30 esculturas robadas del Cementerio General en cuatro años

Por Tomás Domínguez Balmaceda. Arquitecto, Proyecto “Ciudad de los Muertos”.

A raíz de la seguidilla de robos ocurridos en los últimos meses, a fines de diciembre fue ingresada una solicitud de información acogida a la Ley de Transparencia, con el propósito de que al fin Recoleta revelara los casos que son de su conocimiento. La solicitud  fue respondida el 24 de enero, transparentándose la magnitud del saqueo patrimonial durante el período 2010-2013 y revelando un problema de magnitudes insospechadas.

A los 7 casos conocidos y denunciados por mí, se sumaron otros 24 siniestros y las estadísticas anuales son las siguientes:

El 2010 ocurrieron al menos 7 casos (1 feb., 2 jun., 2 nov., 2 dic.).
El 2011 ocurrieron al menos 9 casos (4 mar., 1 abr., 3 jul., 1 sep.).
El 2012 ocurrieron al menos 7 casos (1 ene., 1 jun., 1 oct., 2., nov., 2 dic.)
El 2013 ocurrieron al menos 8 casos. (2 mar., 2 oct., 2 nov., 2 dic.).

Frente a la alarmante situación, se desconoce si el Consejo de Monumentos ha realizado alguna acción como participar en las investigaciones y querellas, o si ha estado interesado en verificar los casos y fiscalizar el lugar, todo lo que será revisado por la Contraloría, ya que se trata de daños a Monumentos Nacionales de acuerdo a los artículos 38°, 38°bis y 39° de la Ley N°17.288.

Después de los casos conocidos el 2011 Recoleta implementó cámaras de seguridad en algunos accesos y el 2013 anunció el cierre del Casco Antiguo al acceso vehicular, pero la inquietud persiste porque, tanto las cámaras como las llaves del perímetro serán manejadas por el personal interno que a raíz de algunos casos (Castro y del Solar) ha sido muy cuestionado. La actual administración ha sostenido la posición de que es un problema que compete solo a lo privados y recién desde octubre del 2013 ha comenzado a denunciar los casos a la Bidema (PDI), aunque no se ha hecho parte de las acciones legales. La Contraloría (ingresos N°178.702, 229.207, 229.765 del 2013 y N°167.586 del 2014) definirá las responsabilidades administrativas al respecto, la definición de si corresponde a un problema de privados o fiscal, la necesidad de la contratación de un seguro de robos (y sísmico) y la necesidad de que las querellas se basen en la Ley de Monumentos y en los artículos 321° y 485° del Código Penal, sobre falta de respeto a la memoria de los muertos y daño de tumbas.

Se siente vergüenza por la actuación de las instituciones y autoridades responsables, e indignación por la falta de escrúpulos de quienes son capaces de robarle a los muertos y la impunidad con la que ejecutan sus delitos. Predomina el dolor por la pérdida de patrimonio nacional irreemplazable de altísimo valor cultural.

Aunque apena ver cómo año a año el Cementerio General va perdiendo su antiguo prestigio y su nombre se va manchando con decenas de hechos delictuales, se mantiene la esperanza en el trabajo y definiciones que pueda establecer la Contraloría para transformar el actual funcionamiento de las instituciones responsables. Ante la alarma pública que pudieran causar estos casos, el llamado a las familias que quisieran salvaguardar por su cuenta  las obras de arte de las sepulturas familiares, es a no retirarlas ya que esto dañaría el contexto patrimonial, que se necesita una autorización especial y justificada del Consejo de Monumentos y que lo necesario es que manifiesten su preocupación frente a las autoridades.

Durante el 2006 y 2007 realicé el Catastro Patrimonial del Cementerio, al menos pudiendo salvar algunas imágenes de las esculturas robadas y del resto de la colección catalogada, hoy en peligro. Me animo a escribirle a los medios de comunicación con la esperanza en que a través de la difusión de las fotografías, surjan pistas del paradero de las obras y aunque pueda parecer ilusorio, para que los autores o receptores con algún remordimiento, se acerquen al Cementerio para devolver las esculturas aún anónimamente (han sido devueltas 2 obras), para que así la administración pueda devolverlas al lugar y a los propietarios a quienes les pertenecen.



El listado de las familias afectadas es el siguiente:

1.- Hirtk-Parga (Mármol 120cms)
2.- Bacigalupo Devoto (Mármol 100cms)
3.- Ventura Lavalle (Mármol 120cms)
4.- Errázuriz Echeñique (Mármol 30cms)
5.- Edvard Loch (Busto bronce 100cms)
6.- Joaquín Díaz Egaña (Mármol 120cms)
7.- Wilson Browne (Mármol 30cms)
8.- Arturo Salgado Rivera (Bronce)
9.- Muñoz Aguirre (Busto 30cms)
10.- Alfredo Briceño U. (Mármol 50cms)
11.- Borja Valdés (Puertas bajorrelieve bronce)
12.- Nemesio Vicuña Mackenna (Mármol 120cms)
13.- Ossa Amstrong (Mármol)
14.- Hernán Silva (2 balas de cañón)
15.- Bernardo del Solar (Mármol 140cms – devuelta)
16.- Martínez Munizaga (robo frustrado)
17.- California Nicolich (Rotura de chapa)
18.- Espejo Pizarro (Vitreaux y manillas bronce)
19.- Pedro Sanhueza (Mármol)
20.- General José María Bari (Cristo de Fierro)
21.- Octavio Luna Pizarro (Yeso y granito)
22.- Valenzuela Darlingthon (Mármol)
23.- Venancio Vicuña (Mármol)
24.- Manuel Rosales Mercado (Mármol)
25.- Borja Valdés (Cristo madera)
26.- Gregorio Castro (Mármol 140cms)
27.- Manuel José Balmaceda (Ornamentos de bronce)
28.- Braden Cooper (Cobre – Puerta, relieve y chapas)
29.- José del Pilar Medina (Querubín de mármol)
30.- Ramón Goyenechea ( Bajorelieve -devuelto quebrado)
31.- Lemus Silva (2 jarrones de bronce)