Semana del 20 al 26 de Febrero

Grandes constructoras colocan sus fichas al norte de la capital
(Estrategia, 20/02/2006)

El abandono que hoy viven algunas históricas casonas
(El Mercurio, 20/02/2006)

La Quinta Normal recuperará su esplendor
(El Mercurio, 20/02/2006)

Cambio en plano regulador subiría altura en franja al norte de Kennedy
(Diario Financiero, 21/02/2006)

El vecino que nadie quiere tener
(El Mercurio, 21/02/2006)

Ruta El Salto-Kennedy: Providencia y vecinos apoyan propuesta para mejorar túnel
(El Mercurio, 21/02/2006)

Metro sumará 325.000 pasajeros diarios con líneas 4 y 4ª
(Diario Financiero, 22/02/2006)

Geosal se asocia con Celfin para proyecto inmobiliario en Puente Alto

(La Tercera, 22/02/2006)

Verano cerrará con récord en entrada de turistas al país
(El Mercurio, 22/02/2006)

Parque Arauco tramita proyecto para construir seis edificios
(La Tercera, 23/02/2006)

Oficinas del país están entre las 5 más caras de A. Latina
(El Mercurio, 23/02/2006)

Las razones del SII para subir el avalúo fiscal de propiedades

(El Mercurio, 24/02/2006)

Edificios full electric ganan espacio en Santiago
(La Tercera, 24/02/2006)

Organización ciudadana: Las caras detrás de los carteles
(El Mercurio, 26/02/2006)

Los grandes desafíos para el Bicentenario
(El Mercurio, 26/02/2006)

Espacio para la creación
(El Mercurio, 26/02/2006)

Los defensores de la ciudad
(El Mercurio, 26/02/2006)

Semana del 20 al 16 de Febrero 2006:

Grandes constructoras colocan sus fichas al norte de la capital
(Estrategia, 20/02/2006)

Para este ejercicio, se prevé que las ventas de viviendas nuevas nuevamente se expandan a tasas de dos dígitos, cobrando protagonismo otras comunas del Gran Santiago, además de las tradicionales Las Condes, Ñuñoa y Santiago.

Pese a que las tasas de financiamiento hipotecario que otorga el sistema financiero ya comenzaron a subir, en el negocio de la construcción están lejos de caer en el desánimo, especialmente en el Gran Santiago, pues se espera que este año la actividad continúe en curva ascendente, aunque con una tasa de incremento algo inferior, teniendo en cuenta que 2005 fue un ejercicio récord con ventas por US$3.077 millones en la capital y 36.000 unidades colocadas.

Este monto histórico representó un aumento de 19,2% en relación al cierre de 2004, y sumado a las buenas expectativas que existen en el sector, ha reactivado las inversiones por parte de las principales inmobiliarias y empresas del rubro, que ya comienzan a mirar con más distancia los años negros de la desaceleración, que empezó en 1998 cuando las ventas cayeron a 13.240 unidades. A nivel nacional, en tanto, el panorama es igualmente positivo, pues se espera que la tasa de expansión se mantenga en dos dígitos, pues el año pasado el crecimiento llegó a 11,8% (cifras a noviembre), con 44.443 unidades colocadas.

En esta línea, cuatro empresarios del sector han apostado, mayoritariamente, a la construcción de casas en zonas alejadas del Gran Santiago, que junto con el resto de sus proyectos, sumarán inversiones cercanas a US$400 millones este ejercicio. Ello, explican, debido a que la densificación de las comunas tradicionales, y la apertura de nuevas y futuras autopistas en Santiago -que han disminuido considerablemente los tiempos de viaje-, lo que está llevando a las compañías a centrar sus nuevos desarrollos en terrenos ubicados en zonas alejadas del centro de la ciudad. De esta manera, las constructoras Aconcagua, Socovesa, Simonetti, Fernández Fernández Varios (FFV) y Manquehue están destinando parte de sus inversiones en comunas como Chicureo, Lampa, Colina y Huechuraba, con proyectos que involucran, en promedio, recursos invertidos por US$50 millones, por cada inmobiliaria, y que contemplan la construcción de casas, cuyos precios fluctúan entre UF 2.500 y UF10.000. Su apuesta va por el lado de edificar viviendas con valor agregado, pues contemplan mayores superficies de áreas verdes que las construcciones en comunas tradicionales por los mismos valores citados, además de los menores niveles de contaminación que se producen en dichas zonas más alejadas del centro.

En todo caso, el gerente comercial del Pabellón de la Construcción, Eduardo Risso, advierte que comunas como Las Condes o Ñuñoa seguirán captando un gran número de compradores, al igual que Santiago Centro. De hecho, según cifras de Collet, en el cuarto trimestre del año pasado, las comunas líderes en ventas fueron Santiago, Las Condes y Ñuñoa.

La Tendencia

Según Iván Poduje, arquitecto de la Universidad Católica de Chile y magíster en desarrollo urbano, el terreno que queda disponible para edificar corresponde a unas 10.000 hectáreas en Santiago, mientras que en la zona Chicureo, en tanto, el espacio disponible para este fin es de 12.000 ha. De acuerdo a un estudio realizado por el profesional, producto del auge inmobiliario de los últimos años, anualmente se están construyendo más de 900 ha en el Gran Santiago, indicando que en este momento las zonas que tienen mayor potencial de plusvalía son Pudahuel, Chicureo y Lampa.

Similar es la opinión del director ejecutivo de la Asociación de Inmobiliarios, Vicente Domínguez, quien explicó que las inmobiliarias y constructoras están enfocándose básicamente en tres sectores. ÒLas tres grandes zonas que están activas hoy son Pudahuel y Chicureo. Además, está la zona pre-cordillerana de Puente Alto, específicamente del corredor Peñalolén-La Florida-Puente AltoÓ, precisó.

A su vez, el gerente general de la inmobiliaria Aconcagua, Cristián Alliende, señaló que debido a la expansión del plano regulador intercomunal, “se está incorporando una cantidad de suelo importante que se va a poder trabajar” en las zonas periféricas antes señaladas. También, especificó que por la mayor densidad de las comunas tradicionales, “se está experimentando una tendencia que es la vivienda de mayor expansión, saliendo a la periferia”.

En cuanto a la factibilidad del suelo disponible en estas zonas, Alliende afirmó que estas tierras requieren de una fuerte inversión, con el objeto de asegurar el acceso a las aguas y alcantarillados. Por lo anterior, manifestó que “a estas zonas sólo pueden llegar las inmobiliarias grandes”.

Zona Norte

Varios proyectos son los que tienen en carpeta las inmobiliarias para la comuna de Huechuraba, ubicada en el sector norte de Santiago.

El gerente comercial de Inmobiliaria Simonetti, Carlos Vigil, explicó que su firma, junto con Inmobiliaria Manquehue; Guzmán y Larraín; Geosal; Inverpaz; Ictinos; Francisco Lorca; Mena y Ovalle, y Cypco, se unieron en el proyecto Valle Huechuraba, con el objetivo de promocionar la comuna, “debido a la accesibilidad que le dio la inauguración de la Autopista Vespucio Norte Express”.

Indicó que “el gran problema que tenía esta comuna era que poseía un acceso muy poco expedito y hoy día la situación es radicalmente opuesta”.

Debido a estas nuevas condiciones viales, aseguró que Simonetti está preparando su segunda incursión en la construcción de casas (la primera fue en La Reina). El proyecto en ese sector tiene contemplada la edificación de más de 500 casas. Vigil anticipó que el nombre tentativo de este nuevo emprendimiento es “Valle Santa Elena”.

Este año, la firma invertirá cerca de UF 1,4 millón, unos US$47 millones, en sus distintos proyectos, con lo que prevé un incremento de 30% en ventas, estimando la comercialización de 340 unidades, que representarían una facturación de US$54 millones.

Por su parte, la inmobiliaria Fernández Fernández Varios, FFV, sigue atacando Chicureo, en donde tiene en carpeta el proyecto Las Quilas en el sector norte de las Brisas de Chicureo. Con 180 ha, la firma construirá casas, cuyos valores parten en UF 3.500.

Para el presente ejercicio, el brazo inmobiliario del grupo Fernández León espera que las ventas sean tan buenas como lo fueron en 2005, periodo en que facturó US$61,5 millones, cifra que superó el nivel histórico de ventas de la compañía.

La constructora Socovesa, a su vez, este año estima una inversión de US$154 millones, con lo que proyecta un crecimiento de 10% en sus ventas.

La empresa también contempla un proyecto de casas en Chicureo. Se trata de Los Bravos, obra realizada en conjunto con Inmobiliaria Manquehue y que corresponde a 40 casas de más de 200 m2, las que tendrán un valor cercano a UF 9.000. Al respecto, el gerente general de la firma, Cristián Hartwing, manifestó que en ese sector ya están construyendo y que Òlo más probable es que comencemos la venta en el transcurso de este año, pero no creo que alcancemos a facturarlo en 2006Ó.

En tanto, Aconcagua también está en la zona norte de Santiago, construyendo un conjunto de casas cuyos precios fluctuarán entre UF 7.500 a UF 10.000. Asimismo, en el sector de Colina, la compañía trabaja en la edificación de casas en tramos que van desde UF 3.000 a UF 4.500 en una extensión de 170 ha, y con una oferta de producto desde 100 m2 a 140 m2.

