territorio claramente delimitado, a través de la utilización de un software específico, como modo de contribuir con una herramienta de apoyo a la tarea gubernamental que permita una mejor interacción institucional.

La decisión de reconvertir al Catastro, en una herramienta útil e imprescindible para procesar la información del territorio y que contribuya a generar políticas públicas es una decisión fundamentalmente política. En el caso particular del municipio de Balcarce y de acuerdo a lo analizado, fueron varias las acciones tomadas desde el municipio en lo referido a la incorporación de la tecnología SIG a la actividad municipal.

Esto se manifiesta en la decisión municipal de destinar recursos para la generación de geoinformación y la aplicación de geotecnología. Del mismo modo el estado municipal destinó esfuerzos para la capacitación de recursos humanos.

En función de lo expuesto, se avanzó en la implementación del Sistema de Información Geográfica Balcarce (SIGBAL), dirigido a generar un Catastro Multifinalitario que permita relacionar información del estado parcelario, servicios, red eléctrica, gas natural, agua corriente, de telefonía, calles, cloacas, centros de salud, centros educativos, transporte, seguridad y todos aquellos factores que pueden influir sobre el valor de la tierra y la calidad de vida de la población.

El SIGBAL permite asegurar la calidad y actualización de la información geográfica para poder servir como herramienta de apoyo a la gestión y a la planificación territorial. Asimismo, contribuye a mejorar la gestión municipal y se presenta como una herramienta socio-territorial de ayuda al proceso de toma de decisiones políticas en el municipio.

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© Guillermo Tella

 

Los principales desafíos a sortear

En consecuencia, esta propuesta permite identificar desafíos a sortear y posibles temáticas a abordar por considerarse potencialmente conflictivas. Con lo cual, para un mayor desarrollo, sustentable en el tiempo y capaz de mejorar las condiciones de su población, con el sistema planteado se identifican rápidamente las oportunidades que tienden a revertir aquello considerado como problemático.

En este sentido, la herramienta contribuye a la mejora de las condiciones de vida de sus habitantes advirtiendo sobre la necesidad de establecer criterios técnicos y políticos para formular políticas territoriales en áreas de criticidad ambiental, social y urbana. Asimismo, pone de manifiesto el fuerte compromiso de la administración municipal por la calidad de vida de comunidad.

El desarrollo equi-distribuitivo de la ciudad demanda una mejor articulación del territorio con intervenciones integrales que fortalezcan las centralidades y que doten de equipamientos para la prestación de los servicios que demanda la comunidad. Desde esta perspectiva, la implementación de catastros multifinalitarios se presentan como herramientas potentes para el diagnóstico temprano de situación problemáticas complejas.

Las nuevas demandas urbanas suponen un desafío de carácter innovador, no sólo en cuanto a los objetivos, que tienen un tono de incertidumbre significativo, sino también al relevamiento de factores para el despegue de un área deprimida, que requiere privilegiar actividades no tradicionales, con grado de especialización, escala de prestación y cobertura que favorecen a los procesos de transformación urbana.

Para más información: Libro Plan estratégico Balcarce 2020