Aeropuerto de Santiago sufrirá cierre de una de sus pistas por reparación: ¿nuevo colapso?

Por Julián Mazzucco, Pulso.

En septiembre, en plena temporada alta, la pista 17L será sometida a una completa refacción, que implica demoler su carpeta de rodado y su reemplazo por otra acorde al peso de las aeronaves que actualmente la utilizan. Aerolíneas piden plan de mitigación.

El colapso del Aeropuerto de Santiago se hace notar en fechas clave, especialmente en temporada alta, cuando aumenta con fuerza el flujo de pasajeros. Pero ahora se sumará otro problema, esta vez fuera del terminal: una de las dos pistas se cerrará para su reparación.

Actualmente, representantes de los ministerios de Obras Públicas y de Transportes, junto a la Dirección General de Aeronáutica Civil y las aerolíneas, se están coordinando para evitar complicaciones en el aeropuerto Arturo Merino Benítez (AMB).

La pista 17L comenzaría a repararse en septiembre, luego de adjudicarse el proceso de licitación que está en curso.

“Las obras corresponden a reemplazo y reconstrucción de losas de hormigón, reposición de capa de rodado de asfalto, donde se aplicará un sello asfáltico en los márgenes, y reinstalación de luces de eje entre otras. Hoy, el proyecto se encuentra en etapa de licitación, en espera de recepción de ofertas técnicas y económicas. Estas labores fueron pensadas para ejecutarse en una época del año en la que el clima favorece en la visibilidad en las operaciones aéreas”, explicó el titular de Obras Públicas, Alberto Undurraga.

De acuerdo con las bases de licitación, el contrato con la firma que se adjudique la obra es de siete meses, es decir, la pista debería quedar completamente operativa en abril de 2015. Sin embargo, de acuerdo con Latam, la autoridad planteó que estarían antes de ese plazo. “Estamos en conocimiento del retraso del proyecto, pero oficialmente, nos han comunicado que estaría listo a fines de diciembre de 2014”, indicó la compañía.

Si bien la autoridad mantiene diálogo con las aerolíneas, éstas han planteado una serie de dudas y han solicitado medidas de mitigación para evitar un nuevo colapso en el principal terminal aeroportuario del país.

Ricardo Real, gerente general de Aerocardal, explicó que estos trabajos afectarán en gran medida la eficiencia del aeropuerto, a pesar de que el tráfico de pasajeros ha bajado en lo que va del año.

“La capacidad operacional del aeropuerto se verá reducida a la mitad, lo que nos afectará desde la perspectiva de la eficiencia, ya que los vuelos demorarán más en taxear sobre la plataforma, afectando de manera relevante el consumo de combustible, y los tiempos de salida y llegada a Santiago”, puntualizó.

Frente a esto, las aerolíneas han solicitado que los arreglos se hagan en tramos, con lo cual se podría utilizar la mitad de la pista para el despegue y aterrizaje de aviones de menor tamaño.

Según el presidente de la Asociación Chilena de Líneas Aéreas (Achila), Italo Guerinoni, los arreglos tendrían un costo mayor si no son bien coordinados. De acuerdo con los datos que maneja, los trabajos partirían el 24 de septiembre y serían entregados el 2 de enero, dejando operativo sólo 2.184 metros, lo que permitirá el uso de la pista a aviones de fuselaje delgado y de una autonomía cercana a las tres horas, es decir, mayoritariamente domésticos o de rutas cercanas, como Buenos Aires o Lima. Luego de esa fecha, la pista seguirá en reparaciones, pero con 3.166 metros habilitados de sus casi 4 kilómetros totales.

El gran pero de los arreglos es que la segunda pista tiene restricciones de uso en la noche, por lo que los aviones de gran tamaño tendrían que modificar sus frecuencias. Así, en promedio, 1.244 pasajeros diarios y 1.165 toneladas de carga semanales, que son transportadas en vuelos nocturnos de larga distancia, serán afectados por la reparación de la pista 17L.

Guerinoni reconoce que la pista que seguirá completamente operativa, la 17R, tiene una restricción de uso desde la medianoche hasta las 6 am para limitar el ruido. Con ello, de acuerdo con el líder de la asociación, “no podrían salir vuelos de larga distancia nocturnos y de mayor peso, ya que no tendrían la pista 17R habilitada y en la 17L no podrían operar debido a la extensión de la pista”. De este modo, según explicó, los grandes afectados serían los aviones cargueros y las líneas aéreas de pasajeros como Copa, Avianca y Latam, que tienen vuelos de pasajeros con destinos de larga distancia en esas horas.