Con la cartera de proyectos nuevos que contempla la firma para 2006, esta anticipa cerrar el ejercicio con una facturación del orden de UF 4,5 millones, unos US$152 millones, cifra que implicará un incremento de 21,6% en relación a las ventas de 2005.

El abandono que hoy viven algunas históricas casonas
(El Mercurio, 20/02/2006)

Antiguamente se impusieron por su belleza; hoy están deterioradas y olvidadas.

Viviendas y edificios que son parte del patrimonio histórico y arquitectónico de diversas ciudades chilenas esperan que un alma caritativa se apiade de ellas para evitar que el tiempo las destruya por completo, pero su recuperación requiere inversiones descomunales, que no cualquiera está dispuesto a asumir.

Son de estilos neoclásicos, barrocos, coloniales y atractivas mezclas arquitectónicas. Si bien no hay un catastro, se estima que más de cien de ellas están en precarias condiciones.

Destaca la Casa de Los Huéspedes en Coronel (Octava Región), del industrial Federico Schwager, pionero en la extracción del carbón submarino.

La casa colonial, de 1.200 metros cuadrados, se emplaza sobre 8 hectáreas de terreno en el sector Maule de esa comuna. Data de 1870 y en sus tiempos mozos alojó a los presidentes Salvador Allende, Fidel Castro y Jorge Alessandri. Hoy espera una inversión de 700 millones de pesos para no terminar derruida y olvidada.

El Cabildo de la Cultura de Coronel propuso transformarla en un museo histórico, para lo cual requiere su donación en comodato, por parte del holding Quiñenco, de la familia Luksic.

El arquitecto Ricardo Alarcón, presidente del cabildo, explicó que tras la muerte de Andrónico Luksic, la cesión pasó a segundo plano y ahora depende de los hijos del empresario, quienes aún no responden.

Casona peruana

En el Norte Grande, víctima de rayados y del terremoto que azotó esa zona en junio de 2005, está la Casa Yanulaque, construida en el siglo XIX en Arica. Hoy pertenece al Estado Peruano. En ella vivió la familia Yanulaque, que lideró la campaña de soberanía a favor del Perú.

El cónsul de ese país en Arica, Jorge Salas Reskalah, explicó que el gobierno peruano pretende restaurar el inmueble para convertirlo en la sede del Consulado General del Perú.

En la Región de Atacama, está la Casa Maldini, cimentada en el siglo XIX con elementos prefabricados, lo cual le da gran modernidad para su época. Estuvo instalada en Caldera hasta 1935 y fue adquirida por el latifundista Luis Maldini, quien la trasladó hasta Copiapó, donde se encuentra actualmente.

Pertenece a la Universidad de Atacama que, junto al Consejo de Cultura, tenía planes de convertirla en un centro cultural.

El director (s) de la entidad, Marcelo Muñoz, explicó que la casa de estudios hipotecó la residencia, lo cual le impide cederla en comodato.

Está también la casa patronal Santa Rita, ubicada en Pelarco, provincia de Talca, que fue habitada por el general Carlos Ibáñez del Campo. La vivienda, de adobe con cubierta de tejas, es administrada por el Ministerio de Bienes Nacionales y se encuentra en proceso de ser declarada Monumento Histórico.

El jefe de esa unidad en la Región del Maule, Héctor Bahamondes, explicó que se le ofreció una concesión por 50 años a la U. de Talca para convertirla en una casa de la cultura, para lo que se requieren $150 millones, pero no hay respuesta.

El caso más dramático es el del edificio de estilo neoclásico Luis Cousiño, en Valparaíso, más conocido como “La Ratonera”, y en cuyo interior pernoctan los vagabundos. Construido en 1883 y declarado Patrimonio Histórico en 1994, su diseño emula el casco de un barco y ha resistido más de 35 incendios y saqueos. Ninguna propuesta de restauración se ha concretado, pues se necesitan unos mil millones de pesos.

Otras edificaciones, que si bien no sobresalen por su arquitectura, fueron escenarios de hitos históricos. Es el caso de la Casa Fica, en Coihaique.

Según la historiadora Danka Ivanoff, el valor de esta vivienda de adobe radica en que fue el escenario de la batalla de Chile Chico. Perteneció a Santiago Fica, colono que lideró a los pobladores que defendieron sus tierras en 1917 de los ganaderos que habían obtenido sus títulos de propiedad en Santiago.

El arquitecto Roberto Goycoolea, Premio Nacional de Arquitectura, precisó que Chile carece de una ley que proteja este tipo de patrimonio.

“La declaración de Monumento Histórico, en vez de ser un incentivo para el dueño, es todo lo contrario, por lo que recurren a una serie de triquiñuelas para deshacerse del inmueble y sacarle mayor rentabilidad a su terreno”, afirma Goycoolea.

La designación impide al dueño de la edificación efectuar cambios a su arquitectura.

La Quinta Normal recuperará su esplendor
(El Mercurio, 20/02/2006)

Municipalidad de Santiago diseñará un plan maestro para devolverle su antigua belleza.

La Quinta Normal, por muchas décadas, fue un orgullo para los santiaguinos, especialmente en una época en que la arquitectura francesa hacía furor en nuestro país.

Hoy, el abandono parece haberse apoderado de este imponente parque capitalino.

Nació en 1838 cuando el naturalista Claudio Gay destinó 134 hectáreas a un jardín botánico con invernadero y jardín zoológico.

A fines del siglo XIX contaba con un museo de pintura, creado por Pedro Lira, un tren, y una laguna rodeada por un parque de inspiración inglesa.

A comienzos del siglo XX fue el principal paseo capitalino, pues hasta la Quinta Normal llegaban tranvías a sus tres accesos por calle Catedral, Avenida Portales y Ecuador.

En 1976 fue declarada Santuario de la Naturaleza y es un bien nacional de uso público.

En la división de comunas, Matucana, desde el punto de vista histórico, era el límite natural de la comuna de Santiago.

Sin embargo, el presupuesto de la comuna de Quinta Normal no era compatible con los parques y jardines, y quedó bajo la administración de la Municipalidad de Santiago.

El alcalde Raúl Alcaíno se propuso recuperar los parques de la comuna, y para estos efectos designó en enero pasado a una gerente de la Quinta, Isabel Palma, quien tiene a su cargo el diseño de un plan maestro para estos efectos.

Condominio

Cuenta que su labor no ha sido fácil y hay muchas cosas que funcionan como condominio, o es como terreno de nadie.

Además de los cinco museos, están dentro del recinto de la Quinta Normal la facultad de Medicina de la Universidad de Chile; la cancha de fútbol es de la Universidad de Chile; la piscina depende de la Municipalidad de Santiago; también el centro de Adulto Mayor.

Con el presupuesto actual, se trata de mantener todo el parque, de alrededor 10 hectáreas, a través de una empresa externa de jardines.

También se financia a los guardias de seguridad y se paga la electricidad.

La idea es ir recuperando, a través de distintos convenios, los sectores más importantes del recinto.

Si es necesario, se irán cambiando las concesiones que actualmente existen en la laguna y en los quioscos.

El sueño es devolverle su esplendor de antaño.

Obra de arte

Cuando en 1892 se construyó el invernadero de la Quinta Normal, se trajeron especies exóticas de todo el mundo.

Fue la primera gran construcción que combinaba metal y vidrio y rápidamente se constituyó en una de las principales atracciones del parque. Era considerada una obra de arte.

Sin embargo, los altos costos de mantención y la falta de fondos fueron provocando su lento deterioro.

Hoy ya no funciona y está abandonada. Su intervención es difícil porque está declarado monumento nacional. Ello impide, por ejemplo, entregarla en concesión.

Habrá un circuito de museos

Al interior del recinto se encuentran el Museo Tecnológico, con un comodato a cargo de una corporación; el Museo de Historia Natural, que depende directamente del Ministerio de Educación; el Pabellón Gay, que está a cargo del Centro Cultural Balmaceda 1215; el Museo de Niños y el Museo Ferroviario, de la misma corporación del Museo Tecnológico. El Museo de Arte Contemporáneo es de la Universidad de Chile.

Isabel Palma, la gerenta de la Quinta Normal, se ha contactado con cada uno de los encargados de los museos que conviven allí, para coordinar acciones conjuntas para aumentar el interés de los visitantes al lugar.

Cada uno de estos recintos cobra entradas diferentes.

Algunas ideas son armar una red para tener una plantilla programática conjunta; por ejemplo, que se conozcan todos los museos.

Ya se ha organizado el Día de la Quinta con todos los museos abiertos gratis, lo mismo que los paseos por la laguna.

Con la llegada del Metro al sector han aumentado los visitantes al parque.

Lo mismo ha provocado la inauguración de la Biblioteca de Santiago, ubicada en la calle Matucana.

También se buscan los fondos para hacer una inversión en luminarias, en señalización y en circuitos ecológicos.

Por de pronto, se ha reforzado la seguridad del parque y el personal encargado de las labores de limpieza.

La laguna y el sector que la rodea es sometida a constante evaluación del municipio.

El año pasado se cursaron dos partes a su concesionario.

ARRIENDO

100 MIL PESOS cuesta arrendar la Quinta Normal por medio día para un evento. Se ha utilizado para filmar comerciales.

Cambio en plano regulador subiría altura en franja al norte de Kennedy
(Diario Financiero, 21/02/2006)

Una modificación al plano regulador comunal que permitiría subir la altura de construcción al norte de la avenida Kennedy, está evaluando la municipalidad de Vitacura. Son cuatro manzanas situadas en el sector de calle Fernando de Argüello, que podrían pasar de un límite de 7 pisos a 12.

