El plan para salvar el humedal más importante de Santiago

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(La Nación. 21/08/2009)

Por Cristina Espinoza

La contaminación en la laguna del humedal más importante de la Región Metropolitana pone en peligro uno de los ecosistemas más diversos de la zona central de Chile. Eso, sin contar que el constante avance urbano no garantiza que las especies permanezcan en el lugar por mucho tiempo. Un proyecto de reordenamiento del sector planea asegurarlo.

Conserva una parte importante de la biodiversidad chilena vulnerable o en peligro de extinción, pero aún no recibe la atención necesaria como asegurar su subsistencia. El humedal de Batuco, al norte de la Región Metropolitana, es el ecosistema más importante de la zona y está considerado como una zona prioritaria. Sin embargo, su laguna principal está en riesgo debido a acciones ocasionadas por el hombre: una amenaza constante para los cisnes, ranas y coipos que allí habitan.

“Sin lugar a dudas, la principal amenaza es la fuerte presión antrópica al cual está sometido este sistema. Parte del humedal tiene una serie de alteraciones. Existen basurales ilegales, caza de especies nativas, quemas no permitidas, sobrepastoreo, contaminación del agua, sobre todo de una planta de tratamiento de aguas, y existe también el tema del crecimiento urbano alrededor de la laguna que también es una amenaza”, sostiene Sebastián Pérez, ingeniero forestal de la Universidad Mayor.

La suma de todos estos factores hace crítico el panorama.

Junto a un equipo interdisciplinario de profesionales del Centro de Estudios de Recursos Naturales (Oterra), de esa casa de estudios, Pérez desarrolla un proyecto que a fin de año entregará las directrices para salvar el lugar. El “Plan de ordenamiento territorial para la conservación y uso sustentable de la laguna de Batuco”, que determinará las zonas susceptibles de preservación y conservación.

Financiado por la Conama Metropolitana, a través de un Fondo de Protección Ambiental (FPA) y con el apoyo de la Municipalidad de Lampa, en diciembre deberán tener su informe final, que servirá como guía para compatibilizar las necesidades originadas en la laguna de Batuco y las acciones para convertirla en un sector de ecoturismo. Para ello, requieren, además del apoyo municipal, de la participación de la comunidad local, organizaciones no gubernamentales (ONG) y los vecinos o dueños de predios del sector.

Actualmente, el equipo se encuentra levantando información en terreno, tarea a cargo del ingeniero forestal, además del geógrafo Waldo Pérez, los ornitólogos Anir Muñoz y Fernando Díaz, el biólogo ambiental Gabriel Romero y Ana María Cortez, ingeniera en recursos renovables.

La recopilación de datos está, en este momento, enfocada en las aves nativas. El cisne coscoroba (Coscoroba coscoroba), habitante de la laguna, es uno de sus principales objetos de estudio, pues está en peligro de desaparecer, como también lo están la rana chilena y la Becacina pintada, una pequeña ave cuya especie es única en Sudamérica, cuyo hábitat natural es este humedal. En el mismo lugar, se encuentran el sapito de cuatro ojos, el coipo, la lagartija lemiscata, el cisne de cuello negro y el piuquén, que ya están en la categoría de vulnerables.

El efecto del hombre en la zona, según Pérez, ha causado un aumento de la fragilidad de las especies de flora y fauna nativa, la alteración de comunidades vegetacionales, el aumento de la vulnerabilidad de ecosistemas locales, y en algunos casos, la pérdida de especies vegetales y animales o la alteración de sus ciclos biológicos naturales como la reproducción y migración, tanto local como hemisférica. “Claramente el uso no planificado de este valioso ecosistema por parte de la comunidad, atenta de manera directa con su conservación futura y concomitantemente con el derecho de las futuras generaciones”, afirma el coordinador del proyecto.

