Santiago, Providencia y Las Condes reciben la mitad de los viajes laborales de la clase media

Por Manuel Valencia, El Mercurio.

Estudio UC también muestra que el 70% de la población de estas comunas no necesita salir de esta zona:

Investigación arroja que los santiaguinos de estratos medios fijan como destino de sus viajes el “nuevo centro”, que va desde la zona histórica hasta los polos de oficinas del sector oriente.

Polos de oficinas como Rosario Norte, El Golf o Manquehue, y zonas de alta concentración comercial, como los malls Costanera Center o Alto Las Condes, literalmente han estirado el límite de lo que hasta hace 20 años se conocía como el “centro de Santiago”.

Hoy, el “corazón” de la capital ya no está radicado en el entorno del Palacio de la Moneda o en los principales edificios de los servicios públicos. Con el crecimiento económico y el auge del mercado inmobiliario de oficinas, muchas empresas nacionales y extranjeras comenzaron a trasladarse y radicarse cada vez más lejos del casco histórico.

De este cambio, que ha derivado en un nuevo centro urbano de Santiago, da cuenta un estudio realizado por el Instituto de Estudios Urbanos de la UC (financiado por la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología, Conicyt), que muestra cómo han ido modificándose los patrones de movilidad de las familias de clase media en la ciudad.

Si en 1992 representaban el 49% de la población y se movían preferentemente al centro histórico, en la actualidad alcanzan el 58% de los habitantes de la capital y más de la mitad ha fijado el destino de sus viajes laborales cotidianos a Santiago, Providencia y Las Condes. Les siguen Vitacura (3,3%) y Ñuñoa (2,7%).

Según el geógrafo y subdirector del Instituto de Estudios Urbanos de la UC, Luis Fuentes -autor del estudio-, estos antecedentes dan cuenta de un alto nivel de concentración de los empleos en esta zona, que no ha podido diversificarse por falta de incentivos, políticas públicas y una institucionalidad metropolitana. “El nivel de localización de servicios en estas tres comunas se ve difícil que cambie y tiende a consolidarse con lo que está sucediendo con las oficinas que siguen instalándose en zonas como Nueva Las Condes. Esto ha generado dos polos de atracción: uno administrativo público en el centro y uno privado hacia Las Condes”, explica.

Agrega Fuentes que este auge se correlaciona con la movilidad residencial de la clase media. “Comunas como Las Condes han atraído a 17% de las familias de este grupo que se cambiaron de casa en los últimos años”, afirma el académico.

En su opinión, la forma de revertir estos procesos es con planificación y administración distintas del territorio, que permita destinar más recursos para generar oportunidades de empleo en comunas periféricas.

Subcentros y repoblamiento

Entre las que más generan viajes están Maipú, Las Condes y Puente Alto. Las tres totalizan el 31,7% de los trayectos. Sigue de cerca La Florida (7,8%) y Peñalolén (4,1%). Gran parte de estos viajes que se inician en estas zonas tienen como destino la “ciudad” dentro de la capital conformada por Santiago, Providencia y Las Condes.

La especialista y ex subsecretaria de Transportes Gloria Hutt afirma que las conclusiones de esta investigación confirman la consolidación de un corredor entre el centro por la Alameda hasta Providencia y Las Condes por Apoquindo. A su juicio, resulta complejo, desde la planificación, reducir la carga de un eje tan consolidado, “pero si se favorece la instalación de más actividades comerciales o educacionales en subcentros, se pueden disminuir los viajes fuera de esta zona más saturada”.

“Un buen ejemplo es La Florida, con el sector del Paradero 14 que atrae viajes laborales y comerciales”, añade.

A su juicio, para los sectores saturados la opción es fomentar el transporte masivo y reducir el uso del automóvil, con desincentivos como un alza en el costo de estacionamientos.

Perfiles

Santiago atrae el 24,6% de los viajes de la clase media profesional.

Providencia recibe el 19,2%.

Las Condes concentra el 9,9% de los destinos de profesionales.