El asesor urbano del municipio, Andrés Ramírez, señala que en dicho sector, comprendido entre las calles Benito Juárez (poniente) y Padre Hurtado (oriente) existe hoy una afectación de utilidad pública de tres metros. Eso quiere decir que cualquier edificación que se haga ahí, debe ceder tres metros de frente a Bienes Nacionales para uso público.

Dicha afectación, de acuerdo con la ley general de Urbanismo, se extinguirá naturalmente en el año 2009. Sin embargo, con la modificación en estudio se podría desafectar en forma anticipada, al tiempo que se aumentaría la altura en los terrenos que están al norte de Kennedy.

Según Ramírez, los vecinos del sector consideran insuficiente el límite de 7 pisos, por lo que el municipio está evaluando una solución técnica que sea viable y cuente con el acuerdo de los beneficiados. Ello, porque con la disposición actual, al otro lado de Kennedy es posible levantar 12 pisos, lo que deja con un altura inferior a quienes están al norte.

Y a juicio del urbanista, si hay un lugar donde es posible subir la altura de construcción -de acuerdo con las exigencias de densidad de la ley general- éste es la faja al norte de Kennedy, porque la sombra que proyectarían estos edificios daría hacia la autopista sin afectar a los vecinos.

No obstante, algunos vecinos no piensan lo mismo. “La municipalidad está protegiendo intereses inmobiliarios”, afirma la presidenta de la asociación de vecinos de Villa El Dorado, Paloma Martínez, señalando que estos cambios afectarían la vida de los habitantes de la villa.

En todo caso, será el concejo municipal el que deberá definir si aprueba o no el cambio. Ramírez añade que aunque el planteamiento lleva ya algunos años, la fase de estudio técnico se inició hace sólo alrededor de seis meses.

Escrivá de Balaguer

Otro estudio vigente, aunque todavía no se ha definido una propuesta concreta de modificación, se refiere al sector comprendido por Monseñor Escrivá de Balaguer, Las Encinas y Doctor Alfredo Almeida, en el tramo entre el Club de Polo San Cristóbal y calle Guaraníes. En principio, la idea sería llegar a 7 pisos, donde hoy la altura es del orden de 4 ó 5 pisos.

De concretarse este cambio, estima Ramírez, se podrá crear una caja con los inmuebles de altura y otros elementos que ayudarán a incorporar al río Mapocho a la ciudad, tal como ocurre en otras comunas, como Providencia.

El vecino que nadie quiere tener
(El Mercurio, 21/02/2006)

No saluda, cuelga la toalla por la ventana y usa el balcón de bodega. Baja el perro al jardín para que haga sus necesidades y deja la bicicleta en el pasillo. Sepa qué hacer, aunque no sea mucho.

Aunque cueste confesarlo, todos tenemos en el edificio o en el condominio un vecino indeseable. Es el típico sujeto que tiene costumbres medio reñidas con el manual de Carreño, que hace pasar malos ratos a los demás copropietarios y que “no está ni ahí” con el reglamento ni los reclamos en su contra.

La convivencia de personas con costumbres tan diferentes es muy difícil. Lo que a un vecino le parece de lo más normal -como los maceteritos de distintos tamaños asomados por el balcón- para otro es de pésimo gusto… Tampoco es muy elegante colgar la toalla en la ventana, ni sacudir las alfombras, cortarse las uñas medio colgado de la baranda, hablar de madrugada en el balcón, dejar la basura en la puerta del departamento o amarrar la bicicleta en el pasillo.

La mayoría de estas costumbres están prohibidas en los reglamentos de copropiedad de las comunidades. Se trata de un compendio de normas que regulan la convivencia interna, y establecen derechos y deberes y multas a los infractores. Tiene la fuerza de un contrato, por lo que sus disposiciones son obligatorias para copropietarios y arrendatarios.

Indolente, “care’palo”, grosero, “flaite”. Por apelativos no se quedan estos vecinos conflictivos; por prepotencia y mala educación, tampoco. “Para qué voy a arrendar un estacionamiento si están los de visitas, que son gratis”. Ésa fue la respuesta que recibió don Pedro Espejo, administrador de un pequeño edificio de calle Carmen Covarrubias, en Ñuñoa, cuando le sugirió al sujeto del segundo piso una alternativa para dejar el vehículo.

Jardineras inundadas

Un poco más grosera fue la que obtuvo Rosa Olivares, de la junta de vigilancia de un condominio en Providencia, cuando le solicitó a una señora del 7º piso que no inundara la jardineras puesto que los vehículos estacionados y algunos balcones se ensuciaban con el agua que caía. “Me mandó a mí, y de paso a mi madre… a limpiar. Estas actitudes producen impotencia; le enviamos una amonestación y luego la multamos con 2 UTM ($62.826). Pagó y sigue igual”, señala.

Frente a este tipo de hechos, las comunidades comprueban que las herramientas legales muchas veces son insuficientes, en especial cuando se trata de individuos de reiterada mala educación. Alejandro Gandolfi, que habita en un departamento en Suecia con Simón Bolívar, cree que perdió la batalla con su vecina del piso superior: “Me cansé de pedirle, en todos los tonos, que no sacuda las alfombras por la ventana; que además de ser ordinario, me ensucia la terraza. Pero no entiende”.

¿Qué hacer ante estas situaciones? La Ley de Copropiedad Inmobiliaria es la normativa que rige las acciones en edificios y condominios. En su artículo 32º indica que “los copropietarios, arrendatarios u ocupantes -a cualquier título- de unidades del condominio deberán ejercer sus derechos sin restringir ni perturbar el legítimo ejercicio de los derechos de los demás ocupantes”.

Por escrito

Si no logra nada conversando con su vecino acuda al administrador y consigne el hecho por escrito. Éste tiene la facultad para sancionar al infractor.

Pero, a diferencia de lo que sucede con los gastos comunes, en los que se le pueden interrumpir los suministros de servicios (agua, luz o gas), en estos casos de in-convivencia sólo se pueden aplicar multas que van de 1 a 3 UTM (entre $31.413 y $94.239).

Para quienes viven situaciones de conflictos graves con estos vecinos, la sanción es insuficiente. “Es el equivalente al monto mensual de los gastos comunes; qué le importa esa cantidad a un sujeto que le sobra plata y le falta educación”, señala el lector Luis Varela, cuyo vecino le tiene el auto todo rayado con las piedras que lanza la orilladora cada vez que corta el pasto.

En tribunales

Siempre está la posibilidad de acudir a los tribunales de Justicia. El Juzgado de Policía Local es la instancia correspondiente para dirimir estas contiendas. La denuncia la puede hacer cualquier vecino o la misma junta de administración del edificio.

¿Qué se logra? La verdad es que no mucho más. La multa pudiera duplicarse; es decir, llegaría a unas 6 UTM ($188.478).

Si su intención es deshacerse del “flaite”, ¡olvídelo! No lo pueden expulsar de la comunidad.

Mascotas en condominio

Si llega a un edificio donde no se permiten mascotas y usted no quiere deshacerse de ella, sepa que el administrador tiene plenas facultades para aplicar el reglamento y amonestarlo con una multa máxima de 3 UTM. Si las paga, pero conserva al animal, lo pueden llevar al Juzgado de Policía Local, donde lo espera una infracción máxima de 10 UTM ($314.130).

Claro que puede apelar y hasta presentar un recurso de protección para que no le quiten a su mascota.

Ruta El Salto-Kennedy: Providencia y vecinos apoyan propuesta para mejorar túnel
(El Mercurio, 21/02/2006)

Piden al MOP factibilizar idea que mitigaría daños en Pedro de Valdivia.

Sumar ideas y restar conflictos en el túnel San Cristóbal es el principio de “Elemental”, iniciativa asociada a la Universidad Católica, a la que se han sumado Providencia y los vecinos de Pedro de Valdivia Norte.

La propuesta arquitectónica consiste en encajonar 500 metros de la salida Kennedy para evitar el ruido y la contaminación de las casas aledañas a la ladera del cerro, por donde irá la carretera El Salto-Kennedy.

También plantea reconvertir la superficie en un parque, y ser la punta de lanza para crear un zócalo o paseo peatonal en el poco aprovechado Parque Metropolitano.

La idea urbanística, que es semilla y quiere germinar, entusiasmó de inmediato al alcalde de Providencia, Cristián Labbé, y a las familias del barrio, quienes piden que se desarrolle “ya”.

“La propuesta es válida y la apoyamos de forma inmediata”, dijo Labbé, al asegurar que avalará todas las iniciativas que mitiguen los impactos negativos del proyecto vial.

El edil de Providencia señaló que pone a disposición de “Elemental” su equipo técnico, y pidió al Ministerio de Obras Públicas y la concesionaria que “factibilicen” la propuesta.

Sobre comprometer recursos para financiarla, Labbé aclaró que le corresponde a la empresa o el MOP asumir los costos, porque es una obra concesionada.

“No corresponde que nosotros lo financiemos. Ayudamos en la medida que ellos pongan los recursos”, dijo el alcalde.

Juan Luis Moure, vicepresidente de la junta de vecinos del barrio Pedro de Valdivia Norte, dijo que apoya encajonar Kennedy y pidió a los colegios de Ingenieros y Arquitectos que aporten técnicamente.

