El CMN aprueba como Zona Típica el barrio Las Flores en Providencia

© Consejo de Monumentos Nacionales

El Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) informa que el barrio Las Flores en Providencia, ubicado entre las calles Pocuro por el norte; Av. Francisco Bilbao por el sur; Tobalaba por el oriente; y calle Jorge Matte al poniente, fue declarado Zona Típica, por lo que ahora se solicitará al Ministerio de Educación la dictación del decreto para que el barrio sea declarado Monumento Nacional.

Hace algunos años los vecinos del sector, sintieron que este tradicional barrio de Providencia estaba siendo amenazados por el creciente interés inmobiliario. Fue entonces que la Municipalidad congeló los permisos de edificación para la zona y se modificó el plan regulador para regular las alturas. En este tiempo también un grupo de vecinos organizados bajo en nombre “Movimiento Vecinal al Sur de Pocuro”, con el respaldo de la alcaldesa de Providencia Josefa Errázuriz, propusieron que el barrio fuera declarado Zona Típica.

Esto fue aprobado hace algunos días por el Consejo de Monumentos Nacionales. Según publica el CMN en su sitio, la propuesta fue aprobada por mayoría de consejeros quienes destacaron que:

“En términos históricos, su urbanización es un ejemplo de cómo se poblaron entonces las chacras “al margen de lo citadino”, como se publicitaba entonces, representativa de la inventiva de autoridades locales y propietarios del suelo para desarrollar y consolidar el territorio comunal, generando loteos y subdivisiones como negocio inmobiliario y medio de financiamiento municipal, haciendo a los nuevos propietarios -sobre la base de regulaciones urbanísticas- responsables por la forma y diseño definitivo de las viviendas.

En términos urbanos, el sector se subdivide en manzanas regulares, principalmente de forma rectangular, convenientemente dispuestas para evitar la penetración de los flujos vehiculares de paso y a la vez protegida del tráfico de las vías estructurantes del exterior, con calles nutridas de arborización pública, en donde se insertan las viviendas rodeadas de jardines, creándose una masa vegetacional que -siendo fiel al modelo de ciudad jardín– genera una complementación entre el espacio público y el privado, otorgándole al conjunto una gran armonía y notable paisaje”.

También se destaca que el barrio “asocia una mezcla de estilos arquitectónicos que tratan de reflejar una imagen europea en la década de 1940”.