Damnificados de incendio desafían áreas de riesgo y vuelven a construir en quebradas
Por Jonathan Galarce, La Tercera. (03/05/14)
Intendente de Valparaíso, Ricardo Bravo, dijo que ante la emergencia se ha permitido, pero que deberá cambiar con proyectos definitivos.
Es una situación que habían alertado los más conocedores de Valparaíso. A tres semanas del incendio que destruyó más de tres mil viviendas, poniendo sobre el tapete la falta de regulación, habitabilidad y seguridad en sus cerros, 256 casas ya se empinan sobre las quebradas. Las mismas que fueron apuntadas por urbanistas y personal de emergencia como zonas de riesgo no aptas para alojar barrios y, peor aún, vulnerables a nuevos siniestros.
Según el catastro elaborado por la municipalidad, esto ocurre en las quebradas Pajonal del cerro Merced y Cousiño de Las Cañas, además de grupos de viviendas ubicadas en el cordón de la Avenida Alemania.
Algunas son las mismas viviendas de emergencia entregadas por el gobierno y otras son reconstrucciones que levantan los propios habitantes. “Hay 256 viviendas de emergencia en situación de riesgo. Una vez que terminemos de instalar las mil viviendas esperamos trabajar con esas familias”, dijo el alcalde Jorge Castro.
Sobre el mismo tema, el intendente de Valparaíso, Ricardo Bravo, sostuvo que inicialmente se había prohibído ocupar los terrenos definidos como zonas de riesgo, pero “dada la emergencia, las personas necesitan estar en algún lugar, y cuando tengamos proyectos que entreguen una mejor alternativa les daremos orientación”.
Problemas en viviendas
En paralelo, la entrega de las viviendas de emergencia ha generado conflicto entre algunos pobladores, que reclaman falta de calidad en las estructuras o materiales, negándose a habitarlas.
Así ocurrió con la familia de Fabiola Hernández (32), en Quebrada Pajonal. Con su hijo y esposo, relata que “nos dimos cuenta el jueves, cuando cayó un poco de lluvia, que la madera chupa el agua, por eso, varios vecinos pusieron ellos mismos nailon en sus casas, porque aún no llegan los del gobierno”.
A las críticas se sumó Juana Núñez (60), quien denunció que la mediagua que recibió tenía dos paneles que no correspondían. La mujer aclaró que “los voluntarios que vinieron anoche tuvieron que desarmarla para montarla de nuevo, porque tenía dos paneles que no tenían las medidas correctas”.
Bravo, quien fue increpado por un voluntario debido al estado de las casas, manifestó que “si hay alguna vivienda que haya estado fallada me gustaría saberlo para corregirlo”. Aclaró que “todo es perfectible y hemos tratado de entregarlas de forma urgente, con el fin de que las familias enfrenten de la mejor manera el invierno”.
Ayer, el delegado para la reconstrucción, Andrés Silva, informó que ya se comenzaron a entregar los kits de aislamiento para las viviendas de emergencia. El paquete cuenta con papel filtro, maderas terciadas, revestimiento para techos y pintura aislante. Sobre las críticas de un retraso, Silva dijo que “preferimos con el municipio entregar un techo, ya que es la primera necesidad y, por lo tanto, focalizamos ese esfuerzo en dicha instalación”.