Sebastián Bernstein, consultor y ex secretario ejecutivo de la CNE: “Lo que más incide en esta situación es la restricción en la transmisión”

El especialista asegura que sin el déficit en la capacidad de las redes, el sistema podría enfrentar hoy sin ningún problema la sequía y el crecimiento de la demanda eléctrica.

(El Mercurio – 11/02/2011)

El riesgo de que haya cortes programados es bajo. Eso es lo primero que dice Sebastián Bernstein al comentar la situación del SIC, el sistema eléctrico que abastece al 94% de la población del país entre Taltal y Chiloé. El ex secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía (CNE) y actual socio director de la consultora Synex asegura que las restricciones en la transmisión eléctrica originaron la coyuntura actual del SIC, que llevó al Gobierno a firmar un decreto de racionamiento.

Plantea que habría cortes programados sólo en caso de que siga la sequía, se caiga la central Nueva Renca y fallen las unidades de respaldo del sur, todo al mismo tiempo.

-¿Era adecuado firmar un decreto de racionamiento?

“Sí. Aunque el concepto suena alarmista, porque el riesgo de racionamiento efectivo es bajo, el decreto provee herramientas que en este caso son útiles, como la acumulación de agua. También tiene otras que no lo son tanto, como la baja de voltaje”.

-¿El Gobierno actuó a tiempo?

“Sí, lo hizo bien. Fue adecuado firmar el decreto ahora para que la gente vea que hay un problema y se prepare. Además, permite actuar ahora con medidas que la población no nota”.

“Es bueno que el Gobierno, al ver que estamos cerca o con algún riesgo de que algo ocurra, se adelante para no llegar a un escenario de déficit”.

-En 2008 la crisis estuvo en la generación. ¿Dónde está ahora?

“Hoy el problema es de localización, porque toda la generación que sobra en el norte y en la costa no puede llegar hasta Santiago, porque no se ha podido elevar la capacidad de la línea que la trae”.

-¿Cuál es el factor que más pesa en esta coyuntura: la sequía, el déficit de transmisión o la mayor demanda?

“Todo el mundo preveía que este año la demanda iba a crecer más de 6%, y si bien esto incide, porque esto representa 400 megawatts adicionales, sin duda lo que más incide en esta situación es la restricción de transmisión, porque sin ella, aún con sequía y la demanda más alta, el sistema aguantaba”.

-¿Bajar la seguridad en las líneas no sería más peligroso?

“No, porque así se puede traer más energía a la Región Metropolitana, que es lo que se necesita, y si por esta flexibilización hay fallas éstas serían más acotadas y de menor duración que si no se aplica esta medida”.

“También es importante bajar el consumo eléctrico, pero más que nada en la capital y también hacia el sur, para poder guardar más agua en los embalses”.

“Fue inesperado que se retrasaran las obras que subirán la capacidad de la subestación Polpaico, que recién se terminarían en 2012. Esa es la primera piedra que se metió en el zapato del sistema de transmisión”.