Moure dijo que la propuesta soluciona uno de los dos graves problemas que traería la ruta, el acceso de Kennedy.

Sólo quedaría pendiente darle una solución subterránea a la avenida El Cerro, añadió.

El dirigente dijo que está con el “mejor ánimo de colaboración” para trabajar en conjunto.

En tanto, Alejandro Aravena, director de “Elemental”, que tiene el respaldo de Copec, pidió que la carretera no hipoteque la posibilidad de concretar la idea en el futuro.

Aravena explicó que la iniciativa debe ser vista no sólo como un aporte al barrio, sino a la Región Metropolitana.

“El Paseo Metropolitano podría ser un ejemplo de cómo un aparente conflicto, enfrentado con coordinación más que con recursos, puede ser un proyecto donde todos ganan”, resumió.

Metro sumará 325.000 pasajeros diarios con líneas 4 y 4ª
(Diario Financiero, 22/02/2006)

A partir del segundo semestre la red Metro sumará 325.000 pasajeros diarios, una vez que la Línea 4 (Tobalaba-Puente Alto) y su variante 4A (Vicuña Mackenna-La Cisterna) se encuentren en régimen de operación plena. En total, se estima que anualmente ambas líneas aportarán 93 millones de viajes.

Este trazado -que recorre 33 kilómetros a lo largo de las avenidas Tobalaba, Vespucio Sur hasta Gran Avenida y Vicuña Mackenna a partir del paradero 14- ha sido puesto en servicio de manera escalonada. El 30 de noviembre pasado comenzaron a operar dos tramos: entre las estaciones Tobalaba y Grecia y desde Vicente Valdés a Puente Alto, mientras que el tramo central, entre las estaciones Los Presidentes y Vicuña Mackenna, iniciará su funcionamiento el próximo jueves 2 de marzo.

Ese día entrarán en servicio las estaciones Los Presidentes, Quilín, Las Torres, Macul y Vicuña Mackenna, con lo que el trazado entre Tobalaba y la plaza de Puente Alto a través de la Línea 4 quedará completo. El tiempo total de viaje previsto es de 35 minutos.

Por ello, desde el 15 de febrero, los trenes que operan en los tramos actuales de la Línea 4 circulan con una nueva configuración de seis carros, que es la que se usará durante la hora punta a partir de marzo. Durante las horas de mayor movimiento, señala Caballero, la frecuencia de paso será de 4 minutos.

Línea 4A

El hito siguiente, programado para julio, será la puesta en servicio de la variante 4A, compuesta por las estaciones Santa Julia, La Granja, Santa Rosa, San Ramón y La Cisterna, completándose así una línea que requirió una inversión global de US$ 1.070 millones.

Actualmente, las obras en estas cinco estaciones tienen un avance del 70%, su obra gruesa está terminada y ya se está trabajando en el interior.

El gerente comercial de Metro, Alvaro Caballero, explica que esta puesta en marcha escalonada se debe principalmente a que las estaciones del tramo central y la variante 4 A se encuentran sobre la franja de concesión de la Autopista Vespucio Sur, razón por la cual debieron diferirse sus plazos de construcción para compatibilizar ambas obras.

Geosal se asocia con Celfin para proyecto inmobiliario en Puente Alto
(La Tercera, 22/02/2006)

La firma tiene proyectos en carpeta por unos US$ 150 millones para este año. Las iniciativas le permitirán llegar a comunas donde hasta ahora no tenían presencia, como Recoleta y Concepción.

Geosal, la rama inmobiliaria de la constructora Salfacorp, planea poner en marcha un megaproyecto inmobiliario en Puente Alto, en el sector de El Peñón en Las Vizcachas, donde también participará el banco de inversión Celfin como administrador de un fondo de inversiones que tendrá el 50% de la nueva iniciativa.

El proyecto -cuyo nombre aún no está definido- contempla 900 viviendas a desarrollarse en un plazo de seis años y cuya construcción debiera partir en agosto de este año.

Este proyecto forma parte de un vasto plan de expansión que Geosal puso en marcha para éste y el próximo año y que involucra recursos sólo en 2006 por entre US$ 130 millones y US$ 150 millones en diversos proyectos de viviendas. Con ello llegarán a comunas y regiones donde la firma hasta ahora no estaba presente.

La apuesta de Geosal es en grande. La firma tiene presupuestado lograr un crecimiento en ventas de 25% este año y de 70% para 2007 con los nuevos proyectos, para llegar a 2008 con un tamaño de unos US$ 200 millones en facturación, contra US$ 70 millones logrados en 2005. Con ello, acrecentarán la importancia de esta división de negocios dentro del tamaño de Salfacorp.

Los proyectos

Según explicó el gerente comercial de Geosal, Alberto Araya, la alianza con Celfin se adoptó luego de que las partes tuvieran una primera experiencia similar, en el proyecto de un edificio que la inmobiliaria levantó en el centro de Santiago (en calle Marín). Allí participaron personas naturales como inversionistas, con Celfin como administrador de esos fondos. A Celfin le interesó desarrollar esta división inmobiliaria, pero ahora no sólo como administrador, sino que aportando sus propios inversionistas, comentó Araya. Por ello es que Geosal y Celfin evalúan la posibilidad de realizar otros proyectos bajo la misma modalidad en Recoleta y San Miguel.

En Recoleta (Avenida Perú), Geosal prevé construir dos torres de unos 220 departamentos cada una, en un proyecto cuya construcción partirá en junio y que le permitirá arribar por primera vez a esta comuna de Santiago. En San Miguel (El Llano), levantará a partir de junio una torre de 116 departamentos.

También la firma construirá tres nuevos edificios en Santiago Centro, en Teatinos con Rosas, en Lira y Amunátegui, además de llevar a cabo nuevas etapas de los que está levantando en Marín y Catedral.

Fuera de Santiago, la compañía también tiene una amplia batería de iniciativas: en la V Región levantarán una segunda etapa del proyecto de edificio Geomar, ubicado en el sector de Bosques de Montemar, cuya construcción partirá a fines de este año y sumará 130 nuevos departamentos. Además, en Valparaíso iniciarán un proyecto de unas 100 casas en el sector de Jardín Suizo. Adicionalmente, en Quilpué tienen tres proyectos en desarrollo.

En la VIII Región Geosal edificará en el sector de San Pedro de la Paz un proyecto de 2.500 casas, cuya construcción partió en febrero y está previsto completarla en ocho años. Esta es la primera vez que Geosal llega a esta zona.

Verano cerrará con récord en entrada de turistas al país
(El Mercurio, 22/02/2006)

Sobre medio millón de personas habrán entrado al país, 14% más que en 2005.

El turismo cerró el 2005 con cifras récord y esta temporada estival promete no ser la excepción. De acuerdo a información del Servicio Nacional de Turismo (Sernatur), durante enero y febero habrán entrado al país un total de 580 mil turistas extranjeros, 328 mil en enero y 252 mil en febrero, lo que representa un crecimiento de 14% respecto al 2005.

Las divisas generadas también alcanzarán cifras récord, esperando cerrar los dos primeros meses del año con un total de US$ 380 millones.

Según el director de Sernatur, Óscar Santelices, los argentinos siguen siendo los principales turistas ingresados al país, cobrando después de ellos especial importancia Perú, Estados Unidos y Europa. “Los turistas de larga distancia así como también los brasileños, que estaban relegados para un turismo invernal, han ingresado en forma importante durante esta temporada al país”, explicó el directivo.

Si bien la segunda vuelta electoral afectó la salida de chilenos de vacaciones, tanto dentro como fuera del país, ésta no tuvo repercusión en la llegada de turistas extranjeros, quienes eligieron los destinos típicos para pasear: Iquique, Chiloé, Pucón, Torres del Paine y La Serena se mantuvieron casi copados entre el 15 de enero y el 15 de febrero.

Y el dólar bajo tampoco produjo un éxodo masivo de chilenos al extranjero: se estima que 5 millones de chilenos habrán veraneado dentro del país, cerca de 10% más que el 2005.

Parque Arauco tramita proyecto para construir seis edificios
(La Tercera, 23/02/2006)

Parque Arauco, ligada a los grupos Said y Abumohor, ingresó a tramitación ambiental el proyecto de ampliación del mall que la compañía tiene en avenida Kennedy, en Las Condes.

Se trata de un extenso plan maestro que involucra inversiones totales por US$ 78,8 millones y que incluye la incorporación de otros seis edificios al actual complejo, además de 4.343 estacionamientos subterráneos.

Con ello, la compañia pone en marcha un plan anunciado hace años de ampliar el complejo comercial incorporando a él un proyecto de oficinas, hotel, helipuerto e incluso edificos de departamentos, además de nuevas ubicaciones comerciales.

Según la compañía, la nueva ampliación suma un total de 263 mil metros cuadrados, en un proyecto ideado para llevarse a cabo en cinco etapas, entre el 2006 y 2016. La ampliación considera seis edificios adicionales, cuatro de los cuales apuntarán exclusivamente a uso comercial: dos de siete pisos y otros dos, de cuatro pisos.

Las otras dos torres serán para uso habitacional y oficinas: una torre tendrá 35 pisos, parte importante de la cual se destinará a área residencial, con un total de 240 departamentos. Esta parte de la ampliación se ubicará aledaña a la calle Rosario Norte.

La otra torre tendrá 51 pisos, para comercio, oficinas y hotel, además de un helipuerto en su cubierta, previendo la compañía que esta parte de la ampliación estará aledaña a la intersección de las calles Rosario Norte y Avenida Kennedy.

