Bicicletas y peatones: La importancia de contar

Por Hernán Silva B. Gerente General Tecnología Sustentable

Chile está comenzando a experimentar los beneficios de incluir en los proyectos destinados a peatones y bicicletas, Sistemas de Conteo Automático y Permanentemente de Flujos. Se trata de tecnología inteligente que se puede utilizar en todo tipo de espacios públicos, tales como ciclovías, paseos peatonales, plazas, parques, costaneras, cascos céntricos urbanos, rutas interurbanas y rurales, así como también en los senderos de parques nacionales y áreas protegidas para contar gente que realiza actividades como trekking o mountain bike.

Estas herramientas abren un área de estudio que hasta hoy no se había desarrollado en el país y que dice relación con tener acceso a información estadística sobre movilidad sustentable, como por ejemplo: cuánta gente utiliza los proyectos, a qué hora transita por ellos, qué diferencias hay entre los flujos de personas o bicicletas que transitan entre los días de la semana respecto de los fines de semana, o entre las distintas estaciones del año, a qué tasa crecen los flujos, a qué horas se producen los flujos máximos (o horarios punta), etc.

Acceder a este tipo de información, a través de plataformas amigables, de manera directa y en línea, permite implementar múltiples proyectos complementarios, dado que convierte a proyectos que hasta ahora son estáticos, en proyectos vivos y gestionables. Desde este punto de vista, conocer el comportamiento de los usuarios potencia la participación de auspiciadores en los proyectos, ayuda a implementar proyectos de promoción, turismo, revitalización de barrios – como lo hace Escocia -, a priorizar proyectos, etc.

Generar información y hacerla pública, empodera a toda la comunidad interesada en favorecer al peatón y la bicicleta. Porque les brinda las herramientas para justificar proyectos de una manera sencilla, barata y efectiva, evitando así la realización de estudios de alto costo y de lento desarrollo. También ayuda a monitorear políticas públicas, programas de mantenimiento, estándares y niveles de servicio de los proyectos. Ejemplos de estas experiencias hay muchos, en este sentido es destacable mencionar los casos de Portland, Otawa, Vancouver, etc.

A modo de ejemplo, hoy son decenas de kilómetros de ciclovías que se han construido en varias ciudades de Chile y otras tantas que están por ejecutarse, sin embargo, nadie sabrá si efectivamente esos proyectos serán realmente utilizados, o bien, qué partes de esa red son utilizadas de forma intensiva en comparación con otras subutilizadas. En relación con lo anterior, y considerando los altos costos de inversión asociada que conlleva la construcción de una ciclovía, surge la necesidad de incluir en su funcionamiento, sistemas de monitoreo automático y permanente, y de tal manera, poder, en conjunto con las comunidades y las organizaciones y agrupaciones que promueven este tipo de modo de transporte, monitorear y mantener programas de evaluación permanente de la red.

Otra área de interés son los proyectos de espacios públicos, como parques, paseos peatonales o plazas. A nivel mundial hay ejemplos emblemáticos que han incluido como parte del proyecto el conteo permanente de peatones y bicicletas, como por ejemplo el proyecto Jardines de la Bahía en Singapur, y de esa manera, poder hacer mejor gestión de lo que sucede en el interior del parque. Además de lo anterior, en parques nacionales y áreas protegidas también es posible controlar los flujos de visitantes en los accesos, senderos y miradores, todo ello, con fines de conservación o de fomento al turismo.

Esta tecnología ya comenzó a utilizarse en Chile en espacios públicos y ciclovías. Un uso emblemático ocurrió durante el evento efectuado en el río Mapocho el sábado 4 de mayo de 2013. En dicha oportunidad, se instaló un contador PIROBOX en las rampas de acceso al río para contar las personas que ingresaban. El detalle de la estadística obtenida se incluye en la imagen de este artículo.