Descuido ambiental

(Vivienda y Decoración. 08/08/2009)

Texto, Claudia Pérez F. | Fotografías, Archivo El Mercurio

screenhunter_24-aug-09-0159Las áreas verdes y de esparcimiento no son espacios que sobren en Santiago. La capital está bajo el porcentaje ideal que de estas superficies se requiere por habitante; una realidad que se hace aún más grave cuando los terrenos destinados a parques en la Región Metropolitana -sitios normados y establecidos por el Plan Regulador Metropolitano de Santiago- se encuentran con serios problemas de mantención y equipamiento.

Así lo comprobó el “Catastro de áreas verdes ejecuta- das y por ejecutar en áreas urbanas y rurales (protegidas)”, realizado en octubre del año pasado por la División de Planificación y Desarrollo del Gobierno Regional Metropolitano. El estudio comprobó que son once -de un total de 108 espacios analizados- los parques metropolitanos e intercomunales que carecen o tienen escasa infraestructura.
Mal evaluados resultaron cuatro parques metropolitanos: Cerro Los Cóndores, en Colina; Cerro Las Coralillas, en Til Til; Cerro Cementerio, en Melipilla y El Trapiche de Pañaflor. El mismo número de parques intercomunales resultó con baja calificación. Se trata del Parque República de Brasil, en La Granja, donde hasta se pueden observar microbasurales; Pan de Azúcar, en Colina; Estero Polpaico y Las Bateas, estos últimos en Til Til.

También se detectaron problemas en tres Áreas Verdes de Valor Natural. Éstas son la Reserva Nacional El Cobre de Loncha, en Alhué; el Santuario de la Naturaleza El Roble, en Til Til y el Humedal de Batuco-Chicauma, en Lampa, sector que el 2005 sufrió un serio daño, incluida la muerte de peces y aves, por la contaminación de sus aguas.

Este deterioro de áreas verdes, según explica el jefe de la División de Planificación y Desarrollo Regional del Gobierno Regional, Jorge Silva, “se da porque el financiamiento para el cuidado de plazas y parques depende principalmente de los recursos municipales, y justamente las comunas que tienen mayor déficit de infraestructura y deterioro son las que cuentan con menos recursos para mantenerlas”. Por eso, agrega que es importante el desarrollo de una Política Regional de Áreas Verdes con la que, entre otras cosas, se espera contar nuevos mecanismos de financiamiento público privado para el diseño, ejecución y mantención de estas áreas, y también definir ciertos estándares de diseño según las características específicas de cada lugar.
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