No es paliativo

“Nuestro proyecto no tiene por objetivo erradicar las perturbaciones descritas, su fin es dar las directrices para una planificación ordenada del territorio con la finalidad de conservar su rica biodiversidad”, dice Pérez, aclarando que no se trata de realizar acciones paliativas o de limpieza, sino de definir cada zona dentro de la laguna y a su alrededor, e indicar cómo utilizar y preservar cada una de esas áreas.

“Lo que vamos a tratar de lograr, una vez definida la zona, es proponer programas de manejo, que a través de otros proyectos futuros se puedan llevar a cabo”, explica.

La laguna de Batuco, declarada por Sernatur como Zona de Interés Turístico, estará enfocada en el ecoturismo, por lo que el proyecto deberá determinar en qué sectores del humedal es posible, por ejemplo, instalar la infraestructura necesaria para entregar información para difusión o educación, “siempre orientado a la conservación del humedal”, afirma. Asimismo, definirá los sectores en que ya no será posible más intervención del hombre.

Con ello, se planificarán las visitas de turistas a la laguna de modo de alterar lo menos posible la rica biodiversidad presente en la zona. Para eso es necesario un esfuerzo público y privado, por lo que la Municipalidad de Lampa implementó una encuesta para recibir las sugerencias de la población. En la página del proyecto (www.lagunadebatuco.cl) se puede acceder a las preguntas. Para incentivar aún más, se sorteará un reproductor de MP3 de 4GB entre quienes participen.

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CONAMA: “ES UN TRABAJO PERMANENTE”

En 2005, el humedal de Batuco fue calificado por la Conama como una de la zonas de interés prioritario de la Estrategia para la Conservación de la Biodiversidad en la Región Metropolitana. Desde entonces, una mesa público-privada de trabajo permanente evalúa y propone proyectos para proteger y desarrollar esta área.

Pero además, en marzo de este año, Sernatur la designó como una zona de interés turístico, lo que aumenta aún más su valor y protección. Según explica el director de la Conama Metropolitana, Alejandro Donoso, a partir de la calificación de Sernatur, cada proyecto relacionado con el territorio debe pasar por el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), “donde califica dentro del rango de estudio, no declaración”, sostiene. Esta protección especial está enfocada en el apoyo a nuevas iniciativas, siempre que sean sostenibles.

Donoso señala que la importancia del proyecto desarrollado actualmente por los investigadores de la Universidad Mayor es una línea base que será fundamental para realizar un diagnóstico de lo que hay en la zona, con el fin de lograr un ordenamiento de los predios. “He estado con los propietarios de la zona y son grandes apoyadores de este proyecto para la conservación del humedal de Batuco, así que este tema ha avanzado bastante rápido y con mucho apoyo tanto de la ciudadanía como de organizaciones y la Municipalidad de Lampa”.

El director de la Conama RM dice que el sector no está contaminado, pero sí requiere protección. “Creo que la naturaleza de alguna manera ha premiado esta zona. Cuando tienes esta riqueza de biodiversidad eso implica que la naturaleza está bastante sana, entonces nuestro interés con el plan es seguir apoyando todos los planes de acción que se quieran realizar”, dice.

CATÁSTROFE ECOLÓGICA

En 2005, la contaminación de las aguas de la laguna (provocada por la planta de tratamiento de aguas servidas de Servicomunal) provocó la muerte de más de 3 mil aves en el humedal. Varios de esos ejemplares tuvieron que ser recuperados y liberados luego en el humedal de El Yali, ubicado en la Región de Valparaíso.

La compañía negó los cargos a pesar de las pruebas en su contra, pero tras un sumario fue obligada a hacer retiro inmediato de los residuos sólidos generados por la limpieza del canal y su disposición en un relleno sanitario, así como la materia orgánica en descomposición. Se cerró la planta por 30 días y la empresa debió presentar un informe sobre el monitoreo de las aguas subterráneas y superficiales del humedal. Se retiró a los animales, los que con la limpieza del lugar volvieron a ingresar. Tras el incidente, la Conama lo declaró zona prioritaria y se inició un plan de acción para proteger esta zona de preservación ecológica.