“Bus patrimonial” del Transantiago suma 13 mil usuarios en 7 meses

Pese al precio conveniente, aún no son muchos quienes aprovechan el servicio.

Rodrigo Mujica El Mercurio

Es exactamente el opuesto a la imagen más extendida del sistema de transporte público capitalino, aquella que lo muestra como sinónimo de estrés y grandes aglomeraciones. El recorrido patrimonial del Transantiago nació en abril de 2011 pensado en ser una entretención y un relajo para los capitalinos y turistas.

El servicio -identificado con el número 122- funciona todos los domingos y festivos desde las 10 de la mañana y se puede tomar a la salida del metro Quinta Normal, por Matucana. Desde ahí es posible recorrer la Estación Central, el Barrio República y el Palacio de la Moneda. Dos monitoras por micro van informando cada detalle del recorrido y las paradas.

Cien por día

Para aprovechar el circuito, basta con pagar el pasaje normal del Transantiago ($580). Al subir, el usuario recibe una pulsera que permite bajarse en alguno de los diez paraderos previstos, para sacar fotos y recorrer, y luego volver a tomar un bus 122 y continuar el recorrido.

Pese a lo conveniente del precio y las condiciones, todavía no son muchos quienes le sacan verdadero provecho al sistema. En el primer fin de semana en que funcionó, según datos de la Coordinación de Transantiago, tres mil personas se subieron al recorrido cultural. De ahí en adelante, solamente 10 mil personas han decidido conocer el centro de Santiago a bordo de una micro, un promedio aproximado de 100 usuarios por día. El momento de mayor flujo de pasajeros es entre las 12:00 y las 14:00 horas, y las paradas favoritas son Quinta Normal, Plaza de Armas y Mercado Central.

En La Moneda el circuito toma hacia el norte, con dirección a Plaza de Armas, para luego enfilar hacia el Barrio Lastarria, el Parque Forestal y la Plaza Baquedano.

En ese punto se subió Luisa Rivas en compañía de su hijo. Señala que “siempre quise que hubiera algo para conocer más la ciudad”. Piensa que si las personas no lo ocupan masivamente, puede ser por la mala fama del sistema de transportes: “Es complicado que funcione, ya que es parte del desastre que el Transantiago significa para todos”.

Después, el bus sigue por Pío Nono, para luego recorrer el Mercado Central, Plaza Brasil, calle Moneda y Plaza Yungay. Los transeúntes en la vereda miran con atención y sorpresa a la micro blanca con verde que destaca por sus dibujos en la parte delantera.

Si el usuario no se baja del bus, el circuito completo tarda una hora. En Transantiago esperan que más gente se interese y para ello están fortaleciéndolo con alianzas estratégicas con el Centro Cultural Palacio La Moneda y el circuito peatonal Barrio República, entre otros.