Todo esto se ubica en el sector nororiente del complejo, donde hasta ahora se emplazan estacionamientos en superficie.

En la compañía indicaron que a la fecha las obras inmediatas y aprobadas corresponden a las oficinas, mientras el resto del cronograma para el plan maestro se definirá a futuro. Por lo mismo, explicaron, aún no está totalmente definido el financiamiento para toda la operación. Con todo, se sabe que Parque Arauco tiene los recursos necesarios para ejecutar el plan.

A fines del año pasado la compañía logró el apoyo de sus tenedores de bonos y aprobó un cambio en las condiciones en que estos papeles de deuda fueron emitidos, cambios que en la práctica le significaron a la compañía una capacidad de endeudamiento adicional de unos cuatro millones de unidades de fomento (unos US$ 140 millones) precisamente para enfrentar nuevos proyectos.

Parque Arauco es uno de los principales operadores comerciales de Chile, con filiales en Argentina y, recientemente, Perú, donde adquirió un porcentaje del mall Megaplaza.

Oficinas del país están entre las 5 más caras de A. Latina
(El Mercurio, 23/02/2006)

El mayor salto lo dio Argentina, que se ubicó en el lugar 39 de la clasificación mundial y cuarto en la región.

Chile se ubicó en el quinto lugar entre los países latinoamericanos con valores de arriendo de oficinas más caros durante 2005, de acuerdo a un informe de la consultora Cushman & Wakefield.

La tasa de vacancia históricamente baja de 4% debido a la entrada de pocos proyectos al mercado y la alta demanda llevaron los precios a un promedio de 0,65 UF por metro cuadrado mensual, ubicando al país en el lugar 44 a nivel mundial, dos puestos más arriba que en 2004.

Y las proyecciones hablan de nuevas alzas para este año. De acuerdo al ejecutivo de Contémpora Servicios Inmobiliarios, Juan Carlos Menéndez -representante en Chile de C&W-, los precios han crecido en los últimos seis años en 10%.

Brasil se ubicó en el primer lugar, con oficinas cuyos valores promediaron 1,4 UF por metro cuadrado mensual. Río de Janeiro fue la ciudad que experimentó las mayores alzas debido a una disponibilidad de oficinas muy inferior a Sao Paulo.

En segundo lugar se ubicó México, con su centro financiero ubicado en Polanco y Las Lomas. Con precios de 0,9 UF por metro cuadrado, se espera que este mercado siga sofisticándose, aumentando la disponibilidad de oficinas clase A.

En tercer lugar quedó Venezuela, con precios de 0,82 UF por metro cuadrado. La tasa de vacancia en los principales centros de esa ciudad como La Castellana, Altamira y Chacao cayó a 7%, y la entrada de nuevos proyectos como El Rosal esperan aliviar el alza en los valores.

Argentina, en tanto, subió 10 puestos en la clasificación mundial, quedando ubicado en el lugar 39 y siendo el segundo país con la mayor alza en el valor de los arriendos después de Hong Kong. Esto, producto de la recuperación de la actividad económica, que elevó el nivel del metro cuadrado de oficinas a 0,79 UF. Para este año se proyectan nuevas alzas en torno al 20%, debido a las nulas inversiones.

Las razones del SII para subir el avalúo fiscal de propiedades
(El Mercurio, 24/02/2006)

Ya no sólo importa el tipo de vivienda y su superficie. La cercanía al Metro, a áreas verdes, a malls y a servicios urbanos fueron clave para encarecer el valor de los bienes.

“Si antes el Servicio de Impuestos Internos (SII) miraba dentro de las propiedades que avaluaba, ahora salió a recorrer el barrio”. Así ejemplifica Felipe Ocampo, gerente de Impuestos de Ernst & Young, una de las causas que gatilló que cientos de miles de propiedades subieran su avalúo fiscal y, además, el monto de sus contribuciones.

Una situación que marcó un cambio en la forma de valorar los bienes inmuebles no agrícolas, dejando de centrarse prioritariamente en las características propias de la vivienda y considerando mayormente su entorno.

Porque, además de la clase de material del inmueble, su superficie, su especificación técnica, los costos de construcción y su antigüedad -entre otros factores-, el SII se fijó ahora más en las obras de urbanización que rodean la propiedad, su cercanía a áreas verdes, la calidad de sus accesos, sus zonas de equipamiento y, por supuesto, la cercanía a servicios comerciales y de transporte, como Metro o autopistas urbanas.

El valor de la comuna

Julio Pereira, socio y abogado de PricewaterhouseCoopers, asegura que todos estos factores inciden en el mayor valor de las propiedades, a lo que se suma la “importancia de la comuna”, aunque -sostiene- no hay un criterio tributario claro y definido en este aspecto.

Ocampo recomienda tomar en cuenta los antecedentes del emplazamiento antes de iniciar un reclamo. “Si se instaló una estación de Metro al lado de mi casa, y subieron las contribuciones, es poco probable que me admitan la queja”, advierte.

En los últimos 10 años se han inaugurado 42 estaciones de Metro, 65,7 kilómetros más que en 1996, cuando se realizó el último reavalúo. Asimismo, se contruyeron cuatro autopistas urbanas -Costanera Norte, Vespucio Sur, Vespucio Norte y Norte-Sur-, las que suman 214,5 kilómetros a la fecha.

A nivel de servicios, por ejemplo, se puede mencionar la inauguración de al menos seis centros comerciales en la década: Mall del Centro, Plaza Tobalaba, Florida Center, Portal La Dehesa, Plaza Norte y Mall Sport, varios de ellos en comunas periféricas de Santiago

Pero la retasación tiene más aristas. A juicio de Julio Pereira, una que ha sido poco mencionada es lo que sucederá con el impuesto a la renta de algunas propiedades. Esto, porque el avalúo fiscal fija la base imponible sobre la cual se aplicará una tasa determinada y por concepto de explotación de un bien raíz urbano se tributa sobre renta presunta en los casos que la ley así lo permite. “No sólo se está afectando el impuesto territorial, sino que también se influye sobre la tributación de la renta de bienes urbanos, ya que la ley faculta en ciertos casos para tributar sobre una renta presunta”, explica el ejecutivo. Por ejemplo, si se posee un bien raíz urbano, se presume que la renta es del 7% del valor fiscal, en ciertos casos afectando seriamente la carga tributaria del contribuyente persona natural.

Edificios full electric ganan espacio en Santiago
(La Tercera, 24/02/2006)

Por razones de seguridad, principalmente, desde 2001 comenzó a desarrollarse un tipo de construcción que no usa instalaciones de gas, optando sólo por artefactos eléctricos.

Sin gas. Solo electricidad. Esa es la premisa en los edificios full electric que comienzan a aparecer en el país.

Así como los edificios inteligentes revolucionaron el mundo de las oficinas, ahora la novedad en las construcciones residenciales es prescindir de las tradicionales instalaciones de gas. En su reemplazo, se utilizan artefactos eléctricos para todo. Para cocinar, para calentar el agua de la ducha o para calefaccionar el hogar.

Según Chilectra, cuyos ejecutivos han promovido este tipo de propuestas, el 5% de los edificios construidos en 2005 en la capital usaron este nuevo concepto. “Y esperamos que el 2006 sea el de su consolidación”, dice Víctor Hugo Balbontín, subgerente de Desarrollo Urbano e In-mobiliario de esa compañía.

Aunque tienen otros beneficios, las razones de seguridad fueron las principales impulsoras de la aparición de estos edificios full electric.

A raíz de los accidentes registrados hace unos años por escapes de gas y los problemas que se han presentado con los sellos de seguridad, la constructora Delsa, cuyo gerente general es Cristóbal Sáenz, comenzó a buscar una alternativa que solucionara estos problemas. Y en esa tarea empezó a trabajar con Chilectra para desarrollar un concepto que se aplicaba escasamente en el país.

Pronto se sumaron otras constructoras. “Delta Edifi-cación entró en esta senda, en la búsqueda por consolidar edificios de departamentos que rompieran con los eternos problemas de alto costo en gastos comunes, mejorar la eficiencia, la comodidad y disminuir la contaminación al interior de los mismos”, indica Alvaro Garfias, gerente inmobiliario de la compañía.

Balboltín dice que se han contactado con la mayoría de las constructoras y que hay buena acogida. Chilectra indica que más de 600 departamentos fueron construidos bajo el concepto full electric durante el 2005, equivalente a unos seis o siete proyectos de construcción, los que se sumaron a los que comenzaron a realizarse desde el año 2001. “Así, actualmente hay unos 25 edificios de este tipo en Santiago y unas 15 inmobiliarias que lo están aplicando”, dice el ejecutivo.

Algunos de los proyectos con esta tecnología son los edificios Hamlet, donde se partió el concepto Neohaus (2001), y Brasilia, de Inmobiliaria Delsa; el Edificio Colón, de Inmo-biliaria Oregón; el condominio Boulevard Plaza, de Inmobiliaria Delta, y los Loft Espacio Claro, de Inmobiliaria Nollegam.

¿Más caro que el gas?

Full electric apunta a que la electricidad sea el único energético al interior de la vivienda. Desde el agua caliente para el baño y la cocina, la calefacción, climatización y los hornos. Y aunque este concepto está en departamentos de todo tamaño, tiene un nicho específico en los de menos de 35 ó 50 m2, ya que la actual regulación prohíbe los ductos de gas dentro de las habitaciones.

