Carta de inundación de Zapallar establece “alta vulnerabilidad” ante eventuales maremotos

En el peor escenario, el mar alcanzaría a 1.600 viviendas. Municipio prepara las vías de evacuación y medidas de seguridad en la comuna.

ÁLEX DELGADO
(El Mercurio – 24/05/2011)

El 8 de julio de 1730, un terremoto que habría alcanzado la magnitud 8,7 grados Richter y cuyo epicentro se habría ubicado frente a las costas de Valparaíso, provocó un maremoto que azotó a Zapallar. En esa ocasión, según los testimonios de la época, hubo olas de 30 metros de altura, que cubrieron terrenos de lo que hoy es el balneario de la V Región.

Estos datos recogidos por el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) sirvieron para elaborar la primera carta de inundación de Zapallar, la cual fue puesta ayer en conocimiento del concejo municipal.

El primer terremoto en Chile que fue medido por instrumentos corresponde al de Valdivia de 1960 y que fue de 9,5 grados.

En el documento, el SHOA advierte que frente a la ocurrencia de un maremoto de similares características, Zapallar presenta una “alta vulnerabilidad” de inundación en importantes sectores residenciales. Según el instrumento cartográfico, la franja de terreno vulnerable abarca desde la línea de playa hasta la cota 25, en un área que comprende desde Punta Pite (límite norte con la comuna de Papudo) hasta la mitad del estero del sector La Laguna (límite sur con la comuna de Puchuncaví).

El documento plantea que unas 1.600 viviendas de la comuna serían alcanzadas por el eventual maremoto: 700 en el sector de La Laguna, 400 en Cachagua y otras 500 en el balneario de Zapallar. El alcalde (s), Eliecer Fuenzalida, explicó que se trataría principalmente de inmuebles utilizados como segunda vivienda, que en temporada alta de verano son ocupados por unas 6 mil personas.

“Sectores del balneario de Cachagua, como el condominio El Golf y el club de golf, sufrirían las consecuencias”, ejemplificaron en la municipalidad. Además, “en el sector de La Laguna, el agua llegaría hasta la población Estadio, la que tiene la mayor densidad poblacional en el borde costero local”, dijeron. En el balneario de Zapallar, en tanto, la inundación afectaría a la sede municipal, al parque La Paz y al sector El Pangue, además de alcanzar la ruta F-30.

Con esta información y para mitigar los efectos de un maremoto en la comuna, el municipio de Zapallar se enfocó en la prevención, más que en establecer barreras artificiales que aminoren los efectos de un maremoto. “Vimos que en Japón su tecnología no impidió que el agua arrasara con todo”, dijo Fuenzalida, al aludir al maremoto que afectó las costas niponas en marzo pasado.

Por ello se realizan presentaciones en el consultorio, colegios, juntas de vecinos y organizaciones sociales de Zapallar para informar las medidas de evacuación y zonas de seguridad de la comuna, ubicadas sobre la cota 25, en caso de maremoto. Asimismo, se invirtió en señalización de emergencia y sirenas para alerta ciudadana.

Demarcación y simulacros

Tras la recepción de la carta de inundación se ajustará el plan de seguridad existente en la comuna. Una de las primeras medidas será la demarcación de ocho vías de evacuación, que indicarán a los residentes y visitantes las rutas más expeditas para alcanzar en el menor tiempo posible la cota 25.

Con una inversión de 18 millones de pesos se colocarán dos sirenas en los balnearios de Cachagua y La Laguna.

En marzo último se realizó un ejercicio de simulacro de maremoto, en el cual los habitantes de las zonas más vulnerables demoraron siete minutos en llegar a las áreas de seguridad.

En fecha próxima se efectuará una nueva operación de evacuación, que pondrá a prueba el mejoramiento de los tiempos de reacción con el uso de sirenas y rutas demarcadas.