El Van Buren será modelo para restaurar ascensores de Valpo.

Parte licitación para recuperar el histórico funicular porteño:
Pedro Sariego, seremi de OO.PP. de la V Región, precisó que “todos los elementos del funicular” volverán a su norma original.

MAURICIO SILVA (El Mercurio)

El Ministerio de Obras Públicas inició la licitación para recuperar a su norma original “todos los elementos” del ascensor del Hospital Van Buren. El seremi del ramo en Valparaíso, Pedro Sariego, enfatizó que el objetivo es que éste se convierta en el modelo restaurador a replicar en los 10 funiculares privados que el Gobierno está próximo a comprar. “Para nosotros, como MOP, será la primera experiencia de restauración de este tipo de maquinarias, para proyectarnos en nuevos proyectos de este tipo”, dijo la autoridad.

Agregó que en el funicular “intentaremos restaurar todos los elementos según norma original, para recuperar el patrimonio tangible de este ascensor”, agregó. La inversión asciende a los $482 millones. Las ofertas se abrirán el 1 de diciembre.

La primera restauración a gran escala en estos tradicionales medio de transporte porteño se está llevando a cabo en el ascensor Barón, inaugurado en 1906, con una inversión que está alcanzando los $700 millones. La restauración fue encargada por el municipio a los Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar), pero Sariego declinó referirse a la razón por la cual este trabajo no podría ser el modelo a replicar en las futuras restauraciones.

Mediante un trabajo de ingeniería, Asmar logró recuperar gran parte de los sistemas de seguridad originales, incluyendo sus frenos y su capacidad antivuelco. Pero decidió reemplazar su viejo motor de corriente continua por uno moderno de corriente alterna, a fin de hacer su costo de operación accesible al municipio.

Ello es criticado por los ingenieros de la U. Federico Santa María, equipo al que pertenecía el seremi Sariego, que estudiaron las condiciones mecánicas de estos ascensores. El académico Humberto Miranda dijo que el motor “aún operaba, estaba maravillosamente dispuesto y era el corazón del valor patrimonial industrial del ascensor Barón”