Para desarrollar el sistema, Chilectra desarrolló el concepto de Tarifa Hogar. La idea es usar las ventajas que da tener un medidor de electricidad que registra los horarios peak y los de bajo consumo, para usar la energía eléctrica en los momentos de baja tarifa en equipos como los acumuladores de calor, que pueden liberar la energía muchas horas después. “Es tan eficiente y económica como la del gas, ya que emplea tecnología de última generación como son los tableros de tarifa horaria diferenciada”, asegura Garfias.

Organización ciudadana: Las caras detrás de los carteles
(El Mercurio, 26/02/2006)

Pelean por sus plazas y parques, por los deterioros del barrio o por puro amor al patrimonio. Nos sumergimos entre ellos para conocerlos.

Innumerables son los grupos que se organizan para protestar por su barrio. Sacrifican horas de sueño, el cariño familiar y utilizan todos sus contactos e ingenio para ser escuchados.

Algunos de los primeros en meter bulla en Santiago fueron los vecinos de Pedro de Valdivia Norte cuando nació el proyecto Costanera.

Desde ese día, Mónica Retamales, periodista, bombardea a sus colegas con comunicados para que sus vecinos tengan cobertura. Y la estrategia le ha resultado: el barrio aparece casi a diario en la prensa o en la tele. “Utilizamos todos nuestros contactos para meter ruido. Si no los tuviéramos, no sé si tendríamos los mismos espacios”.

Quienes viven en esta área de Providencia hoy alegan por los túneles que se construyen bajo el San Cristóbal.

Juan Luis Moure, el vocero, afirma que no van a parar hasta que el Ministerio de Obras Públicas acepte la propuesta alternativa que le presentaron y que tantas horas de sueño les costó diseñar. “Los ingenieros son del barrio y se quedaron varios días trabajando hasta la madrugada… y sin ganar un solo peso, obviamente”.

Como necesitan presupuesto para tanta gestión, hacen rifas, solicitan aportes casa por casa y diseñaron una serie de carteles que venden a los vecinos.

Moure pone de vez en cuando la casa y toda su voluntad para organizar cuanta cosa se les ocurra. Su familia le ha reclamado por tanto entusiasmo, pero en el fondo igual lo apoyan. No piensa parar.

“Al menos, hemos puesto el tema en los medios y la gente ahora lo discute”.

San Miguel presente

Exactamente son 56 vecinos los que conforman el movimiento “Organización de Defensa del Patrimonio Urbanístico y Habitacional de San Miguel-El Llano”. La mayoría reside en casas del año 45, que se caracterizan por sus enormes patios y amplias dependencias.

“Mucho terreno codiciado por las empresas constructoras para levantar edificios de hasta 17 pisos que nos quitan la luz”, dicen sus dirigentes.

Conscientes del poder que han generado, porque ahora pueden hablar de igual a igual con autoridades, para ellos la lucha ha sido dura.

Además de pagar una cuota para autofinanciarse tienen que firmar un registro. “Todo debe estar como Dios manda. Si uno quiere participar, también hay que hacerse responsable”, dice Victoria Loyola, trabajadora y dueña de casa, quien comenzó a golpear puertas cuando la presionaron para que vendiera su casa.

“Había muchas personas que estaban sufriendo lo mismo y que temían que en cualquier momento les partieran la casa en dos y les instalaran un tremendo edificio de vecino”.

Victoria agrega que han repartido volantes en la feria y están organizando una asamblea en la plaza para muy pronto.

Ella es una de las más entusiastas. Escribe cartas a los diarios y navega por internet para aumentar sus conocimientos y buscar más contactos. Su tarea, nada fácil, es participar activamente en las enmiendas del plan regulador comunal.

Si bien no tienen arquitectos que los orienten, Pedro Vargas, contratista forestal, es el que se encarga de conseguir la información con amigos de la Universidad de Chile.

Por eso no es casual que en casa de Victoria, en las reuniones de intenso trabajo, se hable con casi plena sapiencia de rasantes, índices de constructibilidad y una serie de términos que para ellos hasta hace poco eran chino.

Elías de la Cruz

Las arquitectas Adriana Araneda y Verónica Adrián, además de ser madre e hija, vivieron 30 años en París.

Empapadas de la cultura patrimonial francesa, no escatimaron en poner su impronta en su microbarrio de Ñuñoa, declarado por el plan regulador comunal como “zona de conservación histórica”. Su fin, en el corto plazo, es que el Consejo de Monumentos Nacionales lo declare Zona Típica.

Se bautizaron como “Colectivo Elías de la Cruz”, en honor al conjunto habitacional, y desde fines del año pasado están en la pelea por modificar el plan regulador y parar la vorágine inmobiliaria. “Cada piso más es un rayo de sol menos para Ñuñoa”, dicen madre e hija, quienes retomaron la organización del barrio y despertaron a los vecinos que desde hace algún tiempo se habían desmovilizado.

“Con la Pola, que es periodista, y el Vicente, que es sociólogo urbanista, comenzamos a organizar a la gente, que en su mayoría pertenece al mundo de la cultura. Incluso participa la actriz Lorene Prieto, quien aparece en muchas teleseries, y otros tantos conocidos que eligieron este barrio para vivir y ahora ven con impotencia cómo su entorno se está transformando”.

La verdad es que se han hecho muy amigos.

“Hemos logrado tenernos confianza y encargarmos las casas cuando salimos de vacaciones”, comentan con entusiasmo las arquitectas.

Si bien la plaza, corazón de las 200 casas construidas en 1928, constituye el centro de las reuniones y de los comentarios cotidianos de cómo andan las cosas, mientras los vecinos sacan a jugar a los niños y pasean a sus mascotas, la vivienda de estas arquitectas se ha transformado en el centro de operaciones. “Acá estudiamos mucho sobre patrimonio y el plan regulador. Hacemos los volantes que repartimos, los comunicados y cuando algún vecino necesita, hasta le facilitamos el computador”.

Barrio Miguel Claro

El ruido nocturno y las parejas “prácticamente haciendo el amor en la calle” fueron los hechos que rebasaron la paciencia de Margarita Paci, quien nació en el barrio Miguel Claro hace más de 50 años y participa en cuanta marcha se arme para mantener el carácter residencial de la zona.

“No voy a tranzar por mantener mi calidad de vida intacta”, reclama indignada.

En 2002, los vecinos se reunieron por primera vez para reclamar por las altas torres de edificios que aparecían por todo el entorno.

Así, en casa de María Angélica Urbina, arquitecta, escritora y funcionaria pública, y en la vivienda del hombre del tiempo de TVN, Luis Weinstein, organizaron varias protestas.

El hijo de la dueña de casa diseñó gorros alusivos, un vecino publicista se puso con los volantes y los artistas que viven en los alrededores armaron tocatas y espectáculos.

Joe Vasconcellos, Ángel Parra y la escultora Cristina Pizarro les colaboraron.

Y aunque no consiguieron parar la construcción de edificios, hoy se juntan en la casa de María Angélica para discutir, entre otros temas, el nuevo plan regulador de Providencia o la inauguración de otro pub en calle Manuel Montt.

Y todo mientras la dueña de casa les ofrece algún tentempié o una bebida para paliar el fuerte calor.

Vecinos por Santiago

Tienen la basura, literalmente, hasta el cuello. Es que deben dejarla al interior de la casa mientras el esquivo camión recolector pasa a retirarla. Y como muchas de las viviendas de los barrios Brasil y Yungay no cuentan con patio, en las cocinas conviven los desperdicios y la comida. Por eso, Rosario Carvajal, profesora de historia, no da más. “A mí me han salido hasta ratones”.

Por eso no dudó en protestar junto a la agrupación “Vecinos coordinados por Santiago”, nacida al amparo de este problema y que hoy ha extendido sus alas para exigir la devolución de espacios públicos y más participación ciudadana.

Rosario es una de las voceras de turno y reparte volantes informativos en la salida del Metro del barrio y organiza cuanto evento inventan. Se consigue materiales en las universidades e incluso transformó el sitio web del centro cultural en donde trabaja en la página de los vecinos “reclamones”.

Además, cada sábado, al ritmo de las canciones de Serrat y Sol y Lluvia, participa en las asambleas que esta organización realiza en el Centro Social y Cultural El Sindicato para ponerse al día respecto de las acciones que emprenderán.

Plaza Las Lilas

Hace un año, apenas se saludaban. Pero bastó una nota en la prensa acerca de la demolición del histórico cine Las Lilas para que se hicieran de lo más yuntas. Y aunque la pantalla grande ya fue demolida, ahora demandan considerar al barrio Zona Típica y que la plaza no se las toque nadie. Hasta reactivaron la “Coordinadora pro derechos urbanos” para trabajar por lo que consideran “lógico”.

Para ponerse de acuerdo, cada miércoles se juntan en la casa del pintor Rodrigo Cociña.

Entre cuadro y cuadro, talla y talla, lograron desde ordenar la casa del artista hasta sumar conocimientos para armar actos culturales de protesta. Los asistentes son arquitectos, artistas, periodistas y hasta comerciantes. La discusión es de lo más entretenida. Los más “artesas” proponen recitales de poesía y los más políticos piensan en llegar a La Moneda para hablar con la Presidenta.

Aunque saben que ya no pueden hacer nada por el ex cine, no se desalientan.

