Premios Avonni 2015: los proyectos innovadores que mejoran nuestras ciudades

Cerros Blanco y Renca desde el cerro San Cristóbal. © David Berkowitz, vía Flickr.

Cerros Blanco y Renca desde el cerro San Cristóbal. © David Berkowitz, vía Flickr.

El Premio Nacional de Innovación, Avonni, es un reconocimiento creado en 2007 por la Fundación ForoInnovación que destaca a los proyectos que desde diferentes rubros, promueven la innovación y ayudan a generar un cambio positivo en una comunidad.

Este año, en su novena versión, hubo un 27% más de iniciativas postulantes en comparación con el año pasado, por lo que se escogieron 48 finalistas, de los cuales 17 resultaron ganadores en algunas de las 15 categorías del premio que cuenta con el apoyo del Ministerio de Economía y Corfo.

En esta oportunidad, entre los ganadores hubo cuatro iniciativas vinculadas al desarrollo de la innovación en nuestras ciudades, correspondientes a:

1. Festival Puerto de Ideas

afiche puerto de ideas valparaiso 2015

El Festival Puerto de Ideas, organizado por la fundación homónima, éste fue reconocido por su aporte a la descentralización de la cultura, ya que se realiza durante tres días en Antofagasta y Valparaíso, y ha llegado a convocar a más de 200 mil personas.

Durante su realización, cuenta con una serie de actividades, conferencias e intervenciones urbanas, a cargo de académicos, artistas, científicos y escritores, tanto nacionales como internacionales, en las que el público puede tener una instancia de diálogo directa con ellos.

2. Fundación Santiago Cerros Isla

© Fundación Santiago Cerros Isla

© Fundación Santiago Cerros Isla

La Fundación Santiago Cerros Isla, creada en 2013 por los arquitectos de la Universidad Católica, Dominique Mashini, Pía Bettancourt, Antonia Besa, Fernanda Ruiz, Ángela Mimica, Etienne LeFranc y María Catalina Picón, obtuvo el Premio Avonni Ciudad Nueva Aguas Andinas.

Este reconocimiento fue entregado por su investigación en la que concluyeron que Santiago tiene el potencial de integrar los 26 cerros que dentro de la trama urbana son islas, como los cerros La Ballena, Hasbún, Renca, entre otros.  para convertirlos en nuevos parques urbanos.

Esto permitiría que 5.600 nuevas hectáreas se conviertan en nuevos parques urbanos y así aumenten las áreas verdes por habitante a 7,8 metros cuadrados. (Si deseas conocer más de su investigación, te invitamos a leer “Santiago Cerros Isla: La ciudad en una mirada”, escrito por la Fundación).

3. Museo de Historia Natural de Valparaíso

© Museo Historia Natural de Valparaíso

© Museo Historia Natural de Valparaíso

Es el segundo museo más antiguo de Chile, por lo que posee colecciones muy valiosas. Sin embargo, tras el terremoto y posterior incendio que en 1906 azotó a la ciudad, éstas sufrieron graves daños y se tuvieron que mantener en diferentes lugares. De hecho, no fue hasta 1988 que se pudieron agrupar en el Palacio Lyon.

Con el objetivo de restaurar el museo, ubicado en calle Condell, cerca de la Plaza Victoria, el diseñador Luis Sebastián Moro, junto a un equipo integrdo por un oceanógrafo, una artista visual, un diseñador de ambientes, un diseñador industrial, un diseñador gráfico, un arquitecto y un museógrafo, inició el proceso que propuso una nueva experiencia de museo en el país.

Éste acaba de ser reconocido con el Premio Avonni en Diseño, debido a que cada una de las salas es única y permite vivir una idea de viaje para conocer los ecosistemas y el océano en un lugar que se pudo recuperar después de 11 años de trabajo.

4. Espejo de Tarapacá de Valhalla

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El ingeniero comercial Juan Andrés Camus y el economista Francisco Torrealba, pertenecientes a la empresa Valhalla, encontraron que en el sur de Iquique estaban las condiciones topográficas adecuadas para implementar una Central Hidráulica de Bombeo (300 MW) que permitiera durante el día acumular agua de mar en concavidades naturales, para liberarla durante la noche generando electricidad.

A esto, agregaron un proyecto fotovoltaico llamado Cielos de Tarapacá (600 MW), que alimenta con energía solar a la central hidráulica, lo que permite que ambas iniciativas, denominadas Espejo de Tarapacá, funcionen como una gran “batería de agua”, generando una oferta energética estable y competitiva con otras fuentes de generación. El proyecto será capaz de entregar energía limpia (24×7), económica y sin emisiones de CO2, generando aproximadamente 1500 GWh cada año, equivalentes a abastecer a más de 580.000 hogares.

Este proyecto fue reconocido con el Premio Avonni Energía Empresas Eléctricas.