La Serena se resiste a cierre de su aeropuerto tras impulso del MOP a nueva pista en Tongoy

778669440_zzz.jpg(El Mercurio, 22/12/2008)

Representantes de la comunidad sostienen que traslado del terminal a 42 kilómetros al sur de Coquimbo impactará negativamente los sectores turísticos e inmobiliarios. Por Yanko Muñoz

LA SERENA.- La decisión del Gobierno de incluir en el presupuesto del 2009 una suma de $2.835 millones para la expropiación de terrenos en Tongoy, y el llamado a licitación a fines de ese mismo año para la construcción de un nuevo aeropuerto en ese lugar, hizo renacer las críticas en La Serena ante el inminente cierre de su terminal aéreo, la Florida, cuyo contrato de concesión vence el 2013.

Los serenenses sostienen que las razones esgrimidas para cambiar de ubicación el terminal no van al fondo del problema, y sólo se pretende beneficiar a la comuna de Coquimbo. Temen que el aeropuerto, que estará 42 kilómetros al sur de este puerto, golpeará severamente al sector turístico e inmobiliario, porque los visitantes e inversionistas preferirán a Coquimbo y no se desplazarán más al norte.

“Para La Serena y sus alrededores, como el Valle de Elqui, será una pérdida económica grande, porque se desplazan las inversiones y el foco turístico. Afectará también el desarrollo norte que se da, por ejemplo, con el complejo La Serena Golf”, dice la ex edil Adriana Peñafiel, quien durante su gestión encabezó una caravana de buses a Santiago para manifestar su rechazo a la medida.

Para el alcalde (s) de La Serena, José Manuel Peralta, es necesario que la comuna cuente con un aeródromo que preste servicios comerciales.

“La Serena tiene las condiciones para seguir creciendo, pero requiere de un plan de inversiones que sustente el desarrollo turístico. Es un destino ancla. Si queda un solo aeropuerto y no se resuelven los problemas de conectividad, creo que sería una mala política”, afirmó.

Pese a los reclamos, el proyecto del aeropuerto de Tongoy avanza. Tendrá una pista de 2.440 metros de longitud por 45 metros de ancho, y será alternativa para recibir vuelos internacionales. Contempla una inversión de US$ 45 millones.

Terminal sustentable

Ante la resistencia a la decisión manifestada por los serenenses, el ministro de Obras Públicas, Sergio Bitar, ha realizado una férrea defensa del aeropuerto de Tongoy, e incluso visitó el área donde se levantará para explicar la decisión del gobierno.

“Esta región tiene un boom y necesita un aeropuerto que tenga las características internacionales. Que se puedan realizar vuelos por instrumental para llegar de día y de noche, con una pista más larga”, señaló.

También dio razones ambientales para el proyecto. “Ahora estamos además haciendo aeropuertos sustentables o verdes, que consumen menos energía y son más amigables con el medioambiente. Eso va a permitir conexiones viales y aeroportuarias para la economía y las exportaciones. Es una gran noticia para la región”, agrega.

Para Marcelo Castagneto, presidente de la Cámara de la Construcción de la región, el aeropuerto de La Serena puede mejorar su pista
-1.900 metros- y adquirir tecnología para aterrizajes nocturnos, según explicó ante el Consejo Comunal de Turismo.

El terminal puede recibir 350 mil pasajeros por año -agregó- y aviones de hasta 144 pasajeros. La cancelación de lo vuelos alcanza sólo al 4% y las causas van desde falta de pilotos y atrasos, por lo cual no es exacto que siempre sean por mal clima, señala Castagneto.

Las razones del MOP

El argumento para privilegiar Tongoy es el crecimiento urbano en torno al aeropuerto de La Serena, la contaminación acústica y las cancelaciones de vuelos por efectos climáticos.

“Esto nos restringe bastante e impacta el tema económico”, dice la seremi de OO.PP., Hanne Utreras.

Foto de: Vladimir Bigorra