En Chile hay 455 localidades aisladas por no contar con caminos formales de acceso

Por: Manuel Valencia y Equipo de Regiones.

Estudio de la Cámara Chilena de la Construcción estima que en el país 70 mil km de vías no están pavimentados: La mayoría se concentra en las zonas costera y andina. Las regiones con mayor déficit son Arica, Tarapacá y Coquimbo.

Cuatro años llevan los habitantes de la localidad de Paso El León literalmente aislados del mundo. Una pequeña pasarela unía a este poblado cordillerano, habitado por 120 personas, con el resto de la Región de Los Lagos. Sin embargo, tras caerse, la única opción que tienen es cruzar en bote, o si no está disponible, en una especie de tirolesa o carrito adosado a una cuerda tensa.

“Tenemos que hacer todo en Argentina (en Bolsón o Bariloche, a cinco horas de viaje). Ir al médico, comprar víveres… todo”, dice golpeado Juan Bahamonde, oriundo de este sector, en la zona cordillerana fronteriza de Los Lagos.

“Es muy duro el aislamiento acá”, coincide el suboficial José González, del retén de Paso El León. “Estamos aquí para apoyarlos. En un 80% de los casos por acá son personas de la tercera edad, a quienes les cuesta especialmente el uso del carro”.

Esta zona está entre los 455 sectores aislados del país, que no tienen vías formales de conexión y dependen o de un camino en mal estado, de un acceso informal u otros medios de transporte como barcazas, trenes o caballos, según lo detectó un estudio elaborado por la Cámara Chilena de la Construcción, a solicitud de “El Mercurio”.

El análisis considera como asentamientos aislados los que, según los criterios del Instituto Geográfico Militar, tienen entre 500 y 5.000 habitantes y están a más de cinco kilómetros de una vialidad de ripio o pavimentada.

La mayoría está en las regiones de Arica y Parinacota (82), Tarapacá (77), Coquimbo (70), Aysén (59) y Atacama (50). En cuanto a sectores geográficos, la zona costera concentra a la mayor parte de poblados deficitarios de conectividad (196), seguida de la zona andina (147).

Entre ellas, destacan casos como el de Livílcar, ubicado 100 km al este de Arica. Hasta allí se llega solo por una huella de tierra por Copaquilla, en el acceso a Putre, que no está rotulada por el MOP.

Otro caso es el de Pichipehuenco, ubicado al interior de Lonquimay, en La Araucanía. Aunque tiene un camino, hasta hace un par de años sus habitantes solo podían salir de ahí a caballo o caminando, pero se les habilitó un bus con fondos del Transantiago para viajar una vez al día a Lonquimay.

Distinto es lo que se vive en Aysén. Ahí, sectores como Río Nef, Río Mitén, Cerro Negro y Colonia Norte solo cuentan con una pasarela y dos pequeñas balsas para llegar a Cochrane.

Carlos Piaggio, gerente de infraestructura de la Cámara Chilena de la Construcción, estima que de los 100 mil kilómetros de vialidad en Chile (considerando una estimación de 30 mil vías no enroladas por el MOP), solo cerca de 30% está pavimentado. “Hemos planteado que se puedan concesionar estos caminos, agrupados en una red de vías, para disminuir más rápido los déficits. También en la medida en que se utiliza más el mecanismo de asociación público-privada, quedan más recursos disponibles para que el Estado se haga cargo”.

La ex subsecretaria de Transportes Gloria Hutt propone como opción que esas concesiones sean pagadas por el Estado. “Los niveles de flujo son muy pequeños en estas vías para capturar recursos por la vía de un peaje. También mucho del financiamiento que se requiere para agilizar estas inversiones se puede resolver con el subsidio espejo del Transantiago”.

Proporción
Si bien estas zonas son el 10,8% del total de las localidades, se estima que ahí pueden vivir sobre 100 mil personas.