“Desde el principio sabíamos que esta lucha iba a ser ardua y desigual, pero no por eso vamos a bajar las banderas”, discursea Juan Guerra, vecino que hace menos de un año apenas decía ¡hola! al dueño de casa y que hoy se sienta cómodo en uno de los sillones de Cociña.

Los grandes desafíos para el Bicentenario
(El Mercurio, 26/02/2006)

En el segundo semestre de 2006 se iniciará la ejecución de muchas obras con la esperanza de terminarlas para 2010.Santiago presenta proyectos de menor envergadura que los de regiones, pero no muestra aún mayores avances.

Más de 250 obras a lo largo de todo Chile fueron planeadas para la celebración de los doscientos años de nuestro país.

Las primeras ciudades invitadas a unirse fueron las cuatro más pobladas: Antofagasta, Valparaíso, Concepción y Santiago. Pero luego, la iniciativa se extendió al resto de las regiones del país, motivando incluso que muchas comunas propusieran proyectos Bicentenario.

En Santiago, los más connotados son el Portal Bicentenario, conocido tras la oposición al cierre del Aeropuerto de Los Cerrillos, y el Anillo Interior de Santiago, proyecto menos popular, pero no de menor envergadura. Ambos abarcan la misma cantidad de hectáreas y tienen el desafío de renovar y repotenciar el sector donde están ubicados.

En la Región de los Lagos, el puente sobre el Canal de Chacao es uno de los proyectos emblemáticos junto con el Plan Bordemar en la V Región.

En noviembre, la sociedad concesionaria Puente Chiloé concluyó las exploraciones geotécnicas complementarias, las que arrojaron la buena calidad soportante de la Roca Remolino, sobre la cual se sustentará el pilar central del puente colgante.

Durante 2006, se validarán los criterios de diseño del proyecto y se presentará la propuesta financiera, programándose su construcción para el segundo semestre de 2007. Este puente será el más largo de América Latina y el décimo en el mundo.

El Plan Bordemar, en Valparaíso, involucra una inversión de US$ 140 millones. Constituye una ruta de 12,3 kilómetros y 3 túneles que pasará por debajo de Playa Ancha para que los camiones que van a puerto no ingresen a la ciudad.

Las obras del Bicentenario proyectadas por el Gobierno de Ricardo Lagos tienen su correlato en el énfasis republicano que en pleno período de dominio partidista-parlamentario se dio en 1910 a la fiesta por los primeros cien años de administración nacional autónoma.

El Chile de 1910 tenía unos 3 millones 200 mil habitantes y la población era mayoritariamente rural, aunque la cuestión social ya se hacía oír en la izquierda y en los socialcristianos y Vicente Huidobro rasgaba vestiduras en su “Balance Patriótico” contra la corrupción y la burocracia.

Más encima, el terremoto que asoló Valparaíso en 1906 detonó un déficit financiero que iba en alza desde la Revolución de 1891.

Y justo el año en que se iba a celebrar el Centenario, muere en Alemania el Presidente Pedro Montt. El vicepresidente, Elías Fernández Albano, asumió la dirección del país.

Más que obras materiales -el Parque Forestal surgió entonces tal como lo conocemos, al igual que una serie de monumentos a próceres y colonias extranjeras- hubo una fuerte autocrítica sobre la identidad nacional y una constatación de una cierta “crisis moral”, en la que coincidían, paradójicamente, los más “radicales” y la Iglesia.

Bueno, y si Montt falleció el 16 de agosto, su sucesor Elías Fernández Albano murió el 6 de septiembre. Presidió las, pese a todo, grandes fiestas, el vicepresidente Emiliano Figueroa, que resultó un notable animador con su espíritu festivo.

Espacio para la creación
(El Mercurio, 26/02/2006)

Una mirada distinta de los proyectos inmobiliarios tiene este grupo de profesionales: apuestan por explotar nichos específicos con conceptos nuevos.

A mediados de los noventa, Manuel José González, empresario ligado a la construcción, comenzó a congregar a sus amigos para plantearles la idea de hacer proyectos inmobiliarios nuevos, que tuvieran conceptos diferentes. La iniciativa resultó tan auspiciosa que hoy están trabajando en la remodelación del Gran Hotel Puerto Varas y la construcción de edificios de oficinas y de departamentos en Santiago y Puerto Montt, además de segundas viviendas en la IV y V Región.

Así se formó un equipo estable que, bajo el alero de la empresa ConArq Gestión & Asesoría Inmobiliaria, apuesta por proyectos que apunten a nichos específicos, que tengan características propias y que no se repitan. “Desde 1996 empezamos a trabajar, pero más que una empresa inmobiliaria, somos un equipo de gestión y de asesoría”, explica González.

La estrategia de trabajo es conceptualizar una demanda inmobiliaria específica del mercado, la que es financiada a través de inversionistas institucionales, como Consorcio, Euroamérica y Celfín, y privados, y en la que participan también, con distintos porcentajes, estos profesionales.

Otra de las singularidades de este equipo es que cada uno de sus integrantes posee sus propias actividades. “José Domingo Peñafiel tiene su oficina de arquitectura y yo mi estudio jurídico, pero todos somos muy amigos y aunque a veces a algunos un negocio no les parece, pero a otros sí, conversamos y llegamos a consensos”, explica Luis Fernando Mackenna.

Conceptos distintos

Si bien el primer proyecto de este equipo de profesionales fue hacer casas en La Dehesa, el más significativo en cuanto a su creación y desarrollo fue Punta Pite, un exclusivo loteo de sitios para segunda vivienda ubicado en Zapallar (V Región). “Ésta es una iniciativa que tiene un concepto completamente diferente y es casi único en la zona, es decir es un anti resort, ya que es pequeño y no posee un Club House, cancha de tenis y de golf. Tuvo una inversión de US$ 12 millones y está ubicado en un lugar precioso que respeta y potencia la naturaleza del lugar, además está orientado a gente de un alto poder adquisitivo”, dice González.

Otro proyecto que están realizando y que tiene mucho que ver con el concepto arquitectónico y paisajístico de Punta Pite es Agua Dulce, ubicado a 270 km al norte de Santiago (IV Región). Aunque respeta la geografía y el entorno natural, se extiende por 262 hectáreas y contempla un Club House, canchas de golf y tenis, entre otras instalaciones. Tendrá tres etapas y la inversión es de US$ 40 millones.

“Agua Dulce es el proyecto más relevante que estamos desarrollando hoy porque prácticamente es un megaproyecto, que tiene una densidad de hasta 700 viviendas y una playa propia de 600 metros. El concepto que trabajamos es un lugar de veraneo para familias jóvenes del segmento ABC1, que creemos que es un mercado que estaba insatisfecho porque no tenía la oportunidad de comprar un terreno de segunda vivienda en un lugar precioso a un precio razonable”, destaca.

Pero entre las creaciones curiosas en las que están trabajando está la remodelación del Gran Hotel Puerto Varas. Asociados a la cadena de resorts Sol Meliá, que no tenía presencia en Chile, y algunos inversionistas privados como el animador Kike Morandé, la idea es hacer el primer hotel cinco estrellas en Puerto Montt (X Región). La inversión total es de US$ 10 millones y se inaugurará en noviembre próximo.

“Nos dimos cuenta del crecimiento que venía teniendo la región y que había una gran demanda de turismo, pero no había una oferta hotelera cinco estrellas. Entre los aspectos que hay que destacar es el centro de eventos, que tiene una capacidad para 500 personas y que está pensado principalmente para la industria salmonera”, explica Sebastián Rosselot.

Estando en la región, estos profesionales se percataron también que había un mercado muy interesante para las oficinas y se lanzaron a armar un proyecto. “Acá el concepto es hacer un edificio como los que hay en el barrio El Golf de Santiago. Está ubicado en primera fila frente al mar, tiene 14 pisos, la inversión es de US$ 10,5 millones y estará listo en enero de 2007”, sostiene.

Mercado maduro

En Santiago también están trabajando. En Lo Curro, por ejemplo, están a punto de entregar un conjunto de 15 viviendas de entre 13.500 a 22.000 UF, con un concepto que rescata lo mejor de la seguridad de un edificio y las ventajas de una casa.

Su inversión es de US$ 7 millones. Además están realizando un edificio de oficinas en una zona donde actualmente no existe mucho desarrollo, Nueva Costanera con Alonso de Córdova. Acá el plus es hacer un edificio de barrio, con todas las comodidades, destinado a profesionales de alto nivel. Cuenta con 7 pisos y la inversión es de US$ 6,5 millones.

En Lo Curro iniciarán también próximamente la construcción de un edificio de departamentos, donde la idea esencial es resaltar la vista, además de combinar la seguridad con un jardín de 7 mil m2. Tendrá 4 pisos y la inversión será US$ 10 millones. Aunque la gran mayoría de los proyectos de estos profesionales ha estado enfocada en el segmento ABC1, no descartan trabajar en un futuro en iniciativas que aborden viviendas sociales, hospitales y cárceles.

“El país necesita cosas diferentes y, en la medida que la economía se mantenga estable, habrá mucho espacio para la creación. Además, el mercado chileno está dispuesto a pagar por proyectos distintos y que tengan valor agregado. Y es por ello que nosotros hemos decidido trabajar en regiones”, destaca González.

Y agrega: “El mercado nacional ha madurado mucho en los últimos años y hoy los clientes son cada vez más exigentes, tanto en la calidad como en los conceptos de los productos que se ofrecen, y no están dispuestos a comprar cualquier cosa”.

