Valparaíso renueva oferta turística con apertura de cafés temáticos

Libros, actividades culturales, venta de artesanías y fotografías son algunos de sus atractivos.

por María Elizabeth Pérez
(La Tercera – 28/03/2011)

Comprar, arrendar o leer un buen libro, vitrinear suvenires, artesanías y textiles, apreciar muestras de óleos y pinturas o mirar fotografías en gran formato. Todo eso y más se puede hacer en la ruta de los cafés temáticos que ofrece Valparaíso. La apertura de estos tipos de locales se ha expandido en los cerros y centro porteño. En un recorrido se pueden contabilizar más de 30 cafeterías en diversos sectores del puerto.

Fotocafé es uno de ellos. El espacio está siendo adaptado dentro de la tienda que ocupa fotografía Muencke, en calle Esmeralda 1111, y abrirá en abril. “La gente esperaba su revelado o enmarcado de pie, mirando. Ahora apostamos a que esperen disfrutando un café y admirando la muestra de fotografía que tendremos”, dice Verónica Olavarría socia en el proyecto con Carlos y Gustavo Muencke. Junto a la tienda, también están contemplados un restaurante gourmet, decorado con fotografías de Valparaíso antiguo, y conciertos de música. La inversión es de $ 50 millones.

A pocos metros de ahí y en plena zona patrimonial, el Café del Poeta frente a la plaza Aníbal Pinto, ofrece aparte de una amplia gama de café y té, poesía chilena y libros de Valparaíso. También, hay venta de vajilla de porcelana.

En el Barrio Puerto, el Café Paskín Literario -en Cochrane 423-, presta, arrienda y vende libros, realiza lecturas poéticas, conciertos y exposiciones de pintura con artistas porteños.

Subiendo el cerro Concepción, el Café con Letras, de Almirante Montt 316, acompaña a sus clientes con novelas, cuentos, poesía, fotografía y más. Incluso, facilitan marcadores de libros para quienes deseen seguir la lectura en una próxima visita. El café también es reconocido como centro cultural ya que es habitual que realicen talleres de cuentacuentos y exposiciones.

A unas cuadras de ahí, Color Café, en calle Papudo, complementa el grano y sus más de 40 tipos de té con la venta de artículos como artesanías, pinturas y textiles. También hay recordatorios dejados por los clientes nacionales y extranjeros que visitan el lugar.

Siguiendo por Almirante Montt, pero ya en el cerro Alegre, El Desayunador, ofrece a sus cerca de 200 clientes diarios siete tipos de desayunos, pero a cualquier hora del día.

“Aquí viene mucho turista con la costumbre de servirse desayunos. Abrimos a la 8.15, pero hay desayunos todo el día para quienes gustan de comer abundante”, señala Patricia Delgado, la administradora.

Para la directora de Patrimonio de la Quinta Región, Paulina Kaplán, este tipo de oferta se conjuga con la apuesta de la Municipalidad de Valparaíso por hacer de la plaza Aníbal Pinto la plaza de los cafés. Además, el surgimiento de estos locales ayuda a diversificar el valor patrimonial de la ciudad. Según estimaciones, los diversos locales que rodean a la tradicional plaza porteña implican que alrededor de 1.200 personas diarias transiten por el sector.