Turistas claman por un mejoramiento de la deteriorada ruta costera Reñaca-Concón

Por Hernán Cisternas Arellano, El Mercurio.

Vía construida hace un siglo cuenta con una de las mejores vistas paisajísticas del borde costero central:

La carencia de un paseo peatonal continuo y de una ciclovía expone a quienes diariamente caminan, trotan y se desplazan en bicicleta por la ruta panorámica.

El camino costero entre Reñaca y Concón es uno de los recursos turísticos más valiosos ubicados al norte de Viña del Mar, pero a la vez uno de los más descuidados. Por ello, los usuarios claman por un mejoramiento de la vía, en especial de la franja que peatones y ciclistas utilizan entre la calzada y los roqueríos.

Los cientos de personas que diariamente caminan, trotan o se desplazan en bicicleta para disfrutar del paisaje costero, aprovechando las condiciones únicas que ofrece esa ruta panorámica, sorpresivamente se ven enfrentados a compartir espacios con los vehículos y correr riesgos de atropellos, porque el sendero peatonal desaparece abruptamente o porque profundos hoyos impiden seguir su trayecto.

En otros tramos, la amenaza es caer por los roqueríos ante la ausencia de barreras de protección o porque estas se encuentran absolutamente deterioradas por falta de mantención.

El peso de un siglo

A pesar de que en los últimos tres años se reconstruyó la totalidad de los puentes vehiculares -con franjas para peatones y ciclovías-, el camino costero Reñaca-Concón no ha recibido una atención integral ni renovación desde el inicio de su construcción hace 97 años, no obstante ser una de las áreas más apetecidas por los proyectos inmobiliarios desarrollados en los últimos años en primera línea frente al océano Pacífico.

A pasos del mirador Roca Oceánica, en el límite entre Viña del Mar y Concón, dos placas -que en su época eran equivalentes a la colocación de las actuales “primeras piedras”- dan cuenta del inicio del camino costero. La primera, fechada el 27 de septiembre de 1917, expresa que “El polvorazo que labró este corte fue explotado desde La Moneda por S.E. el Presidente de la República Sr. Juan Luis Sanfuentes”. La segunda informa que “Don Enrique Dublé Alquízar, ingeniero de la provincia de Valparaíso, proyectó y ejecutó este camino costero”.

La ruta se terminó de construir en 1930. Fue inaugurada el 31 de diciembre de ese año.

Queja de usuarios

Manuel Diez, residente en Santiago, quien diariamente pasea por el camino costero junto a Ana María Abusleme, con quien descansa en Reñaca, indicó que transitar por la calle “es peligrosísimo y nada relajante”. En tanto, ella expresa que “a mí me da miedo, porque se corre el riesgo de que nos atropellen”.

El contador auditor Rafael Martínez expresó que “aquí simplemente no hay preocupación. Entre Reñaca y Viña del Mar está todo bien, es un lujo su paseo costero, pero hacia Concón, nada. Abandono. Hay sectores superpeligrosos”.

Mabel Paez indicó que “si se van a preocupar del camino costero, que no lo hagan solo para los vehículos. Piensen también en quienes caminamos”.

El médico argentino Benigno Gutiérrez expresó que “cuando Chile ha hecho mejoras enormes y maravillosas, tiene que preocuparse de este camino muy viejo y muy angosto. Uno igual disfruta de la brisa del mar y de su clima excepcional, pero lo pueden mejorar”.

La profesora santiaguina Carolina Ibarra, que veranea desde hace 25 años en Concón, no puede completar el paseo por el borde costero porque el deterioro le impide transitar con el coche de su hija Agustina, de dos años. “Para los peatones esto es pésimo. Da pena y vergüenza que lo que debiera ser nuestro orgullo esté tan abandonado. Con mi hija en brazos no puedo saltar una baranda ni sortear los autos”.

Proyecto aprobado, pero sin financiamiento

Desde hace dos décadas existen propuestas para abordar el mejoramiento de la conexión costera. Incluso, el 15 de diciembre de 2010, el Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) aprobó el proyecto que el ingeniero Cristián Mitchel desarrolló a partir de enero de 2008.

Al proyecto no se le ha asignado la prioridad suficiente para que postule a financiamiento, lo que podría ocurrir entre los años 2015 y 2016.

En atención a las características del sector, limitado por las laderas de cerro y los roqueríos del mar, el plan propone acomodar el eje de la calzada vehicular, desplazándolo más hacia la colina, lo que generaría espacios para la construcción de una ciclovía y de un paseo peatonal continuo, con el menor impacto posible en las áreas más complejas, como las rocas y el campo dunar.

Se contempla la renovación de sus dos pistas a lo largo de 10 kilómetros, habilitación de paraderos para buses, zona de estacionamiento de vehículos, miradores y obras de paisajismo.

Aunque el mejoramiento del sector se encuentra caratulado bajo el nombre de Subetapa 1, como parte del plan de interconexión Reñaca-Concón, este se inició dando prioridad a las secciones 2 y 3, que unen ambos balnearios por la meseta y parte alta. A fines de 2013 se inauguró un tramo de la denominada vía PIV, entre el Estero Reñaca y Bosques de Montemar.