En este momento, están analizando algunos proyectos inmobiliarios en Argentina y Centroamérica. En el país vecino, se asociaron con los empresarios trasandinos Francisco Soldati, Esteban Olivera e Ignacio Allende para abordar estos mercados.

Por lo pronto, en Tucumán y Córdoba están pensando hacer countries o strip centers, mientras que en Centroamérica una urbanización. “Son mercados muy distintos al nuestro, otra manera de hacer negocios y otros requerimientos, necesidades y gustos de la gente. Un proyecto que se hace acá jamás se podría vender allá. Por eso es importante asociarse con locales y armar buenos equipos”, dice Mackenna.

A nivel nacional, entre otros proyectos, están visualizando instalar un spa en el lago Todos Los Santos (X Región): “Ya compramos la propiedad, pero estamos meditando cómo hacerlo”, adelanta González.

Equipo ganador

Tienen menos de 40 años, son muy amigos y comparten el gusto por hacer negocios, dar trabajo y ganar dinero. Con sus diferentes personalidades, profesiones y puntos de vistas, todos opinan de los proyectos aunque no estén directamente relacionados con el tema inmobiliario, porque la idea es generar conceptos distintos y no replicar los que ya hay en el mercado.

El equipo está compuesto por Manuel José González, 38 años, empresario; Luis Fernando Mackenna, 38 años, abogado; Sebastián Rosselot, 38 años, ingeniero comercial; José Luis Barros, 38 años, ingeniero comercial, y Jaime Cruz, 37 años, ingeniero comercial. Complementa el grupo, la experiencia y el prestigio de los arquitectos José Domingo Peñafiel y Francisco Alemparte y de la paisajista Teresa Moller.

A días de estrenar oficina nueva, en el barrio El Golf, estos profesionales se aprestan a seguir trabajando fuerte y aprovechando las oportunidades que les ofrece el mercado. “De hecho, hemos ido juntando físicamente nuestras oficinas privadas porque queremos estar cerca, ya que eso nos facilita mucho más la conversación y es, precisamente, a través de ella que llegamos a la creación de nuevos proyectos y conceptos”, explica Manuel José González.

Los defensores de la ciudad
(El Mercurio, 26/02/2006)

Ya se desató en las urbes chilenas la lucha de los vecinos que buscan una ciudad mejor. Los expertos dicen que no es un fenómeno local, y si las autoridades no abren canales reales de participación, esta práctica democrática seguirá aumentando.

A nadie sorprende ver en la televisión y en los diarios a vecinos protestando para que se respeten sus derechos ciudadanos. Desde la demanda por un semáforo o un lomo de toro hasta la defensa de un edificio patrimonial o cambios en los planes comunales reguladores conforman la lista de consignas que se aprecian en pancartas.

Hay de todo. Quienes tienen más recursos imprimen sus grandes carteles con sofisticadas tecnologías. Aquellos más artistas usan artilugios de la plástica para darse a conocer, mientras que la gente más sencilla recurre a métodos tradicionales de protesta: volantes que reparten en la feria y pliegos de cartulina manuscritos con plumón escolar.

El arquitecto urbanista Héctor Arroyo, que ha estudiado el fenómeno de participación ciudadana en Canadá y México, afirma que las protestas callejeras por mejoras urbanas y calidad de vida no es privativo de Chile. “Sólo hay que mirar lo que pasó el año pasado en Francia, cuando París ardió. Si bien existen grandes diferencias entre ambos casos, obedecen al fenómeno de la globalización, que permite que la gente se organice frente a los mismos problemas que ella les acarrea”.

Se calcula que sólo en la capital de Chile han existido cientos de organizaciones barriales, de todo tipo, en estos últimos tiempos que se han formado a la luz de alguna demanda relacionada con la ciudad.

Dice Patricio Herman, de “Defendamos la ciudad”, que si bien algunas son transitorias, desaparecen cuando finaliza el conflicto, otras han logrado erigirse más allá de su barrio y transformarse como importante referente para dar respuesta y asesoría técnica a los que vienen.

“Un caso emblemático lo representan los vecinos de Costanera Norte, quienes una vez que lograron que las autoridades modificaran el trazado de la autopista que los perjudicaba, conformaron Ciudad Viva, organismo que se dedica a defender los derechos urbanos”.

Sin partidos políticos

El arquitecto Alfredo Rodríguez, de Corporación Sur, coincide en que los grupos de protestas barriales son una tendencia mundial. “Surgen de manera dispersa y una de las razones es que los partidos han perdido su peso y para la gente ya no cumplen el rol de interlocutor entre los intereses de los ciudadanos y las autoridades. Pero lo más importante es que son transversales, súper democráticos. A nadie se le excluye por su tendencia política o condición socioeconómica. Los que funcionan con estos métodos suelen tener mayores éxitos en sus objetivos”.

Para los expertos -además del fenómeno de la globalización, que ha traído mucho progreso pero a la vez ha mermado la calidad de vida en los barrios producto del desarrollo vertiginoso- una de las causas centrales del malestar de la gente es la falta de canales de participación.

“Las autoridades del territorio, locales y centrales, planifican sin consultar a la gente que se verá impactada por los proyectos de construcción. Los afectados sienten, y con justa razón, que se los pasa a llevar. Y cuando intentan buscar soluciones sólo encuentran negativas. Incluso, algunos alcaldes que se han dado cuenta de la necesidad de consultar a los vecinos, cuando cambian el plan regulador comunal, realizan una especie de convocatoria. Pero, finalmente, las propuestas de la gente no son consideradas cuando elaboran el rayado de cancha definitivo”.

Otro de los males que salta a la vista es el crecimiento excesivo de la ciudad. Para Patricio Herman, mientras más se desarrolla una urbe, las complicaciones de habitarla se acrecientan. “Santiago concentra el 42 por ciento de la población de todo Chile. Está alta cifra sólo la tenemos nosotros a nivel mundial. Hemos roto un récord. En este escenario es probable que las protestas barriales sigan aumentando y de aquí a diez años proliferen significativamente”.

Para Alfredo Rodríguez este fenómeno es parte del proceso democrático. “Pero las cosas podrían ser mejores. Las obras de infraestructura que impactan la ciudad y afectan el barrio, por ejemplo, no debería ser avasalladoras. Si los proyectos tuvieran mayor difusión y contaran con la participación de los afectados, se evitarían mayores problemas. Lo que pasa que tanto el Ministerio de Vivienda como el Ministerio de Obras Públicas están apostando por un modelo que permite el desarrollo de las constructoras e inmobiliarias, ya que generan empleo y crecimiento económico. Lo malo es que no han incorporado el problema de los impactos que éstos provocan en la ciudad. Creo que no es mala voluntad, si no que existe temor a que las empresas no inviertan o a veces no ven necesario contemplar esta variable. Se suma el hecho de que al consultar a la gente los proyectos se demoran más”.

Según el arquitecto, se ha demostrado que se puede progresar haciendo participar a la comunidad. “Muchas empresas están dispuestas a transar ciertas cosas, sobre todo en proyectos millonarios”.

La institucionalización

Todos concuerdan en que una de las características de los grupos barriales es que ejercen su protesta en forma pacífica y para solucionar sus conflictos buscan información técnica sobre lo que los aqueja.

“Están dispuestos a sentarse a conversar, aunque hay que reconocer que las autoridades temen que, al generar instancias de participación, aparezcan los clásicos señores que siempre se niegan. Sin embargo, esto es parte del proceso democrático. Y la falta de costumbre de participación ciudadana en Chile tiende a crear desconfianzas, las que una vez limadas permiten que las cosas fluyan entre vecinos y autoridades. Pero no es tan fácil, porque en nuestro país se impone el espíritu burocrático”, enfatiza Héctor Arroyo.

Comenta que para que no se produzcan estallidos sociales en el futuro, como en otros países, resulta imprescindible que las autoridades puedan prever los conflictos. “Tener olfato, ésa es la clave y consultar con expertos nacionales la forma de cómo empezar a enfrentar el conflicto urbano. Esto se ha hecho en otros países y ha dado resultado”.

Un caso emblemático de participación ciudadana, que comenzó a tomar fuerza en Santiago, ha sido el de la organización “Defendamos la ciudad”. Dice Patricio Herman, uno de sus dirigentes, que todo comenzó por la inquietud de un grupo muy pequeño de profesionales vinculados con la urbe. “Pero nosotros nos sorprendimos cómo fue tomando fuerza. Y gracias a las cartas que publicamos en El Mercurio, mucha gente de barrio comenzó a consultarnos. Hemos conocido más de cien organismos independientes de todas partes de Santiago”.

Quizás la expresión más institucionalizada de participación ciudadana independiente la conforman la “Coordinadora de derechos urbanos”, creada en septiembre de 2005, que reúne a muchas organizaciones barriales, también a “Defendamos la Ciudad” y a “Ciudad Viva”. Además de elaborar su manifiesto, se ha propuesto ser reconocida al mismo nivel de la Cámara de la Construcción para negociar los asuntos urbanos de igual a igual con las autoridades.

Derechos urbanos

En septiembre de 2005 se creó la Coordinadora de los Derechos Urbanos, que aglutina a organismos barriales independientes. La agrupación busca tranformarse en una instancia con capacidad de sentarse a debatir los temas de la ciudad con las autoridades. Su emblema: exigir el proceso de democratización en la toma de decisiones en los asuntos de desarrollo de la urbe.