Teck Retira Solicitud de Evaluación Ambiental de Proyecto de US$5.600 Millones

Segunda fase de Quebrada Blanca.

En la empresa aseguran que es un retiro “temporal”, y afirman que completarán información referente a hidrología, vegetación y alcances paleontológicos, entre otras materias.

Por Estrategia.

La empresa minera canadiense Teck, retiró del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) la solicitud de revisión del proyecto de la segunda fase de la mina Quebrada Blanca, operación que tiene una inversión estimada de US$5.600 millones.

La minera canadiense anunció que está revisando los comentarios que efectuaron los reguladores y que después de eso volverá a presentar la solicitud para la evaluación social y ambiental del proyecto Fase Dos de la mina Quebrada Blanca, ubicada en la Región de Tarapacá. “Esto no es inusual en este tipo de procedimientos. La información adicional requerida incluye, por ejemplo, mayor información hidrológica y sobre vegetación en la zona del proyecto”, dijo Claudia Onetto, gerenta de Asuntos Corporativos de Teck.

Sobre la fecha aproximada para ingresar nuevamente el estudio, Onetto comentó que “estamos evaluando los comentarios recibidos y la naturaleza de la información adicional requerida. Los plazos dependerán de lo que debamos hacer antes de volver a presentar el EIAS”.

El seremi de Medio Ambiente de la región, señaló en un informe que en la empresa “carecen de información relevante y esencial para su evaluación, la cual no puede ser subsanada por medio de aclaraciones, rectificaciones o ampliaciones”.

Quebrada Blanca es una mina de cobre a rajo abierto, que produce aproximadamente unas 36 millones de toneladas anuales de material, de las cuales 7,5 millones de toneladas son de mineral de alta ley, que se envía a chancado, aglomeración y lixiviación en pilas.

El proyecto consiste en la explotación de mineral de cobre y molibdeno a mayores profundidades que las realizadas actualmente en el rajo existente. Las exploraciones han identificado aproximadamente 2.700 millones de tons. de mineral explotable. Se espera que la Fase Dos aumente en más del doble la producción cuprífera de la mina y que extienda su vida en 39 años.