Intoxicación en edificio: primeros casos se registraron en noviembre

Por F. Díaz y D. Muñoz, La Tercera. (07/12/13)

Fiscalía indaga un eventual delito de adulteración de sustancias alimentarias, tras la contaminación de un estanque de agua.

Fue a comienzos de noviembre cuando se registró el primer caso de un residente de la torre de Carlos Antúnez, en la comuna de Providencia, con síntomas atribuibles a una intoxicación. A mediados del mes pasado los casos fueron en aumento, hasta que en los últimos días ya fueron centenares las personas intoxicadas. Según el Ministerio Público, la cifra supera los 500 afectados.

Así lo ha establecido la investigación que realiza el fiscal Francisco Jacir, de la Fiscalía Oriente, quien busca aclarar la contaminación con aguas servidas que sufrieron los vecinos de la torre.

El persecutor explicó que se indaga un eventual delito de adulteración de sustancias alimenticias, dentro de las cuales se considera explícitamente el agua potable. Los imputados arriesgan hasta 10 años de presidio, en casos de muerte o de un grave daño para la salud de las personas.

A las 11.00 de ayer, el persecutor acudió hasta la torre en compañía de la PDI, donde se tomaron muestras del agua contaminada, se pidieron los planos del sistema de cañerías del edificio y se entrevistaron con el equipo de administradores. Jacir también se puso en contacto con la seremi de Salud, Daniela Zavando, que estaba trabajando en el establecimiento para solucionar los problemas médicos ocasionados por la intoxicación.

Pesquisas y atenciones

Según lo que ha establecido la investigación, de manera preliminar, una de las cañerías del estanque se tapó, por lo que se produjo un rebalse en este recipiente. A consecuencia de esto, el receptáculo que contenía el agua potable se fue contaminando poco a poco.

Como hipótesis, se baraja la posibilidad de que haya sido por exceso de uso, o bien, que algún elemento se halla atascado en este reducto.

Según la seremi Zavando, “se han vacunado 761 personas y tenemos 515 enfermos por gastroenteritis”. La profesional recalcó que se ha instalado “en el edificio una sala de crisis con expertos de epidemiología de la autoridad sanitaria”. En ese lugar se están realizando atenciones médicas y la vacunación de niños y adolescentes entre uno y 20 años. “Los primeros resultados de los exámenes practicados arrojan la presencia de norovirus”, agregó Zavando.

Además de la investigación de la fiscalía, se está realizando un sumario sanitario. El edificio se arriesga a multas que van entre 0,1 y 1.000 UTM.