Damnificados piden a autoridades de Gobierno acelerar la entrega de ayuda

damnificadosPor Juan Castellón y Sebastián Sottorff, El Mercurio.

Vivienda aún está realizando catastro de inmuebles afectados en Coquimbo:

Ministros Burgos y Díaz estuvieron ayer en el sector Baquedano y recibieron las quejas de vecinos. “No va a ser fácil, pero vamos a ir saliendo”, les dijo el jefe de gabinete.

“Que se pongan los guantes” y “que nos ayude el Gobierno” fueron algunas frases que los damnificados del sector Baquedano, una de las zonas más afectadas por el maremoto en la Región de Coquimbo, le profirieron al ministro del Interior, Jorge Burgos, y al vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, quienes ayer visitaron la zona.

Los secretarios de Estado llegaron a las 11.30 horas para verificar en terreno los daños provocados por el mar. El recorrido fue interrumpido en todo momento por vecinos que reclamaban por lo que consideran una falta de ayuda.

“No va a ser fácil, pero vamos a ir saliendo”, indicó el ministro Burgos tras conversar con ellos. Resaltó que “es brutal y dramático el daño en los inmuebles, hemos visto la desesperanza en la gente, el dolor por la pérdida de los bienes”, e indicó que “va a ser un proceso largo, atendido el daño”.

El ministro Díaz añadió que “había tenido noticias de los distintos organismos de seguridad, pero ahora he podido constatar la magnitud del daño. La Presidenta ha dado instrucciones bien precisas: limpiar, recoger escombros, normalizar los servicios básicos y catastrar el estado de las viviendas”.

Esto último es lo que más inquieta a los damnificados. “Las autoridades dicen que van a poner maquinarias, pero soluciones para la vivienda aún no hay nada. No han entregado recursos para la alimentación y nos dan una frazada por casa y nosotros somos cinco en la mía”, reclamó Ingrid Alvarado, vecina del sector Baquedano. “Ojalá que el Gobierno nos preste ayuda. Necesitamos salir adelante”, complementa la mujer.

José Ramírez, vecino del sector Gabriela Mistral de Coquimbo, está más esperanzado: “Tuvimos pérdidas totales y la visita de los ministros la tomo con fe, esperando que ellos cumplan la palabra que están comprometiendo con nosotros. La idea es que nos ayuden, pero necesitamos bonos para comprar cosas básicas, porque nos quedamos en la calle”.

Viviendas afectadas

Aún no se tiene una cifra de casas afectadas tras el terremoto y tsunami , pues todavía los ministerios de Vivienda y Desarrollo Social se encuentran levantando información. En ese sentido, Rubén Contador, director regional de la Onemi en Coquimbo, afirmó que serán rigurosos en el proceso de entrega y selección de mediaguas.

“La instrucción desde la Subsecretaría del Interior es que seamos bastante meticulosos, para que cuando se requiera, estas estén disponibles. Asimismo, tenemos que tener la constatación legal para realizar su distribución”, dijo. Una cifra preliminar indica que se podrían requerir mil mediaguas.

 Onemi: aportes y catastroOcho mil son las cajas de alimentos que ha enviado la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) a la zona afectada desde que se produjo la catástrofe. A ello se suman 5.800 frazadas, 2.000 colchones, 18.800 bidones de agua, 2.280 carretillas, 4.500 kits de aseo y 600 unidades de materiales de construcción.

El organismo informó anoche que el número de damnificados llegó a 3.606 personas, mientras que se mantienen los 13 fallecidos. Hay cinco denuncias por presunta desgracia y 11 heridos.

En cuanto a los daños a viviendas, la Onemi detalló que son 435 las que resultaron destruidas y 746 las que tuvieron daño mayor.

Hay 51 albergados, 1.183 familias están sin luz (0,5% del total de clientes de la Región de Coquimbo) y 2.400 hogares carecen de agua potable.