Libro: Espacio, poder e identidad. Hacia un estatus urbano de lugar

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Editado por: Ediciones UNGS
Idioma: Castellano
ISBN: 978-987-630-215-9
Año: 2015
Autor: Guillermo Tella (coord.)
Se puede descargar el libro en este link

Sobre el libro:

Nuestras ciudades, entendidas como construcción social y colectiva, se encuentran insertas en redes de reproducción del capital y, para sostener la ingeniería socioespacial que sustente el lugar de producción, demandan cierto orden urbano que organice el territorio. Sin embargo, para alcanzar un orden urbano que favorezca estas estrategias de reproducción se requiere de un modelo de ciudad a expensas de la equidad, la integración y el bien común.

En ese marco, el tema aquí planteado apunta a reconocer de qué modo el desarrollo de la ciudad puede estar acompañado por metas y prácticas que no consagren la búsqueda del beneficio individual sino que tiendan a un tipo de ciudad en favor de la prosperidad colectiva y el respeto al soporte natural, la inclusión social, la redistribución justa de cargas.

Como hemos mencionado, en esa lógica se fomenta un modelo de ciudad que actúa fundamentalmente como espacio de negocios, acentuando las diferencias en el derecho que tienen los distintos sectores sociales a acceder a ella y a los bienes y servicios que eso significa. De esa manera, podemos observar cómo estos procesos generan en la ciudad nuevas relaciones entre espacio, poder e identidad.

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La ciudad, entonces, se presenta como un escenario de luchas constantes a partir de las cuales se van modelando los diferentes espacios urbanos y tejiendo las relaciones sociales que los sustentan. En ese accionar, las diferencias simbólicas de cada uno cualifican el territorio y definen ciertas marcas en el proceso de construcción de la ciudad que establecen un nuevo estatus de lugar.

Para ahondar sobre estas cuestiones, tomamos como caso de estudio al Área Metropolitana de Buenos Aires en las últimas décadas para examinar distintas perspectivas de consolidación de las centralidades, de construcción de la noción de periferias, de participación de los diferentes actores sociales. Y se han considerado dimensiones de análisis tales como: los marcos normativos, el nivel socioeconómico de la población, las políticas públicas implementadas, las preferencias sociales, la geografía del lugar, etc.

Junto a la interpretación del proceso de construcción de la ciudad, proponemos avanzar en el desarrollo de una mirada evolutiva de la periferia urbana, su expansión y su consolidación, su impronta y sus atributos. Con lo cual, nos centraremos en las características diferenciales propias de ese territorio suburbano en relación a cada escenario reciente y su estrecho vínculo de funcionalidad con las áreas de centralidad urbana.

La idea de la metropolización de Buenos Aires comenzó a gestarse como categoría político-territorial hacia finales de la década de 1940. Desde entonces esa idea ha ofrecido fuertes resistencias hasta constituirse en un objeto de estudio en sí mismo. A mediados de los años 70 fueron publicados los primeros trabajos referidos al proceso de expansión y consolidación de su periferia, con una espacialización de lo social que instalaba en clave política disputas en el territorio.

Mientras algunos autores dirigían la mirada hacia áreas consolidadas, otros permitieron espacializar las condiciones de hacinamiento, precariedad e informalidad sobre las que se fue construyendo la periferia urbana desde mediados del siglo pasado. Resulta relevante entonces comprender las razones con las que se define un tipo de sociedad por estratos a partir de una distribución espacial que define y establece diferencias en la ciudad.

Es notable observar como dichas diferencias no son sino que remiten a percepciones, definiciones, descripciones y representaciones sociales, es decir, a construcciones subjetivas. Este tipo de construcciones, realizadas como caracterizaciones, delimitaciones y diferenciaciones de lugares, personas y grupos, puede representar discursos de segregación. Proponemos entonces abordar el tema desde el análisis de los llamados “mapas-relato”.

En este contexto, el mapa no sólo describiría sino que, al ser aceptado y reproducido en determinados ámbitos, generaría un determinado orden urbano, representando las luchas de poder, expresando identidad y estableciendo diferencias socioespaciales. A partir de estas ideas, analizar también la cartografía implicaría adentrarse en una descripción gráfica que a su vez encierra un relato subjetivo e intencionado.

La ciudad no es presentada como objeto natural sino como construcción social y como producto cultural que, como tal, genera enunciados. Y la ciudad es también el campo de disputa de diversos enunciados que expresan las diferencias entre los diversos colectivos sociales que lo emiten. Y tal diferenciación pone en evidencia las articulaciones propias del mercado en estrecha relación con las oportunidades y condiciones favorables que le brinda la ciudad.

Así, observamos cómo un enunciado se caracteriza por ser conclusivo, delimitado y diferenciado; y además, cómo su existencia sostiene las condiciones necesarias de reproducción. La respuesta que ofrece tal enunciado termina siendo en sí mismo otro enunciado que debemos develar. Y este es uno de los principales desafíos que presenta esta investigación.

En consecuencia, en la ciudad encontramos diferentes formas de organización de sus elementos y funciones, y podemos asociarlas a varios discursos: el discurso del orden, dado por el Estado a espacios y actividades; el discurso del poder, dado por las relaciones de fuerza instaladas; el discurso de la diferenciación, dado por su propia cualidad urbana. Existe entonces una suerte de discurso urbano, legitimado socialmente, en el que la ciudad “nos habla” para expresar orden, poder y diferenciación.

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Contenidos:

Índice de contenidos

Presentación

a. La ciudad

Inversiones, reproducción social y orden territorial por Juan Donato Lombardo

b. La periferia

Representaciones simbólicas y construcciones discursivas por Guillermo Tella y Jorge Amado

